Prevé acabar el 2023 con una cifra de negocio de más de 40 millones de euros

En España, el cuarto país del mundo en esperanza de vida, hay más de un millón de edificios que aún no tienen ascensor. Además, el 50% de los ascensores existentes tiene una antigüedad superior a los 25 años. Para impulsar la instalación de soluciones de movilidad vertical, desde el 2013, la ley de propiedad horizontal española obliga a una comunidad de vecinos a instalar un ascensor si lo solicita una persona mayor de 70 años o con discapacidad, ya sea propietaria, arrendataria o alguien que trabaja o presta servicios voluntarios en el inmueble. La empresa familiar Aszende ha sabido aprovechar esta oportunidad del mercado y ha registrado un importante crecimiento de la actividad en los últimos cinco años, multiplicando por dos la facturación, hasta los 40 millones de euros, con los que la compañía prevé cerrar el 2023.

Alfredo Palencia Tejada, CEO de Aszende.

En Madrid, donde se estima que más del 40% de los edificios de tres plantas o más no cuentan con ascensor, Aszende tiene la principal delegación en volumen de negocio. La compañía abrió sus oficinas en la capital en el año 2014 y en los últimos cinco ejercicios ha multiplicado por cinco su facturación en esa zona. Para mantener el actual ritmo de crecimiento, la compañía ha adquirido una compañía del sector y se encuentra en negociaciones para integrar otras dos. También está ampliando las instalaciones, que tendrán una capacidad cuatro veces superior a las actuales.

A nivel nacional, Aszende también ha doblado la plantilla, que ha pasado de 150 personas a más de 300, repartidas entre la sede central de la empresa, ubicada en Barcelona, y 16 delegaciones en el territorio nacional (cuatro de las cuales se han abierto durante los últimos años). Por otro lado, la compañía cuenta con una fábrica propia en Zaragoza.

Con más de 45 años de recorrido, Aszende se dedica al diseño, fabricación, modernización y mantenimiento de ascensores, escaleras, productos de accesibilidad y puertas automáticas. El área de instalación de ascensores en edificios que carecían de los mismos ha incrementado su volumen de negocio hasta representar una cuarta parte del total de la facturación de 2022.

“Es una división en constante expansión y aunque las comunidades de propietarios siempre han sido nuestros principales clientes, en los últimos diez años hemos apostado fuertemente por universalizar la accesibilidad a todos los edificios, buscando una solución adecuada a cada necesidad concreta”, explica Alfredo Palencia Tejada, quien, desde 1999, lleva las riendas de esta empresa fundada por su padre.

Aszende ofrece sus servicios a todo tipo de edificios con necesidades verticales. “Tenemos grandes clientes como Grupo Barceló, Decathlon, Five Guys, La Promo o Quadis...”, enumera el consejero delegado (CEO) de Aszende. Entre las actuaciones más emblemáticas realizadas recientemente por la empresa destaca un ascensor circular panorámico en las instalaciones que la prestigiosa firma de joyería Rabat posee en Madrid.

España cuenta con más de 1.154.000 millones de ascensores instalados, siendo el primer país del mundo en ratio de ascensores, con 20 por cada 1.000 habitantes. Por ley, estas instalaciones deben estar sometidas a un mantenimiento preventivo periódico obligatorio, lo que convierte el mantenimiento en la principal actividad de Aszende y de las demás empresas del sector.

Además de ocuparse de la inspección y cuidado de los diversos componentes que conforman la estructura y el funcionamiento de los ascensores de la compañía, Aszende se encarga del mantenimiento de soluciones de movilidad vertical de otras marcas. Así, en la actualidad gestiona un parque de más de 20.000 equipos repartidos por todo el país. En concreto, los servicios de mantenimiento representan más de la mitad de la actividad de la compañía.

Bajo el claim de ‘Ascensores que mueven vidas’, Aszende busca facilitar la vida de las personas, eliminando cualquier barrera arquitectónica y ofreciéndoles la mejor solución adaptada a cada cliente y cada situación. Para cumplir con esta misión, la compañía evoluciona pensando en las necesidades y el bienestar de los clientes y obedeciendo siempre a los más altos estándares de calidad del sector.

Las principales líneas de I+D de Aszende en la actualidad son las siguientes:

• Ascensores verdes conectados a energías renovables como paneles solares.
• Sistemas de eficiencia energética y tecnologías de acumulación de energías para reducción del consumo.
• Ascensores con huida o escape reducido (espacio necesario que queda por encima de la última planta a la que llega un ascensor) en edificios nuevos, para facilitar azoteas planas que permitan su construcción e impermeabilización sin salientes, lo que conlleva una mejora en el aislamiento de las cubiertas y en la integración en los diseños urbanos.
• Metodologías y herramientas de monitorización de ascensores para el mantenimiento preventivo/predictivo y de forma remota.
• Ascensores accesibles adaptados para personas con discapacidades físicas, sensoriales y/o cognitivas.