Sika apuesta por la construcción industrial al servicio de la sostenibilidad
Sika apuesta por la construcción modular industrializada y pone al servicio del sector su amplia gama de productos, desarrollados en el ámbito de las soluciones industriales. Según se recoge del informe de Green Building Council España (GBCe) sobre Economía Circular en la Edificación, entre un 10% y un 15% de los materiales se desperdician durante el proceso constructivo y el 54% de los mismos no se reciclan y terminan en el vertedero.
La construcción modular podría ser la respuesta a este problema, ya que ofrece grandes ventajas, desde el punto de vista medioambiental, al permitir un mayor control del proceso, reduciendo el impacto del edificio a lo largo de toda su vida útil. Y al término de la misma, se pueden llegar a reciclar hasta el 60% de los materiales empleados en la ejecución del inmueble, dándoles una nueva vida.
En este contexto, Sika, con una amplia experiencia como proveedor de soluciones y sistemas completos para proyectos constructivos, pone a disposición de las empresas especializadas en construcción industrializada su amplia gama de soluciones para lograr edificios más resistentes, resilientes, sostenibles y saludables. Además, la compañía ofrece un servicio 360º con el asesoramiento técnico necesario a través de Klave by Sika, para que el desarrollo del proyecto sea todo un éxito.
Sika cuenta con una amplia gama de productos y sistemas que abarcan desde el sótano a la cubierta. Para el exterior ofrece soluciones que van desde aplicaciones para el aislamiento (sistema SATE en fachada), sellado de tuberías, desagües o instalaciones como el aire acondicionado, hasta la instalación de carpinterías (puertas y ventanas) o la impermeabilización de la cubierta.
Para el interior, la compañía dispone de sistemas que mejoran la protección frente al fuego (sistemas pasivos), adhesivos y selladores para elementos cerámicos, de madera o metálicos, además de soluciones que mejoran la instalación de los paneles sándwich, para la tabiquería interior. Con esto, se consigue una producción más rápida, una mayor elasticidad en los procesos, una reducción de peso y una mayor durabilidad, aumentando la vida útil del edificio y reduciendo su huella ambiental.
