El sector productor exige una 'destilación de crisis' para el sector vitivinícola al Marm
22 de febrero de 2010
Desde hace bastantes meses, el sector productor vitivinícola español experimenta una situación crítica por el desequilibrio existente entre oferta y demanda, resultado de la recesión de las exportaciones, en volumen y valor, desde comienzos del año 2009, junto a una fuerte bajada del consumo interno desde hace años. Todo ello, ha producido un exceso de la oferta disponible, traducido en una reducción alarmante de los precios en origen y un crecimiento de las existencias al final de la pasada campaña. En opinión de las organizaciones portavoces del sector productor, este frenazo en términos de ventas exteriores y consumo interno, se debe en parte, a la crisis económica y financiera general, aunque también a la puesta en marcha de una nueva organización común del mercado (OCM) vitivinícola. En este último caso, y según las organizaciones agrarias, se han desmantelado todos los mecanismos de regulación, dejando desprotegido al sector ante situaciones de crisis como la actual.
Todo el sector productor ha reconocido que la reducción de cosecha de la última vendimia no ha mejorado el comportamiento del mercado, que continúa estancado, por lo que ha decidido solicitar al Marm la puesta en marcha de una destilación de crisis, a fin de retirar una parte del exceso de oferta y que el mercado recupere su funcionamiento normal. De igual modo, se pide que a la destilación solicitada sólo accedan las bodegas que cumplan en esta campaña con los requisitos exigidos para el cobro de las ayudas por superficie vinculadas a la destilación de usos de boca, salvo que no dispongan de una referencia histórica de entregas a la última destilación. Esta medida reglamentaria sería la única capaz de restablecer a corto plazo el ritmo normal de las transacciones comerciales y reanimar los precios en origen, en buena parte por debajo de los costes de producción. En consecuencia, muchas bodegas elaboradoras sufren pérdidas y graves dificultades en el día a día, a la vez que repercute en la renta de los productores de uvas.
La normativa vigente permite destinar a la 'destilación de crisis' hasta un 15% de los recursos comunitarios del sector incluidos en el sobre nacional de apoyo, es decir, con un 5% de fondos nacionales. En esta campaña, tan solo se puede dedicar un montante económico máximo de 56 millones de euros. Con ello, se lograría destilar casi 2,5 millones de hectolitros, para la que se sugiere un precio único de 1,91 euros por grado y hectolitro. Finalmente, se ha solicitado una reunión urgente al secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, con todos los agentes representativos para tratar éste y otros asuntos concernientes al sector.