Los precios de la uva caen hasta un 50% en el ecuador de la vendimia
8 de octubre de 2009
En el ecuador de la vendimia, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (Coag) ha denunciado que los precios de la uva se han desplomado en las principales zonas productoras hasta un 50%. La caída se ha producido a pesar del significativo recorte de la cosecha previsto, unos 37 millones de hectólitros frente a los 41,5 del pasado año. Por regiones, en La Mancha, que supone más de la mitad del viñedo de nuestro país, el recorte alcanzará el 40%.
El sector vitivinícola español experimenta una grave crisis de mercado que afecta especialmente a los viticultores: muchos no cuentan con ayudas directas compensatorias como en otros sectores y sus ingresos dependen exclusivamente de la venta de la uva. “Conforme a lo recomendado por las administraciones, hemos adaptado nuestras variedades a las que supuestamente tenían mejor salida comercial; hemos invertido para modernizar las infraestructuras de nuestras cooperativas; hemos pasado de tener “químicos” a contar con enólogos de relieve para elaborar caldos de calidad a precios competitivos… Y con todo, lejos de mejorar nuestras rentas y dar ese salto necesario hacía el futuro nos encontramos con unos precios de la uva similares a los de hace décadas y un aumento de los costes que nos precipitan más bien hacía el vacío”, ha argumentado el responsable del sector vitivinícola de Coag, Alejandro García Gasco. De hecho, cerca de 40.000 viticultores sufren pérdidas ya en la mitad de la vendimia, y en muchos casos, desconocen el precio que finalmente percibirán.
Actualmente, Coag trabaja con la administración estatal y las comunidades autónomas para diseñar un contrato homologado para el sector que asegure unos precios por encima de los costes de producción. “Agricultores e industria estamos condenados a entendernos y en este sentido debemos avanzar en la firma de contratos con carácter plurianual que se revisen cada campaña. Necesitamos además el protagonismo de las cooperativas en sus mercados de influencia para establecer unos precios de referencia equiparables a los costes del viticultor”, ha reconocido García Gasco. El contexto global no invita al optimismo: las exportaciones han caído un 15,7% en valor y un 16,6% en volumen durante el primer semestre del año y la demanda continúa su tendencia a la baja de los últimos años, agudizada por la crisis económica.