Reino Unido descarta introducir aranceles a las importaciones agroalimentarias de la UE
El ministro del Gabinete británico, Michael Gove, aseguró que ya no habrá más prórrogas sobre el Brexit, previsto para el 31 de diciembre. Con ello, ya no habrá más debates y el Reino Unido abandonará la Unión Europea (UE) con o sin acuerdo.
Con ello, el Reino Unido descarta también introducir aranceles a las importaciones agroalimentarias de la Unión Europea, como las avanzadas por la SeVi en concreto para el sector del vino. Por el contrario, se limitará a establecer un régimen temporal más ligero de control en los puertos más grandes a partir de enero de 2021.
El Reino Unido ha abandonado sus planes originados de introducir controles aduaneros a las importaciones de la UE a partir del 2021, cuando culminará el periodo de transición acordado, retrasado, entre otras cosas, por el impacto que ha tenido la pandemia del coronavirus en la economía.
Con esta decisión, las mercancías del Reino Unido pueden sufrir los mismos controles cuando ingresen en territorio comunitario. Aunque la UE no se ha pronunciado al respecto, el organismo siempre se ha pronunciado en contra de un acuerdo en el que solo una de las partes sea beneficiada.
Por otra parte, la Oficina Económico y Comercial (Ofecomes) de la Embajada de España en Londres reveló un informe en el que brinda algunas perspectivas del sector vitivinícola. En este revela la posibilidad de la instauración de posibles aranceles y medidas no arancelarias, lo cual significaría un mayor coste para los productos importados y un impacto negativo en las importaciones del vino español.
La industria vitivinícola de España frente al Brexit
El vino no solo es una bebida de acompañamiento sino que, además, para muchos se ha convertido en una bebida casi medicinal. Según la web Guiadesuplementos.es, ‘’aporta polifenoles y resveratrol, importantes antioxidantes que controlan el colesterol y detienen el envejecimiento celular’’. Su sabor, textura y propiedades han permitido que la bebida adquiera gran popularidad, en 2017, se produjeron 250 millones de hectolitros de vino en el mundo.
El vino español ha registrado números impresionantes en los últimos años. Solo en el primer trimestre de 2020, la exportación vitivinícola se contrajo un 10,7% en volumen y un 5,7% en valor, hecho ocasionado por la paralización económica. En 2018 el vino español fue el más exportado del mundo.
El informe de Ofecomes precisa que, aunque el consumo de vino ha disminuido, se ha posicionado en un nuevo sector: los jóvenes. Las nuevas generaciones están dispuestas a pagar un precio mayor por una botella, por lo que el valor del consumo permanecería estable por más tiempo. Los productos considerados ‘premium’ salen mejor favorecidos en estas circunstancias.
De acuerdo con la publicación, la exportación y consumo de vino espumoso sigue en cifra ascendente, lo cual se atribuye a que los consumidores buscan una bebida que tenga frescor y que sobreviva en el largo plazo.