Templado químico: una nueva forma de asegurar el futuro
El vidrio templado químicamente se desarrolló inicialmente para diferentes mercados, como pueden ser el aeroespacial, náutico, balístico y electrónico, en los que está catalogado como el vidrio a utilizar al ser considerado casi irrompible, de perfecta transparencia y de mayor valor añadido que el vidrio templado térmicamente.
Integración de vidrio como muro en piscina. Foto de Carlos Caceres Lavergne.
El baño con sales de potasio al que se somete, genera unas tensiones superficiales en sus capas más externas que mejoran sus propiedades y permiten reducir el espesor del vidrio en cualquier tipo de aplicación. Este efecto se refleja en la disminución del peso total que conlleva la reducción del coste de la propia estructura de sustentación y facilita su montaje y ejecución.
Recientemente está creciendo una inquietud en el mercado; se quieren aprovechar las altas cualidades de un vidrio templado químicamente y adaptarlas a las tendencias del mercado arquitectónico moderno, ampliando así el número de aplicaciones al que destinarlo. Entre ellas cabe destacar:
- Vidrios curvos: Aportan mayor seguridad gracias a un mejor templado.
- Vidrios en piscinas: Se ve reducido el espesor del vidrio, requiere menor estructura y su resistencia aporta mayor seguridad.
- Marquesinas ligeras: Mejor resistencia a la flexión.
- Suelos: Existe un menor riesgo de rayaduras sobre el vidrio.
- Fachadas y ventanas: Seguridad ante roturas y transparencia.
- Barandillas: Se obtiene una mayor flexión con menos estructura.
- Escaparates o vidrierías comerciales: aumento en la seguridad y mejora de la óptica sin deformaciones.
En el mercado arquitectónico vemos que las formas en los vidrios están pasando a ser una de las partes con mayor relevancia en un proyecto. Gracias al templado químico se obtiene una solución de la seguridad en los vidrios curvos laminados, incluso en aquellos de radio no continuo o con más de un radio, con inmejorables prestaciones en términos de seguridad, durabilidad y belleza estética, que son pilares básicos en cualquier obra o proyecto constructivo. Teniendo en cuenta el alto valor añadido del vidrio se verá compensado con una reducción del coste estructural de sujeción o de herrajes. Además, y también en relación al curvado del vidrio, hay que destacar que, en el proceso de templado químico, se conservan exactamente los radios de curvatura originales al contrario de lo que puede ocurrir durante el proceso de templado térmico donde los radios de curvatura podrían llegar a sufrir alteraciones.
Asimismo, su uso es idóneo en algunas aplicaciones constructivas enmarcadas ya que, en caso de rotura, su fragmentación es muy similar (esta se produce en largas piezas y ramificaciones, desde el punto de impacto hacia los bordes del vidrio); esto favorece que los trozos se queden sujetos al marco, ventana o estructura en lugar de desprenderse y caer al vacío en pequeños y múltiples fragmentos que desde ciertas alturas son auténticos proyectiles. Se minimiza el riesgo de impacto sobre personas u objetos. En aquellos casos que la fragmentación suponga un problema, deberemos laminar el vidrio. Se obtiene así, gracias a la combinación de ambos procesos, un vidrio de seguridad insuperable a través de cualquier otra composición.
Por tanto, y a modo de resumen, se puede determinar que un vidrio templado químicamente, principalmente, dispone de las siguientes ventajas significativas frente a un vidrio con temple térmico:
- Transparencia perfecta, sin ondas que generan distorsiones ópticas y sin posibilidades de apariciones de anisotropías en los vidrios una vez han sido instalados.
- Una mayor seguridad al incrementar sustancialmente las propiedades mecánicas.
- Se reduce el coste estructural o de herrajes: a mayor calidad o prestación debido al menor espesor de vidrio y a su ligereza.
- Reducción del coste en vidrio laminado por su perfecta planimetría que minimiza el número de capas a colocar, así como el espesor de vidrio a utilizar.
- Alta resistencia a la flexión: al mejorar sus propiedades mecánicas es capaz de absorber mejor las tensiones producidas por las cargas permanentes y variables que se le proyectan.
- Alta resistencia a la rayadura: la modificación química de su composición le capacita para ofrecer una mayor dureza y dificulta sustancialmente que sea rayado.
Servicio de templado químico ofrecido por i-ON by PUJOL
Conocedores de esta realidad, Hornos Pujol ha desarrollado su sistema de templado químico; y en cuyo desarrollo ha participado todo el equipo de know-how de la compañía. El PUJOL-TQ SYSTEM se presenta con cuatro medidas posibles (21x12/25x20/30x15 y 30x18).
i-ON by Pujol, empresa perteneciente al Pujol Group, cuya actividad principal es la producción de soluciones inteligentes aplicadas al vidrio, ofrece un servicio de fabricación de vidrio templado químicamente con el objetivo de aprovechar sinergias y reducir el riesgo e inversión inicial a sus clientes, dando la opción a adquirir más adelante, si lo ve necesario, un horno con inmejorables características:
- Reducida inversión.
- Know how desarrollado por Pujol.
- De baja potencia instalada.
- Producción pequeña y de alto valor añadido.
- Flexibilidad de espesores.
- Posibilidad de templar vidrios curvos de radio no continuo.