Edgetech celebra el 30º aniversario de Super Spacer

En proyectos de construcción exigentes y sostenibles, el valor Psi de un ‘warm-edge’ no es lo único a tener en cuenta. La estética, la precisión, la aplicación automatizada y la durabilidad son temas importantes de la eficiencia energética, como lo demuestran dos proyectos emblemáticos en Viena y Vilnius.

Cuando en 1989 se introdujo el primer sistema de espaciador ‘warm-edge’ sin metal del mundo en forma de Super Spacer, el término sostenibilidad estaba pasando de ser un nicho de mercado a una tendencia principal. “Super Spacer ya ofrecía la opción de optimizar térmicamente los bordes de sellado incluso antes de que se iniciara la era de los acristalamientos aislantes térmicos bajoemisivos. Por ello, nos sentimos orgullosos de ser los pioneros del ‘warm-edge’”, afirma Joachim Stoss, director general de Edgetech Europe GmbH.

La filial europea de Quanex Building Products Corporation, que produce sus espaciadores flexibles en los Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania, se muestra muy optimista sobre el futuro. La industria prevé un mayor endurecimiento de la normativa sobre construcción energéticamente eficiente, mientras que los constructores e inversores más ambiciosos también están colocando la sostenibilidad, en todas sus facetas respecto a edificios nuevos, en el primer lugar de su lista de prioridades. Un reciente estudio de mercado realizado por Global Market Insights pronostica para el año 2024, solo en Alemania, una demanda anual de 100 millones de metros de’warm edge’ para edificios comerciales.

“Un bajo valor Psi para el puente térmico en el canto del vidrio es, y seguirá siendo, un esencial activo para un balance energético positivo”, según Hanspeter Petschenig, director general de Petschenig glastec GmbH. En el caso de su último proyecto insignia, los atractivos ‘Parkapartments Am Belvedere’ y el ‘Hotel Andaz Vienna’ en el Belvedere de Viena, planeado por Renzo Piano Building Workshop, el procesador de vidrio austriaco suministró unos 15.000 metros cuadrados de vidrio aislante térmico y acústico, así como elementos completos de vidrio aislante de protección ante caídas, con Super Spacer. La empresa Flintermann Glasverdelungs GmbH, con sede en Baja Sajonia, Alemania, contribuyó proporcionando elementos de vidrio aislante curvado para algunas de las esquinas del edificio. “La exigente geometría de los cristales puso a prueba a nuestro equipo”, explica Reinhard Gruber portavoz autorizado de esta firma. Conjuntamente con Super Spacer TriSeal Premium Plus se han instalado cinco acristalamiento individuales de gran formato, con conicidad recta en los extremos y una curva central con un radio muy estrecho, para formar unidades de vidrio aislante de triple acristalamiento.

El proyecto inmobiliario en el nuevo distrito urbano de Belvedere, al sureste de la principal estación de ferrocarril de Viena, fue encargado por una empresa conjunta conformada por Grupo Signa/Hyatt, y fue todo un reto. El desarrollador del proyecto original ya había contratado a Renzo Piano, el arquitecto italiano en 2008.

Se diseñó un edificio de gran altura, de última generación, que se levantaría en las inmediaciones de los terrenos del palacio barroco del Belvedere, del jardín suizo y de los jardines botánicos. El diseño se hizo de tal manera que el patrimonio mundial del Belvedere no se viera afectado.

Los 342 apartamentos y el hotel de 303 habitaciones con ‘skybar’, salón de baile y una gran área de convenciones están repartidos en cinco torres con plantas poligonales montadas sobre esbeltos pilares de varios metros de altura. Las columnas de Piano se inspiraron en los troncos de los árboles de los parques circundantes. Las zonas verdes bajo las torres tienen el efecto de extender el jardín suizo contiguo a los terrenos que ocupan más de 10.000 metros cuadrados. La hermosa vista de Belvedere se transforma de forma impresionante dando la sensación de que los primeros pisos flotan sobre las copas de los árboles. Asimismo, desde las torres emerge una vista única e impresionante de Viena que se extiende a lo lejos.

Para la planta baja de las dos torres del hotel se ha optado por una fachada de 28.000 metros cuadrados de parteluz y travesaño. En homenaje a la histórica fachada de ladrillo del antiguo arsenal de Viena, Renzo Piano optó por la cerámica, un material que Piano utiliza habitualmente por su origen natural, durabilidad, capacidad de reflejar la luz y versatilidad. Entre otras cosas, en los 5.600 elementos de la fachada, Strabag Metallica, responsable del proyecto, instaló 60.000 tiras de cerámica esmaltada gris, con un peso total de 770 toneladas, y 1.100 unidades de triple vidrio aislante. Sólo pasaron seis meses desde la emisión de la primera orden de trabajo en mayo de 2017 hasta la instalación del primer elemento. Una tarea hercúlea, ya que entre la planificación o el diseño y la fabricación de los componentes había que pasar por un proceso de pruebas que requería mucho tiempo. Todos los elementos tuvieron que demostrar en prueba de simulación, así como en el banco de pruebas, que cumplían con los altos requisitos de ingeniería civil que se aplican al aislamiento térmico y acústico.

“Sin una línea de vidrio aislante automatizada, es prácticamente imposible abordar un proyecto con plazos de entrega tan ajustados y tales especificaciones de calidad”, afirma Hanspeter Petschenig. “La aplicación robotizada de Super Spacer flexible garantiza por un lado, el paralelismo total de los cristales; por otro lado, la producción es mucho más rápida, ya que un espaciador flexible y termofijado no tiene que doblarse, ni llenarse, ni conectarse, ni aplicarse a un poliisobutileno. Especialmente en el caso de los grandes acristalamientos de suelo a techo, como los utilizados en el proyecto Belvedere, la aplicación precisa hasta el último milímetro del distanciador flexible constituye un criterio decisivo. Según Petschenig, la apariencia de un espaciador presupone un rendimiento cada vez mayor. ”Super Spacer refleja el color del perfil del marco y, por lo tanto, tiene un color completamente neutro", explica.

Super Spacer también tiene una gran demanda en proyectos de fachadas sostenibles del norte de Europa. El Green Hall Valley, con sus tres centros de negocios en la capital lituana de Vilnius, diseñado por Arrow Architects de Dinamarca, es uno de ellos. La refrigeración del local mediante circulación de aire garantiza un microclima agradable. Una bomba de calor geotérmica cubre más del 80% de las necesidades de calefacción y refrigeración.

Proyecto Green Hall, en Vilnius, Lituania.

El primer complejo de edificios Green Hall 1 se construyó en 2009, mientras que el Green Hall 2 se inauguró en 2017. El edificio de clase A de eficiencia energética es también un buen ejemplo de cómo la arquitectura puede fusionarse armoniosamente con el medio ambiente.

La gran fachada sigue la curva del río Neris, en cuyas orillas se encuentra el valle de Green Hall, y el paisaje se refleja en los cristales de las ventanas. Los coches circulan bajo tierra, lo que garantiza que el aspecto natural general no se vea afectado. Los elementos de fachada fueron fabricados por Schüco en Alemania, mientras que la planificación y la empresa KG Constructions UAB hizo montaje se hizo in situ en Lituania. Los arquitectos prestaron atención a los principios de sostenibilidad incluso en los detalles más minúsculos. Así, las varillas aislantes del sistema de fachada se fabrican con poliamidas a partir de materias primas renovables.

Con el fin de permitir la máxima entrada de luz natural y, por tanto, también de energía térmica en el interior del edificio, la doble fachada de 3.800 metros cuadrados está formada por unidades de triple vidrio aislante con acristalamiento de control solar en el exterior y acristalamiento de aislamiento térmico en el medio. Así, se consigue un impresionante valor Uw de 0,6 W/m²K. Flintermann Insolierglas GmbH suministró las unidades de triple vidrio aislante cóncavo-curvado para las esquinas curvas de la fachada, en un formato de 2.800 x 3.800 utilizando exactamente el mismo diseño de cristal de ventana, y Super Spacer TriSeal Premium Plus de 16 mm como espaciador.

“Super Spacer TriSeal Premium Plus es nuestro producto para el procesamiento manual sencillo con acristalamiento aislante de gran formato y cristales de vidrio para fachadas, debido a que ya preaplicamos el sellado de poliisobutileno ”, explica el portavoz autorizado de Edgetech, Johannes von Wenserski. Reinhard Gruber añadió: “Cuando se utilizan unidades de vidrio aislante curvadas de este tamaño y. lo que es más, en una zona climática donde puede hacer mucho frío en invierno y mucho calor en verano, el espaciador es de particular importancia para la durabilidad de la junta de sellado. Un espaciador flexible compensa cualquier movimiento de bombeo relacionado con el clima, reduciendo así la presión sobre la junta primaria, al tiempo que también nos proporciona la flexibilidad necesaria durante la producción de formas curvadas especiales”.