Cómo se afronta la seguridad en el comercio minorista
La crisis generada por el coronavirus está afectando gravemente al pequeño comercio en España. Las medidas adoptadas para atajar la pandemia están provocando una importante caída de la actividad y de la facturación sectorial, que podría llegar a superar el 30% hasta final de año, según datos de la patronal CEC. Sin una fecha segura sobre la vacuna, con nuevos rebrotes y más restricciones ya anunciadas, son muchas las incertidumbres, las dudas e inquietudes que se presentan, en una actividad en la que la proximidad, la cercanía y la confianza con los clientes son fundamentales.
Para ayudar a los comercios minoristas a adoptar las medidas de seguridad y saneamiento más adecuadas, Unión de Mutuas ha elaborado una Guía de Buenas Prácticas para el Sector Comercio, enfocada hacia los empresarios, los trabajadores, pero también a generar confianza y seguridad de los consumidores.
Se trata de un protocolo con información clara y concisa con el que “queremos apoyar a las empresas minoristas a implementar medidas preventivas, de desinfección, limpieza, de higiene, y distanciamiento social que ayude a desarrollar la actividad laboral con la máxima seguridad posible, preservando la protección tanto de los trabajadores como de sus clientes frente a la exposición al virus”, ha destacado Emilio Gómez, Responsable de Prevención de Unión de Mutuas.
Así la guía incide en la importancia de que empresas, trabajadores y clientes, cumplan con las medidas de limpieza y desinfección, uso de mascarillas, y uso de soluciones para la higiene de manos antes de entrar en las tiendas y antes de probarse o manipular artículos. Además de los desinfectantes, destaca evitar la manipulación de los productos y, en su caso, activar cuarentenas de 14 días en aquellos productos o piezas que se hayan probado o hayan sido devueltos por los consumidores.
Para el Responsable de Prevención de Unión de Mutuas, “las buenas prácticas, la concienciación, la responsabilidad y la prudencia de las empresas, los trabajadores y los consumidores, son fundamentales para hacer frente a la pandemia y conseguir que el pequeño comercio y de proximidad siga desarrollando su actividad con la atención cercana, la seguridad y la confianza de siempre”.