Textil Balsareny. Calidad y producción propia son la clave para ser competitivo
Textil Balsareny es un buen ejemplo de empresa familiar que se ha mantenido fiel a la tradición del trabajo bien hecho. Con más de cien años de historia, ha entrado en el siglo XXI con la filosofía y las herramientas necesarias para hacer frente a un mercado cada vez más competitivo. Su compromiso con los clientes es la razón de ser la firma, que optimiza constantemente su producción y servicios.
Situada en Balsareny, el topónimo al que debe el nombre, la empresa cuenta con telares propios de última generación, como puede visualizarse en el vídeo de su web, www.textilbalsareny.com. Aparte de poder asumir una importante producción, su parque de maquinaria le permite suministrar los productos de una manera continuada y desarrollar encargos personalizados.
La firma controla todo el proceso de producción, desde la hilatura que entra en el tinte hasta la entrega de las piezas al cliente. Únicamente trabaja con hilo peinado de calidad, con la certificación Oekotex Standar 100. Desde hace años, un mismo proveedor se encarga del tintado, utilizando colorantes sólidos que aseguran la calidad y la regularidad en los colores. También su proveedor de acabados y mercerizados es un referente a nivel nacional.
Los productos de Textil Balsareny con mayor demanda son los vichys en las composiciones 50% algodón con 50% poliéster y 30% algodón con 70% poliéster. Los clientes de la firma son en su mayoría confeccionistas de vestuario laboral para todos los sectores, aunque parte de la producción va destinada a prendas infantiles y batas escolares. Conociendo su uso y su valoración, puede afirmarse que los tejidos de la firma responden ante un uso intensivo con estabilidad, sin producir peeling y con solidez en los colores.
Otra de las cualidades que caracterizan a la empresa es su agilidad de respuesta. Mantiene un gran stock, tanto de tejido en crudo como acabado, en un almacén logístico de más de mil quinientos metros cuadrados. La versatilidad es también parte de su esencia, que le permite tirajes cortos y grandes producciones, así como el desarrollo de productos de acuerdo a las necesidades específicas de un cliente.Emili Bonals, gerente de la empresa y representante de la cuarta generación de la familia fundadora, nos da su opinión sobre la evolución del mercado: “Aunque atravesamos por tiempos difíciles, se percibe la tendencia de valorar más la calidad. Por otra parte, se está viviendo la problemática de las importaciones asiáticas que han desembocado en el desabastecimiento de las empresas textiles sin producción propia. Estas circunstancias nos ratifican en que estamos en el buen camino”.