Y tú, ¿eres de "casual week"?
Los hombres son los que más han sufrido esta obligación. No tanto las mujeres porque ellas pueden tirar de algún vestido elegante, y porque evidentemente, la corbata, que es lo más incómodo, no es prenda de mujer. A lo largo de estos últimos años, y como ya comentamos hace unos días, de cada día más el casual friday se implementa en gran parte de las empresas.
Aun así, en esta última década, la seriedad y la obligatoriedad de vestir uniforme se relajan. Empezó con la tradición anglosajona del casual friday, y en algunas empresas se ha derivado a la casual week.
Lógicamente, se tiene que saber ir vestido para la ocasión. Si trabajas en un banco,por ejemplo, de cara al público, es más difícil que la etiqueta "se relaje". Pero si el trabajo que desarrollas es en una oficina de espaldas al público, el look casual puede imperar toda la semana. Eso sí, un look casual arreglado, sin caer en el sport.
En la actualidad, pues, el código de etiqueta queda cada día más olvidado. Como siempre decimos, hay que saber combinar elegancia y funcionalidad cuando hablamos de uniformes o ropa de trabajo, porque en realidad, el objetivo de ir a la oficina es eso...trabajar.
Hay que intentar evitar, pues, que la ropa te apriete, sudores insoportables en julio y agosto o sentirte extraño vistiendo traje. Recordemos que la comodidad, la funcionalidad y la estética deben primar a la hora de desarrollar una tarea.
Quizás, la generación que sube ya haya olvidado, en muchos lugares de trabajo, el código estricto de vestimenta, y se quede en una anécdota " de cuando mis padres eran jóvenes". O quizás no, pero todo apunta a la superación del código actual.