Gicalla ha diseñado un concepto de hormigonera integrando los materiales más ligeros y resistentes con la última tecnología del sector. El resultado es GH1, una máquina pensada para rentabilizar el trabajo disminuyendo el peso del vehículo y aumentando su capacidad de carga.
Las hormigoneras Gicalla consiguen mantener en óptimas condiciones el hormigón a través de una sencilla configuración, obteniendo los siguientes beneficios:
Seguridad: el punto de equilibrio de la hormigonera está situado en una posición más baja, por lo que hay una mayor estabilidad en la conducción del conjunto.
Rentabilidad: gracias a la configuración de las aspas se consigue una mayor rapidez en la carga y descarga del producto, por lo que se obtiene un ahorro de tiempo.
Calidad: botella con diseño menos cónico, favoreciendo el reparto del material, por lo que se consigue un amasado más uniforme.
Eliminación de roturas: la fijación entre la superestructura que aloja la hormigonera y el chasis del vehículo absorbe las torsiones con mayor flexibilidad.