La universidad de Innsbruck necesitaba un almacenamiento central y flexible que se pudiera instalar
sin problemas en un nuevo emplazamiento, teniendo en cuenta el traslado previsto para 2012 a un
nuevo edificio. Denios consiguió en poco tiempo un sistema formado por seis contenedores
antiincendio que permitían el almacenaje eficiente y totalmente seguro de las más diversas sustancias
peligrosas.
El reto
La Leopold-Franzens-Universität de Innsbruck ofrece, como universidad de gran tradición, una amplia oferta de formación e investigación con más de 16 cursos. La universidad da trabajo a unos 4.500 empleados y ocupa una superficie útil de más de 200.000 metros cuadrados, con un total de 75 edificios. En unos 3 años está previsto el traslado a una nueva construcción.
La universidad de Innsbruck no tenía hasta ahora ninguna opción de almacenamiento para sustancias peligrosas que cumpliese la normativa legal. En el recinto universitario se almacenaban, de forma descentralizada, las más diversas sustancias peligrosas, como líquidos inflamables o sustancias contaminantes del agua, corrosivas y venenosas. Sin embargo, el almacenamiento no cumplía las disposiciones legales. La universidad recibió el encargo de crear un almacenamiento centralizado de sustancias peligrosas que satisficiese todos los requisitos legales pertinentes.
El reto principal era completar un sistema de contenedores que se pudiera reubicar en el menor tiempo posible cuando la universidad se trasladase a su nuevo emplazamiento.
El reto principal era completar un sistema de contenedores que se pudiera reubicar en el menor tiempo posible cuando la universidad se trasladase a su nuevo emplazamiento.
La solución
La Universidad de Innsbruck encargó la planificación completa y la implementación del proyecto a Denios, su socio en el ámbito del almacenamiento de sustancias peligrosas. Como solución, los expertos de Denios recomendaron un sistema formado por seis contenedores de sustancias peligrosas unidos entre sí. La solución especial, a medida de los requisitos del cliente, se compone de cuatro contenedores antiincendio F90 transitables para almacenar diversas sustancias peligrosas y un contenedor de recepción F90. La unión de este complejo con el edificio universitario ocupa otro contenedor. Los contenedores antiincendio F90 satisfacen todas las normas legales y el decreto sobre líquidos inflamables (VbF, por sus siglas en alemán).
Denios completó todo el proyecto en un plazo de sólo dos meses. En primer lugar, se colocó una cimentación para el sistema de contenedores. En un segundo paso, se montaron los contenedores, unidos entre sí y equipados con una cubierta a una pendiente. Con un pasillo de conexión, se puede llegar a los contenedores directamente desde el edificio universitario, separado únicamente por una puerta antiincendio.
Denios finalizó todo el sistema de contenedores para la universidad de Innsbruck en sólo dos meses.
Resultado y utilidad
La Universidad de Innsbruck consiguió una solución de contenedores para el almacenamiento seguro y centralizado de todas las sustancias peligrosas tratadas. Gracias a su construcción modular, el sistema se puede ubicar en un nuevo emplazamiento cuando la universidad se traslade. La universidad de Innsbruck prevé la instalación de otros sistemas de almacenamiento para sustancias peligrosas con Denios.
Los compuestos son resistentes por naturaleza a la corrosión, por lo que los vehículos pueden operar más tiempo sin necesidad de un mantenimiento frecuente