Sánchez Torres renueva su presidencia al frente de Ganvam
10 de febrero de 2014
Sánchez Torres renueva su cargo por quinta vez consecutiva desde que en 1998 asumiera por primera vez la presidencia de Ganvam con el firme propósito de impulsar el papel del sector de la venta y reparación frente a organismos e instituciones públicas, involucrándolo en la política económica del país y promoviendo las actuaciones necesarias para hacer valer sus intereses e impulsar su desarrollo.
Juan Antonio Sánchez Torres es abogado de formación y desde la década de los ochenta miembro de la junta directiva de Ganvam. En la actualidad, forma parte de la junta directiva de la Ceoe y participa activamente en distintas asociaciones nacionales e internacionales como Confemetal –Junta Directiva y Comité Ejecutivo-; Cepyme –Junta Directiva- y a nivel europeo, Cerca (Comité Europeo del Comercio y la Reparación de Vehículos), entre otras.
El programa de Ganvam para los próximos cuatro años puede calificarse de 'continuista' y pasa por fortalecer el diálogo y la relación con las distintas Administraciones Públicas en aras de garantizar la continuidad de los últimos planes de ayuda Pive y Pima Aire que tan eficaces se han revelado para revitalizar la demanda y rejuvenecer el parque, retirando de la circulación más de 400.000 vehículos de más de diez años. Sólo las cuatro ediciones del Pive han generado la compra de 365.000 turismos nuevos a los que se sumarán otros 175.000 de la última edición puesta en marcha el pasado mes de enero.
En este nuevo mandado, donde se seguirá defendiendo el coche como solución de libertad y movilidad para el ciudadano, la reforma de la fiscalidad del automóvil es otro de los objetivos de la patronal. De esta forma, trabajará por una tributación orientada a penalizar el uso del coche en lugar de la compra, de acuerdo a los criterios europeos, eliminando el Impuesto de Matriculación del que actualmente están exentos más del 60% de los vehículos.
En este nuevo mandato, Ganvam trabajará también en coordinación con la Administración y las principales asociaciones del sector por conseguir un marco legal favorable para que empresarios de la automoción y afines desarrollen su actividad en un entorno competitivo y estable que garantice los derechos y deberes de todas las partes a través de un tablero de juego claro y justo.
Asimismo, en su agenda de temas no faltará la dignificación de la profesión para fomentar las mejores prácticas y luchar por erradicar las actuaciones fraudulentas o irregulares que han aumentado al calor de la crisis, como son la venta ilegal de vehículos en la vía pública –que suponen ya el 10% del total de operaciones de segunda mano- o los talleres pirata, que el pasado año concentraron la cuarta parte de las reparaciones, generando unas pérdidas de 1.000 millones anuales al sector.