La sencillez del trabajo bien hecho
A lo largo de estos últimos años, en Palletways Iberia hemos desarrollado un servicio que hasta ahora nadie realizaba de forma exclusiva. Eso nos permite hacer un trabajo muy concreto pero de manera muy eficiente y con una calidad excelente. El desarrollo de ideas en sectores y nichos concretos, así como el trabajo bien hecho pueden encontrar su hueco.
No hay más secreto que la especialización y ofrecer lo que se necesita. Esa es la única respuesta a esta nueva situación económica, que no ya crisis coyuntural: analizar el mercado, sopesar los pros y contras, hablar de tú a tú al cliente y finalmente proponerle lo que puedes ofrecerle con total fiabilidad. Solo así, partiendo de cero, hemos sido capaces en 7 años de implantar un modelo y un servicio en el que ya más de 60 compañías se han implicado, han apostado y han desarrollado con nosotros el servicio para sus clientes, frente a anteriores modelos tradicionales de transporte menos fiables y eficientes.
De la mano de la sencillez que describo como llave para el éxito también está la colaboración. Nada ni nadie puede avanzar, crecer, evolucionar sin la colaboración estrecha con sus semejantes. Una obviedad que, sin embargo, en el mundo de los negocios, y en especial en la logística, no se ha tratado convenientemente. En nuestro caso, la colaboración entre las diferentes redes regionales/nacionales en el resto de Europa y la colaboración entre los miembros que integran dichas redes es esencial. Son compañías de transporte y logística destacadas en su espectro local y/o regional que permiten a redes como la de Palletways estar en la puerta de cada cliente a tiempo, cuando lo necesita, con un interlocutor conocido, cercano que les atiende en el día a día, con el apoyo y tranquilidad que puede ofrecer una organización paneuropea. Esa colaboración se transforma en compromiso, puesto que todas y cada una de esas empresas pueden estar seguras de que el mismo nivel de servicio y excelencia que ofrecen en sus áreas geográficas también lo realizan sus colegas, estén en Sevilla, en Barcelona, en Milán o en Londres.
La sencillez no es una tarea fácil. Mantener la llama supone un esfuerzo diario para seguir innovando y creciendo en calidad de servicio. De nada sirve localizar un nicho de mercado, plantear una idea innovadora y ponerla en marcha exitosamente si no somos capaces de avanzar. El mercado busca siempre algo más, y ahí es donde seguimos trabajando pero siempre apoyándonos en tres pilares que ahora algún gurú comenta, como la vuelta a lo básico pero que ya teníamos construidos e integrados en nuestra empresa desde nuestro inicio: hacer solamente lo que sabemos hacer bien, especializados; austeridad en gastos evitando todo lo superfluo y ser honestos con nuestros clientes en el negocio y con nuestras personas, que es lo mejor que tenemos y marca la diferencia.