La personalización es la tendencia
“El cliente siempre tiene la razón”. Esta máxima atribuida al fundador de los grandes almacenes londinenses Selfridges rige las relaciones comerciales desde hace más de cien años. Es más... Hoy, en la llamada ‘era del crossumer’, y en un mercado saturado y homogeneizado, la cosa va más allá. Ofrecer una experiencia personalizada es clave en el proceso de fidelización, según todos los gurús del marketing. Y en este escenario, ‘Made in… Me’ se impone como la última denominación de origen.
La firma española de calzado urbano Munich fue pionera en convertir a sus clientes en diseñadores, cuando en 2010 lanzó la herramienta Munichmyway.com para personalizar su icónico modelo Gresca con más de tres billones de combinaciones posibles. Irene Gil, de Just-ENE, lo vio claro cuando hizo de la customización el eje de su propuesta: “La personalización ofrece al cliente justo lo que está buscando, al margen de tendencias y políticas de aprovisionamiento. Queremos que sus zapatos y su experiencia sean tan especiales y únicos como ellos mismos”. Su plataforma contempla once diseños base, que admiten cuatro alturas de tacón, tres pulseras, ciento sesenta materiales, cuatro colores de suela... Los pedidos ya llegan desde Rusia, Suiza, Holanda y Reino Unido. “Desde el patrón hasta la última costura, cada zapato es realizado por maestros artesanos de acuerdo a tus especificaciones”, garantiza el servicio a medida de Miss García, con envío a cualquier parte del mundo.
Hasta alguna de las casi cien tiendas que tiene Pretty Ballerinas hay que desplazarse a encargar con un mes de antelación la ‘Bespoke Bridal Collection’ para novias únicas. En su tienda de la ‘Milla de Oro’ madrileña Glent fusiona artesanía y tecnología de desarrollo propio para digitalizar y realizar una medición 3D del pie. Una aplicación despliega cincuenta pieles; seis suelas y diecisiete colores para las costuras, otros diez para los cordones y varios para el forro. Se puede grabar el nombre, las iniciales o cualquier mensaje en el interior del zapato.
También encontramos atractivas propuestas ‘sur mesure’ en el segmento bolsos. Box San Sebastián ya ofrecía un servicio a la carta desde los años 70, pero hoy se beneficia de las nuevas tecnologías. “Enviamos por correo electrónico una secuencia de alrededor de 10- 12 correos, con fotos del proceso de realización de su bolso y notas explicativas del trabajo de taller, trasmitiendo así todo el valor añadido de un servicio único y exclusivo”, detalla Gerardo González. Aunque no cuentan con herramienta online, clientes de México, Estados Unidos, Inglaterra, Francia y Japón confían a distancia en su veterano saber-hacer.
Incluso certificado de nacimiento entrega Inés Figaredo a los clientes que se implican en la personalización de la familia ‘Who’. Su servicio de Atelier online permite elegir asas, pieles, herrajes y hasta el color de ojos de la ‘criatura’. “Más de 1.500 bolsos en uno” es la propuesta de Paula Franco con sus piezas intercambiables en diferentes colores, acabados y estampados. También desde su e-shop y en tres sencillos pasos, invita Lacambra a crear piezas únicas con entrega en 21 días para todo el mundo. La Portegna recibe los pedidos de personalización en sus tiendas de Madrid y Londres. “Podemos personalizar con iniciales la mayor parte de las piezas que diseñamos. Se puede elegir entre colores y tamaños de tipografías, letras, números…”, explica Leticia de la Cuesta, diseñadora de la firma.