Colorprint Fashion apuesta por la tecnología digital de Durst
La andadura de Colorprint Fashion arranca 39 años atrás, cuando Rafael Torregrosa, que ya contaba con 10 años de experiencia en una empresa de preimpresión textil, decidió iniciar su propio proyecto de estampación. Esta nueva compañía, que en sus inicios únicamente contaba con una máquina de estampar, fue creciendo a lo largo de los años, aumentando sus instalaciones, plantilla y capacidad productiva, hasta convertirse en uno de los mayores estampadores textiles de Europa. Hoy en día, Colorprint Fashion cuenta con unas instalaciones de producción de 20.000 m2 y da trabajo a 150 profesionales de altamente cualificados. Recientemente ha incorporado una Kappa 180 y una Kappa 320 de Durst para dar respuesta a los nuevos retos tecnológicos del mercado
Ubicada en Muro de Alcoy, Colorprint Fashion cuenta con unas instalaciones de producción de 20.000 m2. Especializada en textil hogar y decoración, Colorprint Fashion estampa para terceros, tejidos destinados fundamentalmente a la fabricación de mantelería, tapicería y cortinaje, complementado con algo de nórdica y edredón.
Por supuesto, la reconversión del sector textil y la fuerte irrupción de la producción asiática, ha modificado notablemente la composición de su cartera de clientes que tradicionalmente eran fabricantes de tejidos y que ahora se han visto forzados a reconvertirse en agentes comerciales cuyos principales mercados son América Latina y los países árabes.
Colorprint Fashion ha sabido adaptarse a todos estos cambios, evolucionando tecnológica y comercialmente de acuerdo al sector, para ser capaz en cada momento de ofrecer un nivel de producto y servicio diferencial. De hecho, Colorprint Fashion es reconocida como “una escuela de técnicos de estampación”, capaz de desarrollar productos muy elaborados y de elevada complejidad técnica, arropándolos simultáneamente con un excelente nivel de servicio.
Actualmente, las dos unidades Durst Kappa conviven con el amplio parque de maquinaria de impresión convencional con que cuenta Colorprint Fashion, permitiendo así dar respuesta a todas las necesidades que les plantean sus clientes.
Tras 40 años de dominio de la serigrafía rotativa como tecnología de producción dominante en el sector, los cambios en la demanda y la aceleración de los mercados, que cada vez demandan tiradas más cortas, con mayor rotación de diseños y exigen menores plazos de entrega, han planteado nuevos retos tecnológicos a la industria textil. Retos, a los que Colorprint Fashion ha dado respuesta apostando por la tecnología industrial de impresión digital textil, de Durst, incorporando una Kappa 180 y una de las primeras Kappa 320 salidas de la fábrica. Cuando le preguntamos a Rafael Torregrosa acerca de los motivos que le impulsaron a tomar esta decisión de inversión, afirma: “En Colorprint Fashion llevábamos ya mucho tiempo observando el desarrollo de la tecnología digital. De hecho, hace ya 12 años que contamos con equipos digitales aunque, debido a su escasa producción, únicamente podían ser utilizados para la preparación de muestras. Sin embargo, en los últimos dos o tres años se han producido dos hechos clave para que tomásemos esta decisión: por una parte, el mercado ha empezado realmente a demandar producción digital, con todas sus ventajas asociadas y, por otra parte, han aparecido máquinas verdaderamente industriales, capaces de dar respuesta a dichas demandas.”
“Como ha ocurrido en otros sectores, la migración al digital ha comenzado para nuestro sector y Colorprint Fashion no podía quedarse atrás en lo que claramente es una tendencia clave de futuro. La estampación digital ha llegado para quedarse y ganará cuota de producción año tras año porque responde mejor a las nuevas necesidades del mercado. Fíjese que, ya hoy en día, producimos 14 millones de metros (lineales) de tiradas cortas, con tamaños medios de tirada de sólo 500 metros. En este contexto, la tecnología digital empieza a resultar esencial.”
La próxima disponibilidad de una máquina rápida de doble ancho fue decisiva a la hora de optar por Durst. Durante nuestra visita a las instalaciones de Colorprint, le preguntábamos también a Rafael Torregrosa acerca de su elección de Durst como socio estratégico para afrontar la entrada en la producción digital industrial, a lo que nos contestaba que: “Antes de realizar la inversión, por supuesto, analizamos toda la oferta existente y, aunque existían opciones más económicas, Durst nos presentó la mejor combinación de producto disponible, calidad de impresión, fiabilidad y servicio. Elegir máquinas bien construidas y fiables, junto a la disponibilidad de un buen servicio de asistencia técnica son factores esenciales cuando debes afrontar la incorporación de una nueva tecnología de producción y, en ese sentido, Durst nos inspiraba una gran confianza. Además, ha encabezado el desarrollo de máquinas rápidas en doble ancho lo que, para nosotros, por nuestro tipo de producto, resulta esencial”.
La Kappa 180 fue instalada en Colorprint Fashion el pasado mes de julio de 2013 y la Kappa 320 llegó pocos meses después, a finales de octubre, por lo que Colorprint Fashion cuenta ya con algunos meses de experiencia trabajando con las impresoras digitales de Durst.
Ante la pregunta de cómo valora dicha experiencia, Rafael Torregrosa nos comentaba: “Estampar digitalmente con las impresoras Durst es una maravilla. Es sencillo, limpio, rápido y ágil. Al permitirnos una total variación de diseños, nos permite rentabilizar pedidos de sólo 50 metros e incluso hacer exclusivas. Además, nos ofrecen una perfecta reproducción y repetibilidad de color, incluso en los diseños más complicados. Ahora no sólo estamos convencidos de que hemos iniciado el camino correcto en cuanto a tecnología, sino también de que lo hemos iniciado en compañía del socio adecuado, Durst.”