El clúster textil catalán se adapta al nuevo escenario económico para ganar competitividad

Las jornadas fueron organizadas por el Centre d’Innovació Fitex —perteneciente a la red Tecnio de la Generalitat de Catalunya—, el Clúster Tèxtil i Moda de Catalunya y ACC1Ó, agencia para la competitividad de la empresa catalana del Departament d’Empresa i Ocupació. Entre las marcas catalanas participantes destacan Sita Murt, Punto Blanco, Còndor, Desigual, G.P. Torras, Massana, Escorpión, Guasch, Textil Eltex, Manufacturas Andreu, Axis, Peiró Tèxtil, Inform, así como otras empresas como SkunFunk del País Vasco. El sector textil catalán agrupa un total de 1.750 empresas que facturan en global 12.700 millones de euros anuales.

En relación a los ponentes de las jornadas, destaca el profesor Josep María Galí, de la Escuela de negocios Esade, el emprendedor Marc Vidal creador de la plataforma de moda Tueddy, el vicepresidente de Desigual en Asia, Jordi Balsells, el experto en Innovación Joan Vinyets de la empresa A Piece off Pie, la experta en el mercado de Brasil Carol Teixeira y la empresa BeCo que enfoca sus actividades en la sostenibilidad dentro del sector textil y moda

El profesor Josep María Galí explicó que se observan cambios relevantes en el consumo de moda en Europa: ya no existen referentes o líderes de opinión destacados como hace años o criterios estéticos universales como en otras épocas. Los criterios de moda están buscando un equilibrio entre la personalización, el logro de un estilo individual, el mantenimiento de su carácter efímero y a la vez un mimetismo, a la hora de seguir determinados estilos como un elemento de identificación dentro de la sociedad.

Fruto de un estudio sobre tendencias en los valores de consumo realizado en diferentes países de la Unión Europea, por Josep María Galí y Lidia Morcillo (Centro tecnológico Fitex), se puede concluir que el mundo se está polarizando en tres modelos de consumo. Uno es el llamado ‘mundo amarillo’, al que pertenecen países emergentes como China o Brasil y que se encuentran en la ‘Fiesta del Consumo’. Estos países quieren consumir, son marquistas y utilizan la moda como indicador de estatus y de progreso económico.

En el otro extremo se encuentra el ‘mundo rojo’, encabezado por países como España, Italia, Grecia o Portugal. Son países en los cuales, según el estudio, se ha extendido una cultura ‘low cost’, donde los consumidores buscan productos de oportunidad.

En tercer lugar se encuentra el mundo del futuro, llamado ‘mundo azul’, representado por países como Finlandia, Suecia o Noruega, interesados por la calidad de los productos, el impacto local, la sostenibilidad y el consumo responsable.

El gran reto para muchas marcas de moda que se encuentran en un proceso de fuerte expansión internacional es adaptar sus nuevas colecciones a los intereses de cada uno de los tres mundos, manteniendo a la vez la propia identidad de la marca.

El socio de la consultora A Piece of Pie, Joan Vinyets, habló de la innovación en productos de moda e incidió en la necesidad de “mirar la realidad de una forma diferente” como aspecto clave para poder generar innovación dentro de cada negocio. También explicó que actualmente para generar nuevos servicios y productos que puedan tener éxito en el mercado, hay que fundamentarlos en necesidades reales de los consumidores, “a menudo es más importante saber porqué no nos compran los que no son clientes que saber porqué nos compran nuestros clientes”. En estas respuestas es donde se logra información relevante para generar nuevos productos. Vinyets también aportó su receta para construir una empresa innovadora: compartir información con todo el equipo profesional, colaborar entre los diferentes miembros para lograr los retos de la empresa y conectar “agentes clave” fuera y dentro de la propia organización para potenciar buenos resultados en los nuevos proyectos a desarrollar.

Elena Salcedo, de la empresa BeCo, protagonizó la ponencia con más debate, centrada en la sostenibilidad, entendida como “la habilidad de satisfacer las necesidades actuales sin poner en riesgo la satisfacción de las necesidades de las sociedades futuras”. Muchas de las empresas catalanas asistentes al acto manifestaron un compromiso ya existente con las normativas medioambientales y sociales catalanas, de las más avanzadas del mundo y a pesar de compartir los objetivos de la sostenibilidad, fueron críticas con modelos del negocio del sector claramente poco sostenibles y que se presentan ante el consumidor final como empresas preocupadas por esta temática. Hay que transmitir al consumidor que el modelo ‘Fast Fashion’ tal y como está planteado hoy en día no es sostenible y hay que buscar nuevos modelos fundamentado en un consumo más responsable y de proximidad.

En la ponencia sobre oportunidades de reindustrialización en el sector textil, Maria Pedrals, de la Consultora Clúster Development, explicó las conclusiones de un estudio realizado sobre esta temática en 2011, en colaboración con el Centro Tecnológico Fitex, en el cual se entrevistaron a los principales distribuidores y marquistas de Cataluña obteniendo como resultado que, efectivamente, existe una corriente de aproximación de fabricación de Asia a la zona Euro Mediterránea (Turquía, Portugal, Marruecos, España o países del Este). La industria textil catalana tiene oportunidades de captar fabricación, pero hace falta una actividad comercial y cooperación entre las pymes industriales del país para poder responder a estas necesidades de los marquistas y distribuidores y que se puedan acercar producción de volumen al país.

Durante la segunda jornada, Jordi Balsells, vicepresidente ejecutivo de Desigual en Asia, aportó algunas reflexiones para acceder a estos mercados con más probabilidades de éxito. La primera es que sin lugar a dudas Asia en general, y China en particular, es un mercado muy interesante para las marcas catalanas. Explicó la importancia de entender que se trata de mercados con un desarrollo lento y en los cuales hay que decidir previamente los riesgos que quiere asumir la marca y la inversión que se está dispuesto a abordar para acceder al mercado. Buscar socios en el país es un factor clave para conseguir resultados. Negociar con calma y prudencia entendiendo que es un universo cultural en el cual no tenemos referencias válidas, plantearse una implantación multicanal, trabajar el país por regiones, adaptar el producto de la marca al consumidor y gestionar correctamente las mercancías y los aranceles son aspectos que pueden ayudar a una implantación de éxito para marcas catalanas.

Por otro lado, Carol Teixeira, experta en moda en Brasil, detalló las oportunidades que esconde este mercado, más próximo a un continente que a un país, una vez superados los elevados aranceles y las barreras no arancelarias que lo protegen. Nuevamente, trabajar con socios locales, grupos inversores en moda y grandes grupos industriales textiles son alternativas que pueden ayudar a una implantación comercial con éxito.

Joan Martí, gerente del área de dinamización de Clústers de ACC1Ó, animó a las empresas del clúster a continuar con el enfoque de los últimos años fundamentado en la puesta en marcha de proyectos singulares y colectivos orientados a la competitividad de las empresas y liderados por los empresarios.

Finalmente se presentaron varias tecnologías de aplicación en el sector de la moda. Destaca la presentación de Tueddy una nueva herramienta que se define como el Spotify de la moda y que ayuda a vincular marcas y usuarios con el fin de producir transacciones comerciales. La presentación de este portal corrió a cargo de prestigioso emprendedor, economista y colaborador de varios medios de comunicación, Marc Vidal que invitó todas las marques asistentes a formar parte de esta nueva herramienta para mejorar sus ventas a la red.

Los cambios en los valores de consumo en Europa, las oportunidades en los mercados emergentes y las que ofrecen las nuevas tecnologías mediante la red, dibujan un nuevo mundo en el cual la industria de la moda catalana ya está trabajando.