El IES Marqués de Villena de Marcilla gana la VI edición de CanSat Navarra

El equipo Robochocantes del IES Marqués de Villena, de Marcilla, fue proclamado ganador de la VI edición de CanSat Navarra y representará a la Comunidad Foral en un nuevo certamen que se celebrará a nivel nacional. La jornada, que tuvo lugar en Lerín y contó con la presencia de la consejera de Universidad, Innovación y Transformación Digital, Patricia Fanlo, marcó el cierre de la fase regional de esta iniciativa.

Durante el evento, un total de 24 estudiantes de Navarra participaron lanzando mini satélites del tamaño de una lata de refresco, como parte de una actividad diseñada para impulsar el interés por la ciencia y la tecnología entre los jóvenes.

Esta iniciativa, respaldada por la Agencia Espacial Europea (ESA), involucró a estudiantes de Enseñanza Secundaria en actividades que promovieron la colaboración y el trabajo en equipo, enfocadas en tecnología, física y programación. En la fase regional en Navarra, la actividad estuvo organizada por Planeta STEM, un programa divulgativo del Departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital, y coordinada por el Planetario de Pamplona/Iruña (NICDO).

En este sentido, la consejera dio la enhorabuena al equipo vencedor y puso en valor el compromiso del Ejecutivo Foral “por acercar la ciencia a las y los jóvenes con el objetivo de abordar el desafío de fomentar este tipo de vocaciones, especialmente entre las mujeres”.

De igual modo, Fanlo señaló que “el Departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital trabajó activamente en la elaboración del primer plan STEM del Gobierno de Navarra, herramienta que aglutinará diferentes iniciativas y proyectos”. Esta jornada –aseguró– permitió al alumnado “adquirir conocimientos en ciencia, tecnología y programación, pero también se aprendió el valor de trabajar en equipo y el poder que tiene la comunicación para alcanzar objetivos comunes”.

CanSat es una iniciativa promovida por la Agencia Espacial Europea que desafió a estudiantes de toda Europa a construir y lanzar un pequeño satélite diseñado para caber dentro de una lata de refresco. Este desafío planteó al alumnado adaptar los principales subsistemas de estos aparatos, como la energía, el sistema de comunicación y los sensores, en un espacio reducido. Además, los y las participantes debieron cumplir una misión secundaria, basada en ideas de misiones de satélites reales, que demostrara las capacidades del pequeño dispositivo.

El proyecto CanSat siguió una metodología de aprendizaje basado en proyectos que promovió la participación activa del alumnado, la exploración, investigación, análisis y el aprendizaje práctico, tanto de forma individual como en equipo. Esto permitió a los y las estudiantes desarrollar habilidades, actitudes y capacidades intelectuales críticas y reflexivas, esenciales para su desarrollo personal y profesional.