Los Premios a la Ecoinnovación destacan siete proyectos escolares

Identificar ideas y actitudes creativas, innovadoras y comprometidas con el medio ambiente entre los más jóvenes es el objetivo de Premios Ecoinnovación de la Fundación Endesa, un proyecto puesto en marcha en 2016 que cuenta con la colaboración de la Fundación Europea Sociedad y Educación como socio.

En este curso académico se han presentado 271 proyectos, centrados en el cuidado del entorno y en la protección de nuestra biodiversidad. De entre todas ellas, 172 se han clasificado en una de las tres categorías de estos galardones: ‘Conocer nuestra biodiversidad’, 'Resolver un problema medioambiental’ y ‘Mejorar tu entorno’. Las iniciativas han destacado por la riqueza de temas elegidos y por su capacidad de generar respuestas a problemáticas surgidas por la pandemia, como por ejemplo el modo en que la salud y los hábitos medioambientales se han visto afectados.

Alba Padillo, responsable del proyecto Premios a la Ecoinnovación de la Fundación Endesa dio a conocer los nombres de los ganadores:

En la Categoría 1, ‘Conocer nuestra biodiversidad’ ha obtenido el primer Premio el IES Cortes de Cádiz de El Molar (Madrid) con el proyecto Cambios en la comunidad de plantas y las propiedades edáficas asociados al pastoreo de équidos. Los miembros del Jurado destacaron la calidad del contenido científico metodológico y el impacto significativo del pastoreo en la composición y cobertura vegetal del suelo, pero no de sus propiedades edáficas.

En esta misma categoría, el segundo Premio ha recaído en el trabajo Estudio de la comunidad de mamíferos de Añover de Tajo y Alameda de la Sagra del IES San Blas de Toledo (Castilla-La Mancha). En este caso, se valoró el objetivo de hacer ciencia “ciudadana”, y el empeño en familiarizar a los habitantes de la zona con los ecosistemas naturales y los problemas ambientales que genera la actividad humana.

En la Categoría 2 ‘Mi solución creativa a un problema medioambiental’, el IES Vicente Aleixandre de Sevilla, que ya conquistó el primer Premio en 2020, lo hizo de nuevo con el proyecto 'Los centinelas de Gaia. Bioindicadores. Sensores vivos del impacto ambiental'. Proponen el uso de bioindicadores como sensores de contaminación en las distintas esferas de la tierra y demuestran cómo son de gran utilidad para determinar el impacto de origen antrópico.

El segundo premio de la Categoría 2 se entregó al IES Pasqual Calbó i Caldés de Mahón, que presentó el proyecto 'Recuperar la fertilidad: regenerando el suelo'. Se han estudiado las características del suelo de su centro con el objetivo de detectar cómo regenerarlo y enriquecerlo para que vuelva a ser productivo y así recuperar la biodiversidad de la zona.

Por último, en la Categoría 3, ‘Mejorar tu entorno’, el Jurado otorgó la Mención Especial al Centro de Educación Especial Puentesauco de la localidad de Aspanias (Burgos). Con su proyecto 'De nuestro barrio a la tierra: por un entorno sostenible', los alumnos no solo realizaron actividades inclusivas tomando como base la protección del medio ambiente, sino que implicaron a las familias, a diferentes organizaciones de la zona y al ayuntamiento.

En esta misma categoría, obtuvo el primer Premio el proyecto 'Conectados por Filabres', del IES Alto Almanzora de Tíjola, Almería. El principal objetivo del proyecto es lograr que se declare Parque Natural la Sierra de los Filabres. El Jurado resaltó el proceso de búsqueda y recopilación de información sobre la Sierra y la capacidad de convocatoria de los estudiantes, logrando sumar a la causa a todos los centros educativos de la zona y llevando su petición tanto al ayuntamiento de Tíjola como al Parlamento andaluz.

El CEIP Ponte dos Brozos de Arteixo (A Coruña) ganó el segundo premio de la categoría 3 con el proyecto '“Ponte”, con el desarrollo sostenible'. Se han centrado en la consecución de los ODS a través de trabajos de investigación realizados por los alumnos sobre la problemática ambiental con una alta intención divulgativa en múltiples soportes.

Miguel Ángel Sancho, presidente de Sociedad y Educación, hizo hincapié en el valor que aporta la educación ambiental a la formación integral de los estudiantes: “trabajar cerca de la naturaleza, conocer sus principios y sus reglas, admirar lo que nos aporta y ser responsables de su cuidado, son elementos fundamentales del enfoque competencial y experiencial que subyace hoy en el proceso de enseñanza-aprendizaje”.

Por su parte, Ana Berengena, directora de Áreas Corporativas de la Fundación Endesa, destacó “la gran calidad de los proyectos presentados en la actual edición, lo cual es una muestra del compromiso, espíritu innovador y cooperativo con la preservación de nuestro entorno de los alumnos y profesores participantes. Un éxito para la Fundación Endesa, que trabaja por un desarrollo social constante, iluminando el talento de las personas para crear una sociedad con más y mejores oportunidades”.

En este acto, José Ignacio Cubero, profesor de Secundaria del IES-Los Castillos de Alcorcón, presentó la BIOTECA, un espacio web que reúne los mejores proyectos de las seis ediciones. Con este repositorio de prácticas e iniciativas ambientales emprendidas en escuelas de toda España, se pretende servir de inspiración a quienes aspiren a trabajar a favor de la sostenibilidad social y ambiental.

La bióloga y profesora de la Universidad de Alcalá Josabel Belliure, investigadora en la Antártida y especialista en ecología evolutiva, mantuvo un diálogo abierto con los estudiantes ganadores, en el que destacó la importancia de despertar vocaciones científicas y de perseverar en el cuidado de la biodiversidad para generar un efecto positivo en la lucha contra cambio climático.

Dotación de los Premios

La dotación para cada una de las tres categorías consiste en la difusión nacional del proyecto y las siguientes dotaciones económicas: en la Categoría 1 y 2 2.000 euros al equipo ganador del primer premio y de 1.000 euros al equipo ganador del segundo premio, mientras que en la Categoría 3 el premio es de 4.000 euros para el centro ganador del primer premio y 1.000 euros corresponden al ganador del segundo premio. La mención especial ha tenido una dotación económica de 1.000 euros.

Asimismo, cada ganador recibió una estatuilla diseñada por la escultora navarra María José Recalde, que usa materiales reutilizables en todas sus obras.