Alumnado de Informática de la UPV/EHU enseña a programar a jóvenes de entre 10 y 12 años

13/04/2016

Del 4 al 15 de abril, alumnado de la Facultad de Informática de la UPV/EHU acude a 8 centros vascos a ofrecer una hora de código a unos 24 grupos de estudiantes de entre 10 y 12 años. Los centros que reciben una hora de código en esta iniciativa son: Zubimusu Ikastola de Billabona, Escuela San Pelayo de Ermua, Allende Salazar de Gernika, San Benito Ikastola de Lazkao, escuela pública Irain de Lesaka, Mutriku BHI, Samaniego de Tolosa y San Millan de Zizurkil.

Olatz Arbelaitz Gallego, vicedecana de Relaciones Externas de la Facultad de Informática de la UPV/EHU explica la iniciativa. “El objetivo de la hora de código es pasar una hora programando de forma divertida y aprender los conceptos básicos de la programación. Este es un movimiento global que llega a millones de estudiantes de más de 180 países. La hora de código la puede organizar cualquier persona de cualquier rincón del mundo pero el alumnado del grado en ingeniería informática es un grupo de personas muy adecuadas para dicho objetivo. De hecho, hace unos meses conseguimos traducir al euskara code.org (www.code.org), herramienta adecuada para la hora de código por ser fácil de utilizar y visual”.

El código será el lenguaje universal del futuro. “El código nos ayudará a ver los ordenadores como algo que se puede manipular en vez de verlos como aparatos mecánicos, solitarios, aburridos y mágicos. Es decir, gracias al código, podemos convertirnos en creadores/as con los ordenadores en vez de simples consumidores. Gracias a la programación podremos crear nuevos mundos con sus propias reglas partiendo de la nada. Para ello, necesitaremos utilizar la lógica”.

No es una actividad difícil de realizar. “El código no es más que una secuencia de instrucciones representada en un lenguaje especial. Nosotros, cuando llevamos a cabo muchas de las acciones de nuestra vida, aunque inconscientemente, ejecutamos secuencias de instrucciones. Cada mañana para acudir al colegio por ejemplo, seguimos una serie de pautas: nos despertamos, nos levantamos, nos duchamos, nos secamos, nos vestimos, desayunamos y hacemos el camino al colegio. Para hacer un jersey de lana por ejemplo, tenemos que ejecutar una secuencia de acciones que repetimos una y otra vez”, subraya la profesora Olatz Arbelaitz.