La soledad de las palabras
Unos resultados poco satisfactorios si se comparan con los años de bonanza anteriores, pero que pueden atenuarse con el siempre tan socorrido “mal de muchos consuelo de tontos”, puesto que las cosas en nuestros vecinos europeos no presentan un aspecto muy saludable.
Pero es eso de la transición lo que preocupa, porque si los transformadores, además de transformar, transitan, el tráfico de movimientos varios se eleva al cuadrado y la posibilidad de colisión se multiplica correspondientemente. Conviene recomendar que los transformadores también se transformen, si es que no lo han hecho ya, y que transiten hacia un periodo postinnovador en el cual queden superadas antiguas dolencias propias de aquellas empresas que fabrican lo que cualquiera puede fabricar. Sus proveedores, especialmente los constructores de maquinaria y los productores de materias primas, están en ello y huyen de lugares atopadizos, buscando su espacio en las islas desiertas, o al menos poco pobladas, de sus respectivas tecnologías. El robinsón de las tecnologías encuentra en esta soledad la llave para su éxito y su felicidad.