Dos españolas finalistas al Premio Inventor Europeo 2022 de la Oficina Europea de Patentes (EPO)
La Oficina Europea de Patentes (OEP) ha anunciado dos científicas españolas como finalistas a sus premios Inventor Europeo de 2022 por sus trabajos en el mundo de los recubrimientos cerámicos pulverizados, en un caso, y por un pionero trabajo de exoesqueletos pediátricos, en el otro.
La química e ingeniera de materiales española y catedrática de universidad Nuria Espallargas y el científico indonesio de materiales y profesor titular de universidad Fahmi Mubarok, han sido nominados conjuntamente para el European Inventor Award 2022 por un nuevo proceso que permite utilizar materiales cerámicos que carecen de un punto de fusión a altas temperaturas, con el fin de ser proyectados sobre componentes industriales. Estos innovadores recubrimientos cerámicos por proyección térmica están diseñados para prolongar la vida útil de los componentes utilizados en varias aplicaciones industriales, ya que los protege mejor del desgaste y la exposición química. Se espera que los primeros usos industriales sean en frenos de automóviles o trenes, herramientas y equipos de fabricación de vidrio, equipos utilizados para la extracción de metales, y en un próximo proyecto con la Agencia Espacial Europea, que probará cómo estos recubrimientos pueden resistir la abrasión a la arena de la Luna y Marte.
“A través de su ingenio, Nuria Espallargas y Fahmi Mubarok han resuelto un problema que los expertos en su campo creían imposible”, dice el presidente de la OEP, António Campinos, al anunciar los finalistas del Premio al Inventor Europeo 2022. “Una vez superado el desafío tecnológico, Nuria y Fahmi abren un nuevo mercado de recubrimientos de proyección térmica más duraderos y eficientes”. Espallargas y Mubarok están nominados conjuntamente entre los cuatro finalistas en la categoría pyme’, que reconoce a inventores excepcionales en pequeñas y medianas empresas con menos de 250 empleados y una facturación anual de menos de 50 millones de euros.
A pesar del escepticismo general, puesto que los grandes agentes de la industria ya lo habían intentado antes sin éxito, Espallargas y Mubarok se dieron cuenta de que las partículas de carburo de silicio tenían que protegerse con algo que pudiera cumplir dos funciones a la vez: “Se me ocurrió que debía tener la capacidad de proteger el carburo de silicio de la exposición a altas temperaturas y, al mismo tiempo, unir el carburo de silicio para crear un recubrimiento”, dice Mubarok. Con la ayuda de la oficina de transferencia de tecnología de su universidad, Espallargas y Mubarok solicitaron una patente cuando la invención todavía estaba en una fase de laboratorio. Después, en el año 2014, crearon Seram Coatings para comercializar su material compuesto, llamado ThermaSiC.
Espallargas asegura que la patente, que se otorgó en 2018, fue vital para asegurar la inversión. “Sin una patente, habría sido imposible”, afirma. “Cada vez que teníamos una reunión con quien nos iba a financiar para comprar un sistema o equipo para desarrollar el producto, nos decían: ¿tienes esto protegido?”, añade.
El primer exoesqueleto robótico adaptable del mundo para niños
Por otra parte, la OEP también ha nominado a la científica española Elena García Armada finalista al Premio Inventor Europeo 2022 por su trabajo pionero en exoesqueletos pediátricos. La idea para desarrollar su invento surgió tras conocer a una niña llamada Daniela que había quedado paralizada al sufrir un accidente de tráfico. El exoesqueleto permite caminar a los niños que usan sillas de ruedas durante las sesiones de rehabilitación y reduce la degradación muscular y las complicaciones médicas. García es una profesora destacada de ingeniería en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) cuya investigación sobre robótica ha sido citada en más de 2.600 publicaciones acreditadas. Comenzó a desarrollar el primer exoesqueleto ajustable del mundo para niños después de enterarse de que no existía tal solución, una decisión que tiene el potencial de mejorar la esperanza de vida y el bienestar mental de millones de pacientes jóvenes. “Al aprovechar su vasta experiencia en robótica y articulaciones ajustables, García ha desarrollado un exoesqueleto único para niños y ha resuelto un problema en el sector de dispositivos médicos”, afirma el presidente de EPO, António Campinos. “Su invento no solo mejora la salud y el bienestar de los niños en sillas de ruedas levantándolos sobre sus pies. También ofrece una nueva esperanza a las familias y cuidadores que han estado esperando un dispositivo de este tipo durante muchos años”.