Un polvo inteligente entre vientos turbulentos
Ibon Linacisoro, Director15/04/2007
Los españoles están satisfechos con su vida sexual, lo dijeron el otro día en la tele. Practican el sexo 118 veces al año, más o menos una vez cada tres días los que son regulares. Luego están los del atracón, los que lo dejan todo para final de año. Pero aún cuando a muchos estas cifras les parezcan astronómicas, la cuestión que nos ocupa, que no es otra que un polvo inteligente, no tiene que ver con el sexo sino con la astronomía. El polvo inteligente es astronómico. Unos ingenieros británicos, que tienen la doble virtud de ser ingenieros y de ser británicos, dicen que existen unos pequeños dispositivos inteligentes que pueden diseminarse en el aire como partículas de polvo y que podrían emplearse en investigaciones espaciales para explorar otros planetas. Los dispositivos podrían consistir de un microcircuito de computadora con un recubrimiento plástico que puede cambiar de forma cuando se le aplica una carga eléctrica. Para un planeta como Marte, las partículas de polvo inteligente tendrían que ser del tamaño de un grano de arena. Dicen que un enjambre de 50 partículas de polvo inteligente pueden organizarse en una formación de estrella, incluso en medio de un viento turbulento. Un polvo inteligente en medio de un viento semejante es un tema de suma importancia para los que se dedican a la astronomía.
Para protegerse del viento, y probablemente del polvo inteligente, en Mataró, Barcelona, ya han hecho las primeras viviendas containers de España. El ayuntamiento de esta localidad ha firmado un acuerdo con la firma austriaca Containex que se dedica a comercializar contenedores marítimos, para convertirlos en viviendas de alquiler para jóvenes. Los contenedores-vivienda tienen una superficie de unos 60 metros cuadrados y la idea del consistorio es alquilarlos por la mitad del precio de una renta habitual. No es mala idea, pero conviene situar la vivienda-container lejos de un puerto, no vaya a ser que despierte uno en el puerto de Hamburgo. Lo que es seguro es que la industria de los plásticos tiene aquí un amplio campo de aplicaciones. Contenedores metálicos, una cosa sencilla frente a la complejidad del polvo inteligente, que deben ser revestidos de plásticos por dentro, para que queden más monos, para superar esos 118 al año. ¡Claro que podemos, ánimo!