Realidad virtual y el metaverso: Transformando el ámbito profesional e industrial

Desde hace unos años, la realidad virtual se ha convertido en una valiosa herramienta en el ámbito profesional, permitiendo a las empresas mejorar sus procesos y operaciones. Una de las áreas donde se ha aplicado con éxito es la formación y el entrenamiento. Mediante la creación de entornos virtuales inmersivos, las organizaciones pueden capacitar a su personal de manera segura y eficiente, replicando situaciones reales sin riesgos ni costos asociados. Por ejemplo, los pilotos de aviones pueden practicar procedimientos de emergencia en un simulador virtual, y los médicos pueden realizar cirugías virtuales para perfeccionar sus habilidades.

Además de la formación, la realidad virtual ha mejorado la colaboración en entornos profesionales. Mediante el uso de avatares y espacios virtuales compartidos, los equipos de trabajo distribuidos geográficamente pueden interactuar como si estuvieran en la misma ubicación física. Esto fomenta la creatividad, la comunicación y la colaboración, y puede aumentar la eficiencia en la toma de decisiones. Las reuniones virtuales y los espacios de trabajo virtuales están ganando popularidad, permitiendo a las empresas reducir costos de viaje y mejorar la flexibilidad de sus equipos.

El concepto del metaverso va más allá de la realidad virtual y representa un universo virtual compartido en el que las personas pueden interactuar y colaborar. En este espacio virtual, los profesionales pueden encontrarse, compartir ideas, trabajar en proyectos conjuntos y crear nuevos productos y servicios. El metaverso tiene el potencial de transformar la forma en que se realizan los negocios, proporcionando un entorno 3D inmersivo y colaborativo.

En el metaverso, los profesionales pueden crear representaciones virtuales de ellos mismos en forma de avatares y personalizar su apariencia. Esto permite establecer identidades digitales y participar en interacciones sociales y profesionales en un entorno virtual realista. Las empresas pueden utilizar el metaverso para organizar eventos, conferencias y ferias comerciales virtuales, lo que reduce los costos asociados con la participación física y amplía el alcance global.

Además de las oportunidades de networking, el metaverso ofrece espacios virtuales especializados para la colaboración profesional. Por ejemplo, los arquitectos pueden trabajar en modelos 3D interactivos de sus proyectos, los diseñadores pueden crear prototipos virtuales y los científicos pueden colaborar en investigaciones utilizando visualizaciones tridimensionales de datos complejos. Estos entornos virtuales brindan una nueva forma de trabajo en equipo, potenciando la creatividad y la innovación.

La realidad virtual y el metaverso tienen un impacto significativo en una amplia gama de industrias. En el sector de la fabricación, por ejemplo, las empresas pueden utilizar la realidad virtual para diseñar y probar prototipos virtuales antes de invertir en la producción física. Esto agiliza los procesos de desarrollo de productos y reduce los costos asociados con errores de diseño.

En el campo de la medicina, la realidad virtual se está utilizando para tratamientos de terapia y rehabilitación. Los pacientes pueden sumergirse en entornos virtuales que les permiten enfrentar sus miedos o realizar ejercicios de rehabilitación de manera segura. Además, los médicos pueden practicar procedimientos complejos en simulaciones virtuales antes de realizar intervenciones reales.

En cuanto al metaverso, las posibilidades son infinitas. Las empresas pueden construir su presencia digital en el metaverso, ofreciendo productos y servicios virtuales y conectando con clientes de todo el mundo. También se espera que el metaverso tenga un impacto en la economía digital, con la creación de nuevos empleos relacionados con la gestión y desarrollo de entornos virtuales.

Algunos ejemplos de empresas que están en el metaverso o que están desarrollando sus propios espacios virtuales son:

• Meta: La antigua Facebook cambió su nombre en 2021 para reflejar su apuesta por el metaverso. Ha lanzado Horizon Worlds, un espacio virtual para actividades sociales y juegos, y también desarrolla las gafas Oculus VR para navegar por el metaverso.
• Google: El gigante de Internet lleva años investigando las posibilidades del metaverso. En 2013, lanzó sus Google Glass, unas gafas de realidad aumentada que permiten acceder a información y servicios en tiempo real. También ha creado Google Earth VR, una versión virtual de su famoso mapa interactivo.
• Microsoft: La empresa de software también tiene su propio proyecto de metaverso llamado Mesh, que permite crear experiencias compartidas en realidad mixta. Microsoft Mesh es una plataforma que ofrece a los trabajadores remotos e híbridos una manera más natural de conectarse con una sensación de co-presencia. Mesh permite a los creadores crear experiencias de empleados personalizadas que reúnan a las personas para la incorporación, formación, creación de equipos, etc. Microsoft está incorporando funcionalidades de Mesh a Microsoft Teams con avatares y experiencias envolventes para que los empleados puedan conectarse fácilmente donde se produce el trabajo. Microsoft cuenta también con las gafas HoloLens, que combinan el mundo real y el virtual.
• Decentraland: Es una plataforma basada en blockchain que permite a los usuarios comprar, vender y poseer terrenos virtuales en un metaverso descentralizado. Los usuarios pueden crear y monetizar contenido, interactuar con otros y participar en actividades económicas dentro de este metaverso.