Por qué el Almacenamiento como servicio es una buena forma de avanzar para las organizaciones inteligentes

Los datos han pasado de ser una herramienta empresarial útil a convertirse en un valioso activo del balance de una empresa. Las compañías que son capaces de gestionar con eficacia los datos, agregándolos, almacenándolos y analizándolos, pueden lograr una gran ventaja competitiva al redefinir la función de los análisis empresariales y destinarlos a la obtención de información y la creación de nuevas aplicaciones digitales.

Sin embargo, el tamaño, la complejidad creciente del tipo de datos, los requisitos de rendimiento, los protocolos de seguridad y la proximidad de diversas herramientas y plataformas de computación hacen que las opciones de almacenamiento en las propias instalaciones rara vez sean suficientes para asumir esta tarea y exijan un rediseño constante de las redes, la protección y los componentes de la infraestructura.

Los diseños y las compras de almacenamiento inflexibles y con una misión concreta afectan a la capacidad de una organización para incorporar y consolidar los datos y hacer que estén disponibles para que los usuarios redefinan su función y los adapten de manera oportuna. La mejor solución es un Almacenamiento como servicio (STaaS) mediante suscripción para varios protocolos y niveles de servicio.

Miguel Pleite, Systems Engineer Manager de Pure Storage.

Una encuesta reciente realizada por la revista Harvard Business Review ha revelado que el 90% de los encuestados cree que los datos son críticos para la estrategia empresarial de su organización, que el 88% está de acuerdo en que el almacenamiento es fundamental y que el 87% afirma que una infraestructura de almacenamiento de datos sólida es muy importante. Sin embargo, solo el 56% dice que su infraestructura de datos actual es muy efectiva.

Es muy difícil que los responsables de la arquitectura realicen un diseño basado en un determinado conjunto de aplicaciones y requisitos empresariales, con un presupuesto optimizado, y luego lo añadan cosas o lo rediseñen y adapten para las nuevas cargas de trabajo y plataformas, sin saltarse todos los costes y los plazos de implementación. El Almacenamiento como servicio es una buena opción para las empresas que necesitan una plataforma de almacenamiento que les permita adaptarse a distintas capacidades, tipos de datos, conectividades y niveles de servicio y que les ofrezca la posibilidad de usar cualquiera de estas opciones para proyectos a corto y a más largo plazo, sin penalizaciones operativas y en cuanto a costes.

Muchas organizaciones prefieren evitar el proceso tradicional de entre tres y cinco años de gestión de la planificación de la capacidad, elaboración del presupuesto, adquisición, implementación y cambio que el almacenamiento local exige. Y esto es especialmente válido por lo que se refiere al deseo de mover o replicar las cargas de trabajo en la nube o en un proveedor de servicios gestionados. Nadie lo consigue sin recurrir a gran escala a un exceso de diseño y de gasto.

El Almacenamiento como servicio es atractivo para las pequeñas y medianas empresas que no tienen los recursos necesarios para mantener una infraestructura de almacenamiento en sus propias instalaciones. Este puede suministrarse mediante una solución local de tamaño más pequeño o a través de un proveedor de servicios, con una afectación nula en los niveles de servicio o la flexibilidad. También proporciona ventajas importantes a las organizaciones más grandes que tratan cantidades enormes de datos con regularidad, que tienen un gran número de proyectos que dependen de los datos, con sus propios requisitos, y que con frecuencia extraen o redefinen la finalidad de los datos de otras aplicaciones.

Estas ventajas incluyen el ahorro de costes en la desduplicación de datos y una mejora de la recuperación de desastres, ya que las organizaciones solo pagan una vez por los datos únicos. El Almacenamiento como servicio ofrece todas las ventajas clave de cualquier modelo como servicio, lo que incluye la flexibilidad, la seguridad y el traspaso de las responsabilidades fundamentales al proveedor de servicios. Además, libera al personal informático para que pueda centrarse en actividades de mayor valor añadido y permite que la capacidad y el rendimiento del almacenamiento pueden escalarse, ampliándose o reduciéndose según sea necesario, sin riesgos operativos y sin aumentar de manera exponencial los costes.

Por otro lado, y lo que es más importante, el uso de los modelos de Almacenamiento como servicio permite que las empresas obtengan un valor real de sus datos, ya que son más fiables y flexibles que los enfoques locales o basados únicamente en la nube.

El Almacenamiento como servicio elimina una gran parte de las complejidades relacionadas con el almacenamiento de los datos y reduce los desajustes, los costes y las complejidades que van asociados al intercambio de datos en la empresa. Teniendo en cuenta el papel clave que los datos juegan en casi todas las aplicaciones empresariales en la era digital, su valor no debe subestimarse. Cuando las decisiones se adoptan basándose en los datos, la planificación es más sencilla y precisa y las organizaciones pueden promover la innovación y las oportunidades de crecimiento de un modo seguro.

A medida que los datos adquieren unas dimensiones aún mayores y que se incrementa su complejidad, las organizaciones deben replantearse todo su enfoque del almacenamiento de datos. El hecho de seguir atados a una serie de soluciones desarrolladas de un modo distinto y que no admiten la flexibilidad y la escalabilidad puede impedir que las organizaciones alcancen sus objetivos de transformación y utilicen sus datos para competir eficazmente. El cambio al Almacenamiento como servicio puede ayudar a superar estos obstáculos y liberar todo el potencial de los datos en las organizaciones inteligentes.