Tecnología y turismo, un tándem unido por la Inteligencia Artificial
El sector turístico español continúa batiendo récords año tras año. Más de 80 millones de turistas visitaron nuestro país en 2017, generando casi el 12% de nuestro PIB. Sol, playa, montaña, ciudades, y gastronomía son reclamos que, junto a las buenas infraestructuras viarias y hoteleras, actúan como un imán para visitantes de todos los puntos del planeta.
Contando con el sol por aliado, los hoteles españoles se han puesto al día en cuanto a tecnología. Ya hacen uso de la realidad virtual —para la formación de empleados o para ofrecer información al cliente—, además de wearables, robots, chatbots, o aplicaciones de Inteligencia Artificial de cara a optimizar los servicios ofertados a sus clientes, ávidos de buenas experiencias. También el reconocimiento de voz, el machine learning, o el big data ofrecen al hotelero y a sus huéspedes la oportunidad de mejorar su estancia en el establecimiento, y de anticiparse a las tendencias turísticas, con el fin de ofrecer siempre el mejor servicio.
Pese a los claros avances conseguidos, aún hay mucha tecnología por implementar de cara a optimizar la experiencia del usuario, potenciando la conectividad de las instalaciones o integrando aplicaciones de inteligencia artificial que permiten liberar al huésped de la necesidad de una llave porque la puerta de la habitación le reconoce al acercarse.
La mayoría de los huéspedes que se alojan hoy en día en establecimientos hoteleros llevan consigo uno o varios dispositivos móviles. Por ello, la conectividad juega un papel primordial a la hora de seleccionar alojamiento. El creciente interés de los huéspedes por estar siempre conectados y con acceso a contenidos, dificulta que el Wi-Fi convencional sea suficiente para una generación que quiere disfrutar de vídeos en streaming durante su estancia en un establecimiento hotelero.
Con el despliegue de una solución Wi-Fi acorde con las expectativas del cliente, el hotel podrá optimizar procesos tales como las reservas, las compras o la recopilación de información de sus huéspedes, y sabrá más de sus gustos y preferencias y logrará que vuelvan.
El incremento de las expectativas de servicios por los huéspedes se ha convertido en uno de los mayores impulsores de la adopción de nuevas tecnologías en el sector hotelero español que, sabedor de las oportunidades de negocio que el turismo genera en nuestro país, no quiere quedarse rezagado frente a su competencia internacional. El aumento en la inversión en TI continúa situando al sector hotelero español al frente de la hostelería mundial. En la actualidad, y con el fin de satisfacer las expectativas tecnológicas del cliente, los hoteles españoles están invirtiendo fundamentalmente en tres áreas:
- Mejora de la ciberseguridad para la protección de los pagos y de los datos confidenciales de los huéspedes. Una conectividad segura tiene un valor esencial para el sector hotelero, que a diario maneja una gran cantidad de datos sensibles de sus clientes. El sector ya se está dotando de soluciones que le permite la creación de perfiles de usuario para garantizar que el acceso a la red es seguro. El perfil reconoce al usuario y la red lo autoriza antes de que pueda acceder. La creación de estos perfiles permite acoplar diferentes servicios para el personal y los clientes, como el registro VIP o las promociones especiales. Además, el acceso unificado garantiza que a los usuarios se les apliquen las mismas políticas de servicio y seguridad en todo el establecimiento, para que disfruten de una experiencia homogénea al moverse, por ejemplo, de la zona de salud y fitness a las salas de reuniones o a las habitaciones.
- Optimización de la tecnología de las habitaciones para aprovechar el poder del internet de las cosas (IoT) con el objetivo de crear nuevos servicios controlados mediante dispositivos móviles. El IoT incorporado en las habitaciones y en los espacios comunes permite reducir costes y mejorar el servicio al cliente. Se pueden usar sensores inteligentes para controlar el consumo energético, por ejemplo, atenuando las luces cuando hace sol, para detectar incidencias de mantenimiento antes de que se conviertan en problemas importantes, por ejemplo, una ducha que se ha quedado abierta, un aparato sobrecalentado o una tubería rota.
- Oferta de banda ancha. La conectividad inalámbrica permite a los huéspedes y al personal acceder a la red desde cualquier lugar y dispositivo, y disfrutar de la misma calidad de experiencia, estén donde estén. En paralelo, contar con una red inalámbrica robusta y con soluciones para gestionarla proporciona al hotel una visibilidad total de sus recursos, lo que mejora el nivel de interacción con la red, y de las aplicaciones que operan sobre la misma, lo que redunda en una mejor atención al cliente. Al aplicar análisis inteligente a los datos, se consigue información valiosa: por ejemplo, dónde pasan más tiempo los clientes, cuándo son las horas punta de las visitas o cómo determinar si son clientes nuevos o no. La información obtenida permite desarrollar servicios personalizados que contribuyan a la mejora de la experiencia dentro del recinto.
Solo mediante el conocimiento de las preferencias del huésped, el hotel anticiparse a una eventual reserva de alojamiento; y esto, en definitiva, es lo que eleva las probabilidades de que el potencial huésped decida alojarse en ese hotel, y vuelva una y otra vez para repetir esa buena experiencia.