MCarraro representa a Extrude Hone para la Península Ibérica
Perfeccionando la producción de cigüeñales con mecanizado electroquímico
Asegurar la permanente y suficiente lubricación de las zonas de apoyo, muñequillas y muñones es crítico para evitar roturas de motor. La demanda de los consumidores es hacer cada vez el cigüeñal más pequeño, por lo que el número de intersecciones de agujeros se incrementa. Todas las rebarbas y virutas producidas en el proceso de taladrado deben ser removidas.
Mecanizado electroquímico de Extrude Hone
El proceso de mecanizado electroquímico de Extrude Hone podría haber ayudado a Hyundai a evitar este problema. En lugar del proceso mecánico de taladrado con una broca, ECM es un método substractivo que remueve material basado en el principio de la disolución anódica del metal. Usa un cátodo conectado al polo negativo para remover material en forma selectiva de la pieza conectada al polo positive. Una solución de electrolito (NaCl, NaNO3, en una base de agua o Glicol) permite la transferencia de carga en la zona entre el cátodo y la pieza, que remueve los iones metálicos de la pieza. La ley de Faraday define cuanto material será removido y el material será retirado en forma de hidróxido por el electrolito.
El proceso ECM puede hacer 3 funciones en la producción del cigüeñal:
- Rebarbar las intersecciones de los canales de lubricación: el proceso ECM asegura que todas las rebarbas y partículas son completamente disueltas.
- Pulido de los canales de lubricación en la entrada y salida: la superficie pulida asegura un suave y consistente fluido.
- Formar un radio en la entrada y salida del canal de lubricación: formando un radio en la entrada del canal de lubricación incrementa la resistencia a la fatiga, y esto se logra sin introducir una carga mecánica o térmica al material.
Con la completa disolución de rebarbas y virutas usando el proceso ECM en las intersecciones y canales de lubricación se asegura la suficiente y permanente lubricación, evitando fallos de motor y posibles desastres.
ECM puede ser usado para muchas mas aplicaciones además de cigüeñales. El proceso ECM Extrude Hone ofrece la siguientes ventajas a los fabricantes de todo tipo de piezas grandes o pequeñas:
- Tiempos de proceso muy rápidos (normalmente 5–20 segundos)
- Remoción de material estipulada en zonas precisamente definidas.
- Desbaste y acabado en una sola operación.
- La posibilidad de realizar múltiples tareas en un ciclo.
- La habilidad de desbarbar zonas de difícil acceso y metales complicados de mecanizar.
- Ausencia de rebarbas secundarias.
- Electrolitos especialmente formulados que minimizan el riesgo de corrosión.
- Regulación y control de todos los parámetros relevantes.
- Estabilidad superior y control del proceso
Extrude Hone participa en la BIEMH 2016, en el pabellón 5, stand I-57.