Control y Planificación

Desde que en 1991, el Instituto Iacocca de la Universidad de Lehigh acuñó el término de "fabricación ágil" han surgido diversos enfoques sobre la misma; de ellos en el planteamiento del presente artículo se asume el siguiente: la fabricación ágil asimila todo el rango de las tecnologías de la fabricación flexible, del TQM, de la fabricación JIT y de la fabricación "lean" [1]; no obstante se eludirá todo lo relativo al TQM. Su primer objetivo es la reducción del tiempo de suministro en todas las áreas de fabricación y por tanto también los tiempos de preparación. Un elemento característico de la fabricación flexible es la Tecnología de Grupos (GT –Group Technology) y su conocida contribución a la reducción de los tiempos de preparación. En cuanto a la fabricación JIT y "lean", la primera forma parte de la segunda pues el eje central de ambas es el sistema de arrastre kanban que facilita un flujo constante de materiales [2] y que contribuye a la disminución global del tiempo de suministro.

Además como atributos de la fabricación ágil se identifican la capacidad de respuesta, la rapidez, la flexibilidad y la competencia ante cambios impredecibles y sin precedentes [3]; si bien la GT permite responder a esta exigencia, el sistema kanban se diseña para una situación de demanda estable. Ambos conceptos han sido analizados conjuntamente, pero no bajo el prisma de la fabricación ágil; en consecuencia, los objetivos de este artículo, son: i) revisar los distintos métodos de la GT y las restricciones que presentan al utilizar el sistema kanban y ii) desarrollar un marco operativo que facilite la consecución de los atributos de la agilidad.

Si bien, de forma genérica, con la GT es posible la fabricación de mayor variedad de piezas con menores cambios de herramientas, de transporte entre máquinas y de modificaciones de localización y orientación de las piezas, los métodos cuantitativos de la fabricación celular ofrecen mayores posibilidades de integración con el kanban frente a los sistemas de codificación y clasificación. De acuerdo con Chan, Lam y Lee [4], en el nivel de programación de una célula de fabricación, el enfoque ha de basarse en el trabajo en curso, el tiempo de proceso y el tiempo de preparación. Todo ello repercute en el tamaño del lote, en el stock de seguridad y por tanto en el número de kanban puestos en circulación.

La necesidad de fabricar productos variados rápidamente hacen de la GT y del sistema kanban, elementos importantes dentro del entorno de la fabricación ágil; ambos métodos se han analizado y de forma particular las restricciones al integrar ambos, así como la manera de superarlas.

[1] Y.Y. Yusuf, M. Sarhadi, A. Gunasekaran, Agile manufacturing: The drivers, concepts and attributes. International Journal of Production Economics, 62, (1999) p. 33.

[2] H. Soriano-Meier, P.L. Forrester. A model for evaluating the degree of leanness of manufacturing firms, Integrated Manufacturing Systems, 13(3), (2002) p. 104.

[3] H. Sharifi, G. Colquhoun, I. Barclay, Z. Dam, Agile manufacturing: A management and operational framework. Proc. Instn. Mech. Engrs. 215(6) part B, (2001) p. 857.

[4] C.Y. Chan, F.W. Lam y C.P. Lee, Considerations for using cellular manufacturing, Journal of Materials Processing Technology, 96 (1999) p.182.