La Comisión Europea presenta un plan de acción para el desarrollo de una bioeconomía sostenible y circular
En un mundo de ecosistemas y recursos biológicos finitos, es necesario hacer un esfuerzo de innovación para alimentar a la población, suministrar agua potable y energías limpias. La bioeconomía permite convertir algas en combustible, reciclar plástico, transformar los residuos en muebles o ropa nueva, o convertir los subproductos industriales en fertilizantes de base biológica. Cuenta con el potencial de generar un millón de nuevos empleos verdes para 2030.
El vicepresidente responsable de Fomento del Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad, Jyrki Katainen, afirmó: «Actualmente, resulta obvio que necesitamos un cambio de sistema en lo que se refiere al modo en que producimos, consumimos y descartamos los productos. Desarrollando nuestra bioeconomía (el segmento renovable de la economía circular) podemos encontrar nuevos e innovadores modos de suministrar alimentos, productos y energía sin agotar los recursos biológicos limitados de nuestro planeta. Además, replantearse nuestra economía y modernizar los modelos de producción no tiene que ver solo con el medio ambiente y el clima: existe también un enorme potencial en lo que se refiere a los empleos verdes, en especial en zonas rurales y costeras».
El comisario de Investigación, Ciencia e Innovación, Carlos Moedas, añadió: «La UE desea liderar la transformación de los desechos, residuos y desperdicios en productos de alto valor, productos químicos ecológicos, piensos y productos textiles. La investigación y la innovación resultan fundamentales para acelerar la transición ecológica de la economía europea y alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas».
Alcanzar una economía circular sostenible exige un esfuerzo coordinado por parte de las autoridades públicas y de la industria. Para dirigir dicho esfuerzo colectivo, y teniendo en cuenta tres objetivos clave, la Comisión pondrá en marcha catorce medidas concretas en 2019:
1. Incrementar y reforzar los sectores con base biológica:
A fin de liberar el potencial de la bioeconomía para modernizar la economía y la industria europea en aras de una prosperidad largoplacista sostenible, la Comisión:
establecerá una plataforma de inversión sobre bioeconomía circular por un valor de 100 millones EUR para acercar las bioinnovaciones al mercado y reducir el riesgo de la inversión privada en soluciones sostenibles;
facilitará el desarrollo de nuevas biorrefinerías sostenibles en toda Europa.
2. Implantar rápidamente la bioeconomía en toda Europa:
Los Estados miembros y las regiones, en particular de Europa Central y Oriental, disponen de un gran potencial apenas utilizado en materia de biomasa y residuos. Para abordar esta cuestión, la Comisión:
elaborará un calendario estratégico para la implantación de sistemas alimentarios y agrícolas sostenibles, productos silvícolas y de base biológica;
creará un mecanismo de apoyo a las políticas en materia de bioeconomía en la UE para que los países de la Unión parte del programa Horizonte 2020 desarrollen agendas nacionales y regionales en este sector;
lanzará medidas piloto para desarrollar la bioeconomía en zonas rurales, costeras y urbanas, por ejemplo en torno a la gestión de los residuos o el almacenamiento de carbono.
3. Proteger el ecosistema y entender las limitaciones ecológicas de la bioeconomía:
Nuestro ecosistema se enfrenta a grandes amenazas y retos, como el crecimiento demográfico, el cambio climático o la degradación de los suelos. Para hacer frente a estos desafíos, la Comisión:
aplicará un sistema de supervisión en toda la UE para hacer un seguimiento de la transición hacia una bioeconomía sostenible y circular;
mejorará nuestra base de conocimiento y nuestra comprensión sobre áreas específicas de la bioeconomía recabando datos y facilitando su accesibilidad en el Centro de Conocimiento sobre Bioeconomía;
ofrecerá orientaciones y promoverá buenas prácticas para operar en la bioeconomía dentro de unos límites ecológicos seguros.
La Comisión celebrará una conferencia el 22 de octubre en Bruselas para debatir el plan de acción con las partes interesadas y poner de relieve los productos tangibles de base biológica.