Light + Building 2022 pone la vista en el futuro: desde los edificios y las redes inteligentes hasta la ciudad inteligente
En los últimos años, la tendencia ha sido la urbanización. Como el espacio en las ciudades es limitado, hay que aprovecharlo al máximo. Se está creando un espacio vital más amplio, por ejemplo, mediante ampliaciones sostenibles de las propiedades en construcción de madera. Sin embargo, la base de las ciudades inteligentes y, por tanto, de un suministro energético eficiente y seguro, es la electrificación y digitalización de las infraestructuras. Una vez conseguido este paso, es posible el uso económico de fuentes de energía sostenibles en distintos sectores.
Factor clave de la innovación
Los desarrollos e innovaciones tecnológicas desempeñan un papel clave en los conceptos de las ciudades inteligentes. Permiten nuevos enfoques y soluciones, como la invención de la batería de iones de litio, por ejemplo, que fue decisiva para el desarrollo de la electromovilidad sostenible. Ahora las energías renovables se abren camino de forma transversal en el desarrollo de la tecnología de la información y la comunicación, para garantizar una red segura y eficiente. En el ‘desarrollo final’ de una ciudad inteligente, las personas, los lugares y las infraestructuras estarán conectados en red entre sí. Ya es una realidad hoy en día: la conexión en red y la recopilación de datos, generalmente más fuertes, de los oficios técnicos dentro de los edificios.
Los edificios inteligentes son la base de una ciudad inteligente. Aquí es donde los residentes pasan gran parte de su tiempo, ya sea viviendo (‘casa inteligente’) o trabajando en edificios funcionales (‘edificio inteligente’). A través de una amplia red, los datos de los numerosos sensores están a disposición de todos los oficios y garantizan así, entre otras cosas, un menor consumo de energía.
Según la Asociación Alemana de Fabricantes de Material Eléctrico y Electrónico (ZVEI), la automatización inteligente de edificios puede reducir el consumo de energía y las emisiones de CO2 entre un 30% y un 40%. Los sistemas de autoaprendizaje permiten, a su vez, la participación intensiva de los usuarios del edificio, por ejemplo, controlando la iluminación, el aire acondicionado y la calefacción en función de la demanda o mostrando rutas de escape individuales en dispositivos móviles. Además, se pueden implantar sistemas de seguridad que, por ejemplo, no sólo detecten peligros como incendios o robos, sino que puedan predecirlos.
Iluminación inteligente para el ahorro de energía
Otro aspecto que contribuye al ahorro energético es la iluminación. Según el Grupo de Trabajo sobre Balances Energéticos, la iluminación representa alrededor del 13% del consumo eléctrico alemán. La introducción de las luminarias LED supuso un gran avance para la tecnología de iluminación, ya que ahorran hasta un 80% de energía en comparación con las luminarias convencionales.
La luz inteligente también tiene una gran influencia en el bienestar y la sensación de seguridad de las personas. Ajustando la temperatura y el color de la luz de las luminarias LED, se pueden realizar escenarios individuales que aumentan el bienestar y la productividad (‘Human Centric Lighting’). A mayor escala, las luminarias LED de las calles pueden constituir la columna vertebral de una ciudad inteligente. Equipadas con WLAN, función de carga para coches electrónicos, botón de llamada de emergencia o sensores para medir el tráfico y el tiempo, son un componente importante del IoT en red. Ya se han instalado proyectos piloto en Berlín-Adlershof y en Santander (España).
Movilidad inteligente sólo con infraestructura de recarga electrónica
Muchas ciudades llevan tiempo sufriendo atascos y altos niveles de contaminación. Por ello, los nuevos conceptos de movilidad son la base de las futuras ciudades inteligentes. Además de la gestión inteligente del tráfico y la conexión en red de los medios de transporte, la expansión intensiva de la movilidad eléctrica es la clave para ello.
Aunque los indicios apuntan a un crecimiento en la matriculación de vehículos eléctricos, todavía es necesario ponerse al día en la expansión de la infraestructura de recarga necesaria. En la ciudad inteligente debe haber suficientes puntos de recarga, que vayan acompañados de una gestión inteligente de la misma. Lo ideal es que ésta última esté integrada en una red eléctrica inteligente (‘smart grid’) que proporcione energía regenerativa con independencia del tiempo y de forma económica. Así se puede evitar la sobrecarga de la infraestructura.
Conclusión y perspectivas
Los retos del futuro, como la urbanización y el cambio climático, sólo pueden resolverse con conceptos orientados al futuro e ideas innovadoras. Las ‘smart cities’ ya no son una visión, sino que ya se están aplicando. De hecho, en 2014, la UE nombró 240 ciudades europeas que están llevando a cabo conceptos de ciudad inteligente más o menos avanzados.
Para pasar de las medidas individuales y los proyectos piloto a soluciones eficientes es necesario un intenso intercambio entre todas las partes, tanto a nivel nacional como internacional. Sólo si los responsables políticos, los planificadores urbanos, los operadores de edificios, los arquitectos, los planificadores especializados, los instaladores y también los representantes de los ciudadanos intercambian ideas y elaboran soluciones viables juntos, las ciudades inteligentes se convertirán en una realidad en un futuro próximo y serán aceptadas por sus habitantes.
La edición de otoño de Light + Building 2022 en Fráncfort del Meno ofrece una plataforma ideal para este importante intercambio. Aquí, el foco de atención se centrará en los conceptos de automatización de edificios, ciudades inteligentes, barrios inteligentes y gestión de la energía, así como en la infraestructura avanzada de recarga electrónica y la seguridad en red.
La edición de otoño de Light + Building tendrá lugar del 2 al 6 de octubre de 2022 en el centro de exposiciones Messe Frankfurt y estará acompañada por la Light + Building Digital Extension (2 al 14 de octubre de 2022).