Terrassa, Barcelona, escoge alumbrado de bajo consumo con los drivers LED de Tridonic
Terrassa, Barcelona, ha actualizado más de 29.000 puntos de luz. Con esta renovación lumínica el municipio barcelonés logra un uso más eficiente de la energía. Los drivers LED regulables de corriente constante de Tridonic “han contribuido de manera significativa” a alcanzar ese menor consumo energético.
En 2013 el Ayuntamiento de Terrassa puso en marcha el proyecto ‘Terrassa Energía Inteligente’ (TEI), cuyo objetivo principal era la reducción del impacto medioambiental. Una vez finalizado el proyecto, la ciudad catalana espera ahorrar alrededor de 17.000 MWh de energía anuales, apuntaron en una nota de prensa fuentes de Tridonic.
Para hacer realidad este proyecto, el equipo de gobierno municipal confió en nuevas tecnologías, así como en el desarrollo de energías renovables, en la implementación de un sistema de gestión de energía moderno y la creación de una flota de autobuses híbridos para el transporte público urbano.
Otro elemento destacado del proyecto TEI es la modernización de la iluminación. Así, a principios de 2019 el Ayuntamiento de Terrassa, junto con su socio para este proyecto, imesAPI, inició la renovación de la iluminación de toda el área urbana. En total se sustituyeron 29.000 puntos de luz por luminarias LED “de reconocidos fabricantes, como Novatilu, Schréder, Carandini, Signify, Disano y Lamp”.
Control único: independientemente del modelo y del fabricante
Las nuevas luminarias de la zona urbana cambian según las necesidades y aplicaciones. “En total estamos utilizando unos 30 modelos de siete proveedores distintos, ” explica Albert Marín, director del proyecto Smart City de Terrassa.
“Esta instalación heterogénea supone un desafío, particularmente para el control de la iluminación. Además de contar con una alta eficiencia energética, las luminarias deben cumplir con varios requisitos. Un requisito era, por ejemplo, poder modificar la curva de regulación de las luminarias cuando sea necesario mediante un programador o a distancia. Además, por motivos de seguridad, en las inmediaciones de las paradas de autobuses y estaciones de tren, las luminarias LED debían ajustar su intensidad al 100 %, en cuanto un transeúnte se acerque al punto de luz. Era necesario encontrar una solución sencilla que pudiera controlar todo el alumbrado público a pesar de lo heterogéneo de su estructura”, explicaron fuentes de Tridonic.
Los socios del proyecto se decidieron por los drivers LED regulables de corriente constante de Tridonic. Desarrollados especialmente para su uso urbano e industrial, “estos drivers no son solo robustos, sino que también cuentan con una vida útil nominal de 100.000 horas. Junto con un rango de regulación de entre el 1 y el 100 % y una alta protección, las soluciones de iluminación LED de la cartera de productos para exterior de Tridonic, destacan por su ahorro energético. Dependiendo del modelo y diseño, los dispositivos pueden alcanzar una eficiencia de hasta el 94 %. Su consumo de energía en modo de espera es extraordinariamente bajo”, añaden desde la compañía.
Un 80 % menos de consumo energético
“Gracias a la transición completa a las luminarias LED en toda el área urbana y el ajuste específico de los niveles de iluminación a las circunstancias del entorno, el ayuntamiento de Terrassa, junto con su socio de proyecto, imesAPI, ha conseguido reducir alrededor de 3.500 kW de la potencia instalada. En el futuro, cada año se ahorrarán 12.200 MWh. En total, Terrassa ha conseguido reducir el consumo energético de su iluminación exterior en un 80 %”, añaden desde Tridonic.
“Con los nuevos drivers hemos conseguido unificar y simplificar la gestión de nuestra iluminación exterior; independientemente del fabricante y modelo de luminaria utilizado", concluye el director del proyecto, Albert Marín. “Como consecuencia, nuestro alumbrado público no es solo enormemente fiable (un avance importante en la lucha contra el cambio climático), sino también más eficiente que antes”. Además de una gestión más sencilla, el Ayuntamiento de Terrassa también se beneficia de un drástico descenso en los costes de mantenimiento gracias al número reducido de piezas de repuesto.