Aragón invertirá 9 millones de euros para mejorar la conexión a internet en el medio rural

El Gobierno de Aragón destinará este año nueve millones de euros para seguir mejorando la conectividad y el acceso a internet en el territorio aragonés. La inversión forma parte del paquete de proyectos React EU que acaba de impulsar el Ejecutivo aragonés para hacer frente a las secuelas de la pandemia y fomentar la transformación digital de la comunidad autónoma.

El anuncio lo realizaron el 25 de marzo las consejeras de Presidencia y Ciencia, Mayte Pérez y Maru Díaz, en Teruel, en el encuentro que mantuvieron junto al secretario de Estado de Telecomunicaciones, Roberto Sánchez, con los presidentes de las diputaciones provinciales de Zaragoza, Huesca y Teruel, de la Fampc y de las comarcas aragonesas, informaron fuentes del gobierno autonómico en una nota de prensa.

En la reunión Sánchez presentó el Plan Nacional de Despliegue de Banda Ancha para municipios de menos de 5.000 habitantes y las actuaciones previstas por el Gobierno central para alcanzar en 2025 el 100% de cobertura en todo el territorio e impulsar la tecnología 5G.

Tras el encuentro, las responsables autonómicas agradecieron “la sensibilidad del ministerio” con el medio rural aragonés y aseguraron que el Ejecutivo autonómico trabaja “totalmente alineado” con el Gobierno central para “garantizar el derecho a la conectividad” de todos los aragoneses, como condición indispensable para luchar contra la despoblación e impulsar la recuperación.

La inversión aragonesa irá destinada, tal y como explicaron las consejeras, a mejorar la calidad del acceso a internet en el medio rural y a complementar las actuaciones previstas por parte del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. Todo ello con el objetivo de acelerar a 2023 la llegada de la banda ancha a todo el territorio aragonés, en un momento en el que la pandemia ha puesto de relieve aún más las necesidades de una buena conectividad, especialmente para la recuperación social y económica.

En Aragón, tal y como señaló Díaz y después de las actuaciones llevadas a cabo mediante el programa ConectAragón y el factor social del acuerdo marco de telecomunicaciones, no existe un problema de falta de acceso a internet (la ciudadanía sin servicio apenas supone un 0,2%, según los últimos datos disponibles), pero sí un problema de calidad. Esto se debe a que el despliegue se hizo en su día en algunos puntos con tecnologías no escalables y que con el paso del tiempo se han revelado insuficientes para el uso intensivo que ha generado la crisis sanitaria.

De ahí que las inversiones autonómicas previstas con fondos europeos se orienten a mejorar el servicio, adecuándolo a las necesidades actuales de la ciudadanía y del tejido productivo con la vista puesta en dotar a medio plazo al cien por cien del territorio de un servicio a cien megas.

Entre otras actuaciones, el proyecto React prevé elevar de 30 a 100 megas la calidad de la conexión en 340 centros educativos aragoneses, dotar de banda ancha de última generación a polígonos empresariales del medio rural para retener y atraer nuevas empresas al territorio incrementando su capacidad de innovación y competitividad, y sustituir por fibra óptica la tecnología VDSL que suministra a muchos puntos de la Comunidad para actualizarla a un ancho de banda que cubra las necesidades de conexión de hoy en día.

Además, se desarrollará despliegue propio de infraestructuras de telecomunicaciones para poder llegar a hogares y empresas de las zonas rurales que actualmente no disponen de servicio de banda ancha de altas prestaciones y que por su situación, dificultad y perspectivas de negocio no son atractivas para los distintos operadores.

Por otra parte, Aragón presentó recientemente una Manifestación de Interés –asociada al plan de ‘Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en Aragón y a la Estrategia Aragonesa para la Recuperación Social y Económica’- para el despliegue de banda ancha y telecomunicaciones avanzadas en municipios de menos de 5.000 habitantes, de una forma coordinada, inmediata y eficiente.

En ella se propone la creación de un consorcio de telecomunicaciones rurales, al estilo de los que ya prestan otros servicios en zonas donde la densidad de población es tan baja que la competencia es imposible al no existir mercado real, y contempla actuaciones por valor de entre 80 y 100 millones de euros. Este nuevo ente de coordinación lo integrarían el Gobierno central, el autonómico, las diputaciones provinciales y comarcas y cuantas entidades locales quisieran sumarse, que aportarían tanto fondos como infraestructuras.

El consorcio permitiría una ejecución más rápida de los fondos adscritos al plan de despliegue, con el inicio inmediato de los trabajos, y la posibilidad de complementar las inversiones estatales con inversiones procedentes de la Comunidad y de los entes locales. De esta forma, no solo se garantizaría el cumplimiento de los objetivos establecidos por el Estado para 2025, sino que podría adelantarse a 2023 la fecha de plena conectividad.

En cuanto al impulso del 5 G, Aragón trabaja ya en un proyecto pionero para el despliegue de esta tecnología en el Circuito de Motorland y en el parque tecnológico anexo, Motortech, como campo de pruebas para la movilidad autónoma, así como de otros sectores que podrían verse beneficiados de esta nueva generación de comunicaciones en movilidad.