Enel X, Bruselas y el BEI se unen para impulsar la movilidad eléctrica

Enel X, “la línea de negocio de servicios energéticos avanzados del grupo Enel”, ha logrado el cierre financiero para el proyecto Ambra-Electrify Europe (Ambra-E), que prevé la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos en Italia, España y Rumanía. El proyecto está cofinanciado por la Agencia Ejecutiva de Innovación y Redes (Inea) de la Comisión Europea, a través del programa CEF (Mecanismo ‘Conectar Europa’), y el Banco Europeo de Inversiones (BEI), además de recursos propios de Enel X.

El proyecto Ambra-E -coordinado por Enel X y ejecutado por sus empresas de Italia, España y Rumanía- supone la instalación de más de 3.000 puntos de recarga a lo largo de siete corredores de la red transeuropea de transporte (red TEN-T), que incluye las principales vías de conexión en nudos urbanos y algunas de las principales carreteras. Está previsto que esté finalizado en 2022, informaron fuentes de Enel X en una nota de prensa.

Los puntos de recarga formarán parte de la red pública de infraestructura de recarga de Enel X en los tres países citados e incluye puntos de recarga Quick (hasta 22 kW de corriente alterna), Fast (hasta 50 kW de corriente continua cada uno) y Ultra-Fast (hasta 350 kW de corriente continua cada uno).

Se podrá acceder a la totalidad de la red a través de la aplicación Juice Pass de Enel X, a través de las aplicaciones de los operadores que tienen acuerdos de interoperabilidad con Enel X, o para usuarios no registrados a través de pagos ad hoc. El objetivo del proyecto es "reducir los tiempos de recarga necesarios en largos recorridos en Italia, España y Rumanía para potenciar la movilidad eléctrica internacional."

La Comisión Europa seleccionó el proyecto Ambra -E en la convocatoria conjunta del programa CEF de 2017 (CEF Blending Call) que combina distintos medios de financiación para así “conseguir el nivel máximo de implicación y capital privados en favor de iniciativas de transporte limpias, minimizando la dependencia del petróleo y mitigando el impacto del transporte en el medio ambiente.”

Para este proyecto se prevé una inversión total de 70,75 millones de euros y en su financiación se incluyen 14,15 millones procedentes de una subvención proporcionada por la Comisión Europea a través de la agencia Inea. Además, en el proyecto se utilizará parte del préstamo de 115 millones de euros firmado con el Banco Europeo de Inversiones en 2018 para el despliegue de hasta 14.000 puntos de recarga públicos en toda Italia antes de 2022.

La iniciativa impulsará “el despliegue de puntos de recarga estándar y accesibles para todos los usuarios de vehículos eléctricos” y, según las mismas fuentes, permitirá superar la brecha en la adopción de la tecnología de movilidad eléctrica en los Estados miembro de la Unión Europea.

El objetivo del proyecto es "reducir los tiempos de recarga necesarios en largos recorridos en Italia, España y Rumanía para potenciar la movilidad eléctrica internacional"