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La rentabilidad es el objetivo de los alimentadores de barras para tornos de Pietro Cucchi, marca representada en España por Intermaher

La automatización, una cuestión de competitividad

Fuente: Intermaher 06/04/2010

6 de abril de 2010

Apostar por la automatización puede ayudar enormemente a una empresa a la hora de mecanizar su producción. Más allá de reducir la mano de obra, permite también simplificar y agilizar las operaciones, logrando así procesos más rápidos y eficientes. Y la alimentación automatizada de piezas forma parte de esta automatización que busca mayor competitividad y rentabilidad para la empresa.

Ejemplo de ello son los dos modelos de cargadores de barras que ofrece la firma italiana Pietro Cucchi, que comercializa Intermaher. De hecho, cada día más los multihusillos nuevos que salen al mercado incorporan ya dichos cargadores. Los clásicos tubos de guía de barras han dejado paso a estos sistemas automáticos de carga que aportan ventajas como una mayor seguridad —puesto que son elementos totalmente carenados— junto a un menor ruido provocado por el giro de las barras. Además, la carga automática de las barras evita que el operario deba realizarla manualmente, en su momento, lo que se traduce en una mayor productividad y la consiguiente reducción de mano de obra.

Pietro Cucchi fabrica dos de los modelos mas comunes: El modelo Basic, en la imagen, y el modelo Integral
Pietro Cucchi fabrica dos de los modelos mas comunes: El modelo Basic, en la imagen, y el modelo Integral.

Pietro Cucchi ofrece dos modelos como son el Basic y el Integral. El primero es un cargador de barras que se coloca en el lugar donde irían los tubos de guía de las barras y que básicamente carga automáticamente las barras quedando la alimentación de las mismas a cargo del multihusillo. El trozo de barra final es empujado dentro de la zona de trabajo y normalmente recogido por un dispositivo auxiliar.

Por su parte, el modelo Integral, muy parecido en tamaño y posición al Basic, carga automáticamente las barras y, además, realiza la alimentación de la mismas. De esta forma, el multihusillo ya no lleva las pinzas de alimentación lo que se traduce en tres ventajas importantes:

  • Primero, cuando el cliente debe cambiar de pieza, no tiene que ajustar las levas de avance en el multihusillo y no tiene que cambiar las pinzas de alimentación, que no existen. Ello supone pues menos tiempo de preparación y un menor coste en pinzas y levas.
  • Luego, el pedazo de barra sobrante es recogido y expulsado fuera del multihusillo. Se evita de esta forma que caiga dentro de la zona de trabajo, lo que provoca a veces roturas de herramientas.
  • Finalmente, se añade flexibilidad al multihusillo, logrando una mayor capacidad de barra al ser las pinzas de alimentación las que limitan el multihusillo. Se obtienen de esta manera piezas exentas de rayadas exteriores cuando no se mecaniza el mismo por la no existencia de pinzas de alimentación. Ello supone, además, la no limitación de distancia de empuje al ser este hidráulico y gobernado por el PLC del cargador.
El modelo Integral destaca por su productividad, fiabilidad y precisión, y todo con el menor ruido
El modelo Integral destaca por su productividad, fiabilidad y precisión, y todo con el menor ruido.

Cabe destacar que la firma italiana colabora actualmente con todos los fabricantes de multihusillos para poder ofrecer la solución más adecuada posible a las especificaciones de las máquinas. Asimismo, dispone de modelos homologados por los distintos fabricantes tanto para máquinas nuevas como para los modelos más populares de series antiguas.

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