Entrevista a Julio de la Peña, director de N.C. Service, S.A.
17 de julio de 2009
¿Cuál es la actividad principal de N.C. Service?
Nuestra actividad está basada en tres trabajos diferenciados dentro del negocio del arranque de viruta a través del fresado: dar servicio técnico a usuarios de todo el mundo de fresadoras, en su mayoría de la marca Correa; reconstrucción, modernización, optimización y adaptación a la normativa CE de máquinas propiedad de nuestros clientes y que nos envían a nuestras instalaciones; y compra-venta de equipos usados para reconstruir y vender, pudiendo así prolongar la vida útil de dicho equipo.
¿Con qué medios cuenta para desarrollar su actividad?
En la actualidad disponemos de grandes elementos de elevación hasta 25 toneladas, fresadoras Correa CNC para el mecanizado, torno Amutio y rectificadoras Ger. En cuanto al mecanizado de piezas grandes, por lo general lo solemos subcontratar a empresas del grupo que están especializadas cada una en el desarrollo de diferentes partes y componentes de la máquina y son perfectamente conocedoras de nuestro ‘know how’ y, en otras ocasiones, a nuestros propios clientes que son usuarios de nuestras máquinas y por consiguiente de nuestra tecnología.
¿Ha realizado alguna inversión recientemente o piensa hacerla?
En los últimos cuatro años hemos construido, y nos hemos trasladado, a nuestras nuevas instalaciones, en una parcela de 4.000 metros y una superficie construida de 2.000 metros de talleres y 400 de oficinas, todo dotado con los mejores medios necesarios para ejercer nuestra actividad.
¿Cuántas máquinas reconvierten al año?
El último año hemos reconstruido una 20 máquinas.
¿Tiene capacidad suficiente para abordar todos los trabajos que se solicitan o debe subcontratar en ocasiones?
En este negocio de la reconstrucción y el ‘retrofiting’ siempre existe un grado alto de subcontratación y de colaboración con proveedores que en muchas ocasiones son empresas del grupo que tienen este tipo de tecnologías desarrolladas y nuestros clientes incorporan en sus máquinas.
En la reconversión, ¿cuál es el trabajo más habitual?
Lo que más demandan nuestros clientes, porque se deteriora antes o se queda obsoleto, es la parte electrónica y de CNC de la fresadora.
En casi la totalidad de los ‘retrofiting’ de máquinas, aparte de la optimización mecánica de éstas, donde es imprescindible que todos los elementos mecánicos sometidos a desgaste durante su ciclo de vida se ajusten o sustituyan, se hace imprescindible la fabricación del armario eléctrico completamente nuevo donde se colocan todos los nuevos elementos como los reguladores y control numérico de nueva generación. Evidentemente todas estas operaciones y elementos son pactadas con anterioridad con nuestros clientes, que son quienes deciden qué elementos nuevos quieren introducir.
¿Cuáles son los problemas más habituales?
El problema más habitual es la falta de presión en el mecanizado y ello conlleva hacer una verificación geométrica de la máquina, comenzando por realizar una buena nivelación de la máquina, hasta la realización de todas las correcciones mediante interferómetro láser.
En la actual situación económica parece, a priori que la reconversión de maquinaria, puede ser un sector en auge. ¿Es así?
Parece así, y así ha sido en alguna otra de las crisis que me ha tocado vivir a lo largo de los años en este negocio, pero en la actualidad tenemos en cartera varios clientes que están a la espera de conseguir financiación para acometer sus inversiones.
¿Cuál es la situación más habitual? ¿Actualizar máquinas para los propietarios de las mismas y devolverlas en buenas condiciones; adquirir máquinas obsoletas o en mal estado para su reconversión y venta?
Los clientes demandan la reconstrucción de máquinas, operaciones que por lo general tienen una duración estimada de unos tres meses, tiempo en el que a nuestros clientes les cedemos una máquina de similares características para que puedan seguir trabajando en su proceso productivo, o simplemente contemplan la compra de un equipo ya reconstruido y dejar el viejo a cambio.
La adaptación de una máquina a la normativa vigente, por ejemplo de seguridad, ¿Es frecuente?
En cuanto a la adaptación de máquinas a la normativa CE, no todo lo que contempla esta norma es relativo a seguridad. Intervienen otros criterios que hay que dejar bien claros a los clientes, y no siempre es posible y viable económicamente para los clientes el acometer este tipo de inversiones. En ocasiones es mejor y más favorable una reconstrucción total de máquina.
Reconstrucción de maquinaria
La reconstrucción mecánica o electrónica es una intervención mayor que persigue restablecer e incluso mejorar las prestaciones originales del equipo. La reconstrucción mecánica puede incluir desde el reajuste de guías, la reparación del cabezal hasta la eliminación de holguras, mientras que la reconstrucción electrónica puede implicar desde una simple actualización del software hasta el reajuste de parámetros dinámicos en los reguladores (‘drivers’). El ‘up-grading’ o ampliación funcional del equipo conlleva la incorporación de nuevas prestaciones y funcionalidades. Puede incluir entre otros, la sustitución o mejora del control numérico, la incorporación de accesorios, el aumento de la capacidad de trabajo, la mejora de la capacidad de comunicación de la máquina (interconexión red / Ethernet) o la adecuación de las máquinas a la normativa CE (carenado y seguridades).