Nicolás Correa Service celebra su 20 aniversario

Cuando hace 20 años nació Nicolás Correa Service las bases para poder afrontar esta compleja actividad estaban sentadas. Julio de la Peña, responsable de la empresa, tenía ya una larga experiencia en el mundo del fresado y la proximidad con Nicolás Correa aseguraba un caudal regular de máquinas para ser reparadas. Hoy en día el tiempo le ha dado la razón, si bien la situación ha cambiado mucho. No solo ha evolucionado la tecnología, sino también las necesidades del cliente, aunque el concepto del negocio de la reconstrucción se mantiene estable. “El cliente tiene ahora mucho más conocimiento, es más exigente y sabe perfectamente lo que quiere. Yo llevo más de 30 años en este sector y los clientes en este tiempo han aprendido mucho, vienen aquí sabiendo lo que quieren y nos lo exigen”, explica el director gerente. Un ejemplo de los nuevos retos a los que responder son todos los elementos de una máquina relacionados con la Industria 4.0, algo a lo que Nicolás Correa Service ya se está adaptando con soluciones.

Un DMG, listo para salir de las instalaciones de Nicolás Correa Service.

También ha evolucionado la idea de los clientes de lo que es una máquina de segunda mano. Las malas experiencias de algunos usuarios en el pasado, debidas a la poca profesionalización de esta actividad, no solo hicieron daño al sector sino que también causaron una serie de prejuicios que poco a poco se van superando. “De hecho —explica de la Peña— nosotros vendemos máquinas a empresas que hacen piezas para sectores punteros y complicados como puede ser el de la aeronáutica”.

Las máquinas de NC Service se utilizan con frecuencia en sectores punteros.

Bien es cierto que, además de las ventajas habituales en la compra de una máquina usada, como son el precio y el plazo, Nicolás Correa Service cuenta con la ventaja de ser una ‘rara avis’ en este segmento del mercado. Especialmente en el mundo del fresado, en Europa no es habitual que una empresa que se dedica a la reconstrucción tenga una entidad y unos recursos como los suyos. Los clientes lo saben, conocen la empresa y se ponen en contacto con ellos desde cualquier sitio del mundo, aunque principalmente desde Europa.

El resultado de todo ello son las 250 máquinas que han pasado por estos talleres y un futuro que pasa por la ampliación de su catálogo hacia la reconstrucción de otras fresadoras de fabricación nacional y centros de mecanizado, pero siempre en el segmento alto de calidad. Julio de la Peña lo tiene claro: “En este negocio hay que conocer bien lo que se hace, tener un know-how determinado en cada tipo de maquinaria para poder vender máquinas con calidad, fiabilidad y garantía, con el fin de que el cliente repita. Solo nos sirve esta estrategia. No vendemos máquinas sin garantía, ni sin instalación. La precisión y la tecnología son fundamentales y cada vez más clientes quieren máquinas con opciones como cargador automático, taladrina de alta presión, cabezales de giro automático, cuarto eje, un control modernizado... Y todo ello cumpliendo con la normativa de geometría y de calidad, así como, por supuesto, a la normativa actual de seguridad de máquinas. También es muy importante proporcionar al cliente con los manuales y documentación técnica de la fresadora y del control numérico, siempre adaptado a la máquina tal y como la entregamos.

El cliente es ahora más exigente, sabe lo que quiere y nos viene con sus necesidades. Obviamente hay muchos componentes que tenemos que poner nuevos. Todo ello está encareciendo las máquinas reconstruidas, especialmente porque vendemos lo que necesita el cliente, no simplemente lo que tenemos. Nos diferenciamos precisamente en esto”.

Hace ya dos años Nicolás Correa Service anunciaba la apertura de una nueva nave, situada junto a las antiguas, ampliando su capacidad hasta casi los 10.000 metros cuadrados. La inversión en estas nuevas instalaciones, divididas en una gran zona para almacenamiento de las máquinas antes de ser reconvertidas y otra sala de exposiciones para mostrar al público la oferta disponible en cada momento, ha dado sus frutos. “Estamos muy satisfechos. Tenemos todo el espacio lleno de máquinas esperando a ser reconstruidas y el “showroom” está dando los resultados esperados ya que los clientes pueden venir a verlas terminadas y en condiciones de funcionamiento, y comprarlas sin plazos de espera”.

La precisión, calidad y garantía son fundamentales en el éxito de NC Service.

Todo ello forma parte de una estrategia de crecimiento que apuesta por la moderación y la construcción de unos cimientos sólidos. Con sus cerca de 40 empleados, Nicolás Correa Service obtiene el 80% de su facturación en el mercado exterior, en países como Francia, Suecia, Alemania, Italia, Holanda y otros muchos de fuera de Europa.