El proyecto está financiado por la Unión Europea y liderado por Wordline
M-Sec, la solución a la seguridad en ciudades inteligentes hiperconectadas
Por todo ello, se ha creado una importante iniciativa europea y japonesa denominada M-Sec ‘Tecnologías de seguridad de múltiples capas para garantizar ciudades inteligentes conectadas’, liderada por Wordline, destinada a garantizar la seguridad de los datos en las ciudades inteligentes. Un proyecto conjuntamente financiado por el programa de investigación e innovación Horizon 2020 de la Unión Europea y por el Instituto Nacional de Tecnología de la Información y Comunicaciones (NICT) de Japón.
Para ello se ha desarrollado e implementado una plataforma segura que garantiza la autenticidad y seguridad de los datos obtenidos a través de dispositivos conectados (IoT). Porque el principal objetivo del proyecto M-Sec es la creación de una solución innovadora y segura mediante el uso de tecnologías Blockchain, BigData, Cloud e IoT, que permita la creación de aplicaciones que impliquen interacciones descentralizadas de igual a igual entre objetos y personas, en un contexto de ciudad inteligente hiperconectada.
Boom de Internet of Things (IoT)
El concepto de Internet of Things (IoT), fue fundado por primera vez hace aproximadamente 20 años por Kevin Ashton. Sin embargo, solo en los últimos años, IoT se ha convertido en una realidad a gran escala. El crecimiento exponencial de dispositivos conectados entre sí ya supera al número total de personas en el planeta. Según diferentes fuentes, se espera que para el 2020, el número de dispositivos conectados supere los 30 billones, el equivalente a 4 dispositivos por persona. Un dato abrumador y un dato que ha llevado a una profunda reflexión y de ahí, la necesidad de crear M-Sec. Porque la combinación de las tecnologías más avanzadas, nos lleva a crear una infraestructura que asegurará la integridad de la información, así como su veracidad y a su vez, nos permite crear un entorno de confianza entre las partes interesadas en el contexto de ciudad inteligente.
La seguridad de IoT plantea nuevos desafíos
Con el incremento de dispositivos conectados entre sí, no sólo se abre un abanico de oportunidades en cuestión de la cantidad de datos generados por estos dispositivos, sino que también aparecen nuevos desafíos en cuanto a la seguridad de la información. La información recopilada por estos dispositivos es un atractivo claro para ataques cibernéticos. En la actualidad, la ciberseguridad se ha convertido ya en una de las grandes preocupaciones a nivel mundial.
M-Sec, la solución a la seguridad en ciudades inteligentes hiperconectadas
La principal característica de M-Sec es proporcionar una plataforma que incluya diferentes capas de seguridad para garantizar la confidencialidad, autenticidad y veracidad de datos sensibles en todos los niveles del proceso, proporcionando una solución end-to-end. De tal manera que en el hipotético caso de que una de las capas de seguridad fallara de manera inesperada, otras capas de seguridad sean capaces de garantizar la privacidad e integridad de los datos. Para ello, se analizarán posibles riesgos y amenazas de dispositivos IoT, así como modelos tecnológicos avanzados en cuanto a la seguridad IoT, seguridad en la nube, anonimización de datos, blockchain en el contexto de IoT, entre otros.
Los resultados serán validados en seis casos de uso por medio de pilotos. Para ello, M-Sec cuenta con dos ciudades; Santander (España) y Fujisawa (Japón), cada una de ellas reconocida por haber desarrollado un enfoque de ciudad inteligente a largo plazo.
El proyecto pretende conseguir una serie de resultados que proporcionen un valor añadido para la sociedad. Primero bajo una infraestructura robusta y fiable que permita a las partes interesadas desarrollar, implementar y operar nuevas aplicaciones de IoT en ciudades inteligentes sobre objetos inteligentes. Segundo, un mercado abierto de aplicaciones IoT donde los objetos y las personas puedan intercambiar valor. Tercero, un ecosistema sostenible de partes interesadas, roles, herramientas e infraestructuras sobre las que los nuevos participantes y otros actores puedan construir y experimentar con los futuros servicios de aplicaciones. Y por último, cuarto la posibilidad de replicar el modelo M-Sec en cualquier otro país o ciudad el contexto de ciudad inteligente.
En definitiva, un gran trabajo que se inició con éxito en julio, por una duración de tres años, contando con la participación de la Comisión Europea, el Instituto Nacional de Tecnología de la Información y Comunicaciones y el de todos los socios: Instituto de Comunicación y Sistemas Informáticos (Grecia), la Comisión de Energías Alternativas y Energía Atómica (Francia), F6S Network (Irlanda), Tecnologías Servicios Telemáticos y Sistemas (España), Ayuntamiento de Santander (España), Nippon Telegraph and telephone East Corporation (Japón), Keio university (Japón), Yokohama National University (Japón), el Instituto Nacional de Informática (Japón), Waseda Univeristy (Japón) y NTT Data Institute of Management Consulting (Japón).