El II Congreso Nacional de Jefes de Seguridad se celebra en Barcelona

El pasado 5 de abril tuvo lugar en Barcelona el II Congreso Nacional de Jefes de Seguridad, organizado por Ajse, la Asociación de Jefes de Seguridad de España. El encuentro tuvo lugar en la sede del Colegio Oficial de Agentes Comerciales de Barcelona.

El programa del congreso fue extenso, cubriendo todas las áreas, cuestiones e inquietudes que atañen a los jefes de seguridad privada. La jornada se abrió con las intervenciones de bienvenida de Antonio Cedenilla, presidente de Ajse, y de Jordi Jardí, director general d’administració de seguretat del Departament d’Interior de la Generalitat de Catalunya. El presidente de Ajse explicó que aunque siempre hay escollos, “el futuro se presenta esperanzador. La aportación de la tecnología es una gran ventaja. Además, la seguridad abre fronteras, con la oportunidad de establecer acuerdo con otras asociaciones”.

Asimismo, Antonio Cedenilla apostó por la formación como estímulo para el crecimiento y profesionalización del sector. “La combinación de tecnología y formación es un éxito asegurado. En este aspecto el Reglamento de Seguridad Privada resultará esclarecedor en establecer los términos de la formación, así como para la efectividad de las novedades que implementó, en su momento, la Ley de Seguridad Privada. El sector de la seguridad privada en España es espejo para muchos países”, manifestó el presidente de Ajse.

Durante el congreso se sucedieron las mesas redondas y las ponencias de expertos en tecnología, legislación y formación, entre otras áreas.

Una de las mesas redondas que acaparó el interés de los congresistas fue la referida al análisis del presente y futuro de la industria de la seguridad y sus diferentes actividades. Esta mesa, moderada por Jordi Ortega, Asesor jurídico de Ajse, contó con la participación de Enrique París, presidente de la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser); Jorge Salgueiro, en representación de la Asociación Estatal de Formación de Seguridad Privada (Asefosp); Jordi Isern, coordinador de formación de Tenifuego-Aespi; Aleix Asna, representante de Cat Formació, y Anna Aisa, de la Asociación Catalana de Empresas de Seguridad (Acaes).

En una primera valoración, Anna Aisa destacó que “este es un sector regulado, que cumple con las exigencias de las leyes de seguridad, de protección de datos, con la legislación tributaria y la de igualdad, entre muchas otras”.

Por su parte, Aleix Asna indicó que era necesario clarificar las líneas de formación de profesionales. Actualmente existen dos vías para acceder a la titulación de vigilante de seguridad: a través de centros acreditados o mediante certificaciones de profesionalidad. “Para lograr la titulación de vigilante de seguridad es necesario realizar un curso de 180 h. La homologación de una titulación similar en un centro de certificación de seguridad no siempre es asumible. Es necesaria un mayor flexibilidad”.

Por su parte, Enrique París indicó que este todavía es un sector tradicional. “Somos un sector todavía poco propenso a la innovación, al que todavía le cuesta la integración de las nuevas tecnologías. Sin embargo, un escenario como en el que nos encontramos con nuevos retos y amenazas, requiere nuevos avances. La revolución digital nos lleva a la integración de nuevas tecnologías y la creación de nuevos perfiles profesionales”. Para ello consideró necesario formar profesionales en tecnología.

Finalmente, el presidente de Aproser Catalunya expresó su preocupación por la carencia que supone no contar todavía con el Reglamento de Seguridad Privada tras la entrada en vigor hace tres años de la Ley de Seguridad Privada. Esto motiva que no se pueda regular de forma efectiva el intrusismo profesional y la competencia desleal existente en el sector. “El reglamento debe solventar estos problemas, así como regular los nuevos servicios que debe ofrecer la seguridad privada y las nuevas vías de acceso a la profesión”.

Jordi Isern, coordinador de formación de Tecnifuego Aespi, aportó la importancia que tiene tanto en el hogar como en el mundo de la industria la seguridad contra incendios. “Según datos de Unespa, en 2015 hubo en España 42.000 incendios, de todo tipo, en el sector industrial. Estos incidentes supusieron una pérdida de 400 millones de euros, pérdida de puestos de trabajo y cierre de empresas”. Para evitar este tipo de siniestros, Jordi Isern puso el foco en la “importancia del mantenimiento de las instalaciones en la prevención de antiincendios. Esto es una tarea multidisciplinar. Una instalación bien mantenida es más segura. Los jefes de seguridad tienen la responsabilidad del mantenimiento de las instalaciones que tienen a su cargo. Además, este mantenimiento deben hacerlo empresas solventes en este tipo de operaciones”.

Jorge Salgueiro ahondó en los problemas que representa la formación y las vías de acceso a la formación. “Existe confusión en la interpretación del acceso formativo a la profesión de vigilante de seguridad, el primer escalón de la carrera profesional. Existen dos vías de acceso, a través del certificado de profesionalidad y la vía que proporciona la formación a través del Ministerio del Interior. En cuanto a supervisión y capacitación física, las pruebas de acceso a través el Ministerio son más exigentes. También es fundamental la formación permanente para todos los profesionales. Es una necesidad que los centros de formación se adapten a las nuevas tecnologías”.

Otro tema que se trató en el debate fue el de la contratación y el intrusismo. En este aspecto, Anna Aisa indicó que el sector privado ofrece “servicios a la carta para adaptarse al cliente. Para ello es necesario adoptar servicios en los que la tecnología es imprescindible y que a menudo aún no están regulados por la normativa. Esto recae en la contratación”.

Enrique París afirmó que “la seguridad cada vez es más transversal. El mercado todavía no reconoce nuestra aportación. Nuestra imagen ha mejorado pero todavía tenemos que esforzarnos más en ello. Por otro lado, el sector público se ha visto afectado por la crisis y problemas de corrupción, con lo que contrata servicios de seguridad privada primando el coste, lo que repercute en la calidad. La misma administración contrata servicios a empresas tramposas. La mejora del sector implica a todos los actores, también la administración”.

En cuanto al marco normativo Enrique París afirmó que “la normativa debe implicar la asunción de responsabilidades en el ámbito público, tal y como se hace en el privado. En el acuerdo marco que se ha firmado recientemente con la Generalitat de Catalunya existe una cláusula para realizar auditorías a adjudicatarias de servicios de seguridad”.

“Hay que denunciar el intrusismo profesional por parte de las patronales. Es algo que tenemos que asumir”, declaró Anna Aisa.

“Faltan instrumentos para tramitar las denuncias. La administración no tiene efectivos para ello”, declaró Jorge Salgueiro. “La patronal debería impulsar códigos éticos y sus asociados también tienen la obligación de asumirlos. Algunos no cumplen. Es necesario implementar la figura del ‘Compliance Officer’. En las empresas falta la cultura de la denuncia”.

Jordi Ortega estuvo de acuerdo al afirmar que “las empresas deben cambiar su cultura y acreditar sus buenas prácticas. La administración lo tiene más fácil. La normativa define el mecanismos de control. En los pliegos de contratación se debe añadir una cláusula para obligar a que se cumpla la normativa. Falta voluntad para entrar en el siglo XXI y para adaptarse al uso de las nuevas tecnologías”.

Los riesgos laborales también tuvieron su protagonismo en el II Congreso Nacional de Jefes de Seguridad. Mónica Román, vocal de la Junta Directiva de Ajse, empresaria, directora y jefa de seguridad y técnica superior en protección de riesgos laborales, centró su intervención en la importancia que tiene la formación en la prevención. Afirmó que para aplicar las normativas en prevención es fundamental querer hacerlo. “Tenemos la formación adecuada para hacerlo, pero somos reacios a cambiar nuestra conducta. Debemos habituarnos a nuevas costumbres y olvidar los viejos hábitos”.

Para ello, abogó por una formación más orientada a la práctica, basada en “aprender y hacer. La práctica es necesaria, es lo que nos falta en este país. Es imprescindible aumentar las capacidades y las competencias, potenciar la productividad y el mantenimiento y mejorar las actitudes. Por tanto, las leyes hay que mejorarlas para ser más inteligentes. El precio de la seguridad se paga una vez, el de la ignorancia, toda la vida”, apostilló.

Roberto Otero, technical manager de Hikvision Spain, se dirigió a los congresistas con una ponencia técnica acerca de los últimos avances existentes en gestión de vídeo desde el punto de vista del operador y el jefe de seguridad.

Inició su intervención explicando cómo el Deep Learning (DL) contribuye a la automatización del discernimiento de datos mediante análisis de vídeo con la ayuda de la inteligencia artificial, con lo que el sistema es capaz de tomar decisiones. El DL es una evolución del Machine Learning (ML), sistema en el que la máquina autoaprende y corrige errores, con la combinación de la inteligencia artificial, que siempre responde a unos parámetros concretos.

El procedimiento que sigue el DL se aproxima al del cerebro humano, es capaz de tomar decisiones propias a través de un procesamiento jerárquico de la información. Se basa en una estructura de redes neuronales artificiales. Para el correcto funcionamiento del DL es necesario disponer de muchos datos, la aportación del Big Data es esencial. Procesa grandes cantidades de datos. Asimismo, el DL potencia los algoritmos de aprendizaje del ML añadiendo más información, con lo que de esta manera se incrementan sus aplicaciones.

En el caso del vídeo, el DL permite discernir más datos en una imagen, saber más detalles de la misma. El DL aporta mayor precisión que los algoritmos ML. En el caso de identificaciones por imagen de vídeo, con su aportación, las imágenes borrosas se mejoran en un 45%, las imágenes laterales en un 65% y las pequeñas en un 195%.

Estas características tienen su repercusión en diversas aplicaciones:

• Reconocimiento facial múltiple.
• Detección de comportamientos.
• Conteo de personas.
• Funciones de extracción y búsqueda de vehículos.

El sistema trabaja con cámaras de doble sensor para captar colores y brillos, similar a la visión biónica humana. Asimismo, emplea sistema de compresión H265, capaces de comprimir hasta 32 megapíxeles. Las cámaras Ultra HD emplean algoritmos para mejorar todavía más estas cifras, con un ahorro del 83% de mejora, con lo que supone una importante ganancia de espacio en disco duro.

La intervención de Ignacio Carrasco, secretario general de Cloud Community Europe se enfocó a discernir cómo el desarrollo de la tecnología y de las comunicaciones ligadas a internet tienen también efectos en la seguridad.

Así, indicó que Agenda Digital 2020 establece diversos retos:

• Plan de telecomunicaciones y redes ultrarrápidas.
• Plan de confianza en el ámbito digital.
• Plan de inclusión digital y empleabilidad.

Ignacio Carrasco destacó los retos que la industria 4.0 y la cuarta revolución industrial aportarán en retos en servicios y en la economía. “Muchas empresas que trabajan en ciberseguridad reportan la vulnerabilidad que existe en la industria. Aunque sectores como la energía y la banca han mejorado en este aspecto, en otros ámbitos como el doméstico queda aún mucho por hacer”.

Ignacio Carrasco explicó que, según datos de Isaca, Information Systems Audit and Control Association, “hoy, debido a la alta interconectividad, resulta muy difícil proteger la infraestructura computacional y la información que circula por internet. Entre 1992 y 1995 existía un millón de websites. En el periodo entre 2011 y 2015 este número llegaba a los 2.900 millones. Internet aloja muchos peligros. El protocolo TCP/IP no fue diseñado para evitar sabotajes ni para tanta transmisión de información”.

La ciberseguridad es hoy esencial para el mundo de la empresa. Hoy existen dispositivos de análisis y tratamiento de la imagen más accesibles para las empresas de seguridad. También existe la posibilidad de monitorizar redes sociales, que pueden ser potencialmente peligrosas, para evitar la apropiación indebida de datos. El protocolo IPv6 facilitará también las labores de seguridad en la red, más aún teniendo en cuenta la popularización de recursos como IoT o la computación en la nube. “Los retos tecnológicos suponen una oportunidad para las empresas de seguridad. Hemos de plantearnos qué va a suceder en el ámbito tecnológico de la seguridad. Los jefes de seguridad contarán para su labor con el soporte de las TIC. Deben apoyarse en estas tecnologías, asegurándose que los proveedores sean empresas capacitadas y que, sobre todo, tengan visión de futuro. Debemos considerar las TIC como una ayuda”, concluyó Ignacio Carrasco.

Seguidamente, Ramón Arnó, abogado experto en protección de datos y seguridad de la información, desgranó las novedades que presenta el nuevo reglamento europeo de protección de datos, cuya entrada en vigor está prevista para mayo de 2018.

Una de las novedades de este reglamento es la de preservar los datos seudonimizados, aquella información que, sin incluir los datos denominativos que pueden identificar a un sujeto de manera directa, sí que potencialmente permiten, a través de la asociación con información adicional, determinar quién es el individuo que está detrás de esos datos. El usuario debe poder decidir qué datos ofrece. Aquí, la figura del ‘Privacy by Design’ es particularmente relevante y, sobre todo, debe estar integrada en el diseño de aplicaciones web.

Ramón Arnó indicó que una posible vía de negocio para las empresas de seguridad, al amparo de este reglamento, puede ser el de la oferta del servicio de análisis de riesgo del cliente dependiendo de la evolución del impacto de sus datos personales.

El reglamento también recoge los derechos de los afectados, como el derecho al olvido, para que un portal no enlace a contenidos que les puedan perjudicar, o la limitación de tratamiento, así como los consentimientos tácitos o casillas marcadas. El RGPD establece que el usuario debe dar su consentimiento expreso. Otras novedades son la ampliación del derecho de información y la protección de datos sobre el diseño y por defecto.

Tras la intervención de Ramón Arnó, clausuró la sesión matinal el Conseller d’Interior de la Generalitat de Catalunya, Jordí Jané, que recalcó la estrecha colaboración existente entre las empresas de seguridad privada y las fuerzas de seguridad autonómicas y del Estado.

Por la tarde, la sesión estuvo protagonizada por un debate acera de la visión de la administración sobre la figura del jefe de seguridad en el entorno normativo actual y futuro. El debate fue moderado por Jorge Salgueiro.

Al término de dicho debate intervino el Delegado del Gobierno en Cataluña, Josep Enric Millo, quien dio por clausurado el II Congreso Nacional de Jefes de Seguridad.