Entrevista a Raúl Aguilera, Channel Account Manager de Sony Videosecurity - Iberia - Professional Solutions Europe
Sony es un proveedor de referencia de soluciones AV/IT para empresas en una amplia gama de sectores, como los mercados relativos a la comunicación y difusión audiovisual, la videovigilancia y distribución minorista, y el transporte y grandes recintos. Ofrece a las empresas y a sus clientes productos, sistemas y aplicaciones de alta calidad para la creación, manipulación y distribución de contenido audiovisual digital. Con 25 años de experiencia en la innovación de los productos, Sony se encuentra ahora en una posición inigualable para ofrecer una calidad y un valor excepcional. Entrevistamos al responsable de su división de videovigilancia en el mercado ibérico, Raúl Aguilera, para conocer las últimas tendencias que se dan en el sector y las líneas estratégicas por las que está apostando la compañía para seguir creciendo.
¿Cómo describiría la penetración que tiene actualmente Sony en el mercado de la videovigilancia, en España y a nivel mundial?
Si bien la penetración en el mercado a nivel español nos sitúa en una posición más discreta de lo que nos gustaría, hemos conseguido crecer en facturación por segundo año consecutivo y además, hemos conseguido mejorar la rentabilidad de la división de videovigilancia. Nuestro objetivo es continuar con esta tendencia de forma sostenida en el tiempo.
A nivel mundial destacaría la importancia de Sony como el principal fabricante de los sensores CCD y CMOS que se utilizan en buena parte de las cámaras de videovigilancia y el reconocimiento que nuestro producto tiene como referente en la captación de la imagen.
En un mundo tan competitivo, ¿cuáles son los valores diferenciales que puede proporcionar a día de hoy Sony, tanto en producto como en servicio?
La propuesta de Sony es sencilla, ofrecemos un producto de alta calidad de imagen y robustez. Eso está grabado en nuestro ADN. Aquellos que han apostado por nosotros a lo largo de los años en los que llevamos trabajando el vídeo IP podrán dar testimonio de ello. Nuestras cámaras permiten adaptarse prácticamente a cualquier escenario optimizando el ancho de banda necesario para obtener imágenes que puedan ser utilizadas para el análisis de incidencias y como pruebas. Por otro lado, nuestro servicio de garantía PrimeSupport está muy bien valorado, con sustitución de producto por adelantado. En un mundo tan competitivo, nuestro objetivo es ganarnos la confianza de nuestros clientes.
¿Podría resumirnos las soluciones que componen ya la oferta de Sony en el mundo de la videovigilancia? ¿Abarcan todas las posibles necesidades del mercado? ¿Dan una oferta integral?
El objetivo es ofrecer las cámaras IP que mejor se adapten a las necesidades del cliente. Nuestro portfolio abarca desde cámaras HD de reducidas dimensiones con lente fija a cámaras PTZ Full HD antivandálicas a 60 imágenes por segundo con WDR de 130dB, velocidad de giro de 700º/s, estabilizador de imagen giroscópico y análisis de vídeo integrado. Nuestra oferta también incluye software y grabadores de vídeo en red, pero en el caso de que nuestra solución de grabación no se adapte a las necesidades del cliente no tenemos ningún problema en combinar nuestras cámaras con las soluciones de aquellos fabricantes de software con los que tenemos acuerdos de colaboración a nivel local y global. Queremos que nuestros clientes siempre tengan la oportunidad de elegir y aceptamos el reto de ganarnos su confianza con nuestro producto y nuestro soporte. Finalmente, también disponemos de monitores de gran formato para salas de monitorización y control, que permiten ver el vídeo en vivo y grabado con la máxima calidad de imagen.
Como referente del mercado, ¿cuáles son las principales tendencias tecnológicas que marcan el sector de la videovigilancia?
Las principales tendencias tecnológicas del sector de la videovigilancia en cuanto a la captura del vídeo, van orientadas al aumento de la resolución de las cámaras, la mejora de la sensibilidad de los sensores y el uso de tecnologías que permitan optimizar el ancho de banda. En cuanto a la gestión, el análisis de vídeo, cada vez más aceptado por los usuarios y extendido al poder disponer de él también en la propia cámara, permite discriminar las grabaciones que no aportan información para ahorrar en la transmisión y almacenamiento de la imagen. Por último, las soluciones de grabación y monitorización mejoran constantemente con el objetivo de permitir la centralización de sistemas de videovigilancia y asegurar la inmediatez en la consulta siendo accesibles a través de dispositivos móviles. También es muy interesante ver que hay empresas tecnológicas que han creado fórmulas para el uso de la videovigilancia con fines orientados al marketing y así convertirla en una clara inversión para el negocio.
¿En qué fase nos encontramos de la transición de tecnologías analógicas a las digitales? ¿Hay espacio para las dos? ¿Acabarán desapareciendo las primeras?
Desde Sony consideramos que son los estándares de mercado los que perdurarán en el tiempo. En este sentido, trabajar con codificación H.264, a 720p, 1080p y 4K nos garantiza continuidad, ya que son formatos de vídeo presentes en muchos otros sectores audiovisuales. Todos aquellos formatos que pretendan hacer perdurar lo que de forma natural quedaría obsoleto dependerán de que sea rentable para los fabricantes que los creen. Con la aparición de las cámaras IP de bajo coste, los clientes que se decantaban por las tecnologías analógicas sólo por precio están buscando cada vez más soluciones puramente IP y los instaladores se sienten cada vez más cómodos con las instalaciones en red. Contestando a su pregunta, creemos que las tecnologías analógicas han iniciado su declive, habrá un tiempo en el que convivirán con las tecnologías digitales y finalmente acabarán desapareciendo.
¿En qué sectores sus soluciones son hoy más demandadas (retail, banca, industria, etc.)?
Nuestra mayor demanda está en el sector industrial y en el del transporte, ya que son los sectores en los que las condiciones son más exigentes y la adaptación de la cámara a las diferentes condiciones de iluminación además de su robustez tienen mayor importancia. A pesar de que al generalizar me equivoque, nos encontramos que en el sector de la banca hay una cierta reticencia al cambio a las cámaras IP y en otros sectores es más complicado poner en valor los puntos fuertes de nuestro producto, siendo bastante común escuchar frases como “para lo que lo necesitamos… con esta otra marca, aunque la calidad no es como la de vuestras cámaras, ya nos vale”.
¿Considera que la videovigilancia entrará con cada vez más fuerza en el ámbito doméstico? ¿Será habitual tener estas cámaras en nuestras casas?
La mayor limitación para el uso doméstico de cámaras de videovigilancia domésticas es el ancho de banda de subida de los ADSL disponibles en los domicilios para la conexión remota. El de bajada ha mejorado notablemente, pero para poder enviar vídeo desde nuestros hogares la velocidad que nos ofrecen los proveedores de internet es muy limitada. En la medida en la que los principales proveedores de seguridad privada doméstica empiecen a ofrecer vídeo de mayor calidad en sus ofertas, aumentará también la demanda de aquellos clientes que quieran gestionar su propia videovigilancia en casa de forma autónoma, pero se encontrarán con la limitación antes descrita. La videovigilancia en el ámbito doméstico se irá consolidando de forma paulatina en muchos hogares e irá íntimamente ligada a futuras mejoras en las velocidades de nuestras conexiones domésticas a internet, pero será un proceso que requerirá su tiempo.
¿Y en cuanto a la seguridad en las ciudades? ¿Cómo está trabajando Sony para fomentar el desarrollo de las smart cities?
Sabemos que es un sector en auge y en ese aspecto estamos en contacto con empresas que están desarrollando productos que integren el vídeo en elementos presentes en las ciudades, pero me temo que debido a la fase del desarrollo en la que se encuentran actualmente dichos productos no puedo compartir más información.
¿Cómo puede favorecer Sony la integración de las nuevas TIC’s en el mundo de la videovigilancia (smartphones, tabletas, cloud, etc.)?
Trabajando con protocolos estándar y de transmisión de vídeo en red, ofreciendo la posibilidad de enviar flujos de vídeo diferentes adaptados a los diferentes tamaños de visualización (desde smartphones a grandes videowalls) y con la posibilidad de optimizar el ancho de banda necesario para la transmisión y almacenamiento del vídeo. Las nuevas TIC sólo necesitan poder obtener el contenido adecuadamente.
¿Qué es lo más novedoso en la oferta de videovigilancia de Sony? ¿En qué líneas están trabajando con más insistencia?
El siguiente paso en el mundo del vídeo es el 4K. Es el estándar de vídeo que ya podemos ver en las cámaras de broadcast, en los monitores profesionales, en los televisores de casa y también en los smartphones. Nuestra división ha aceptado el reto de adaptar el 4K a las necesidades del mundo de la videovigilancia, para conseguir un rendimiento excelente en condiciones de baja luminosidad, con un WDR extraordinario y buscando soluciones para minimizar el ancho de banda necesario para la visualización en vivo y el almacenamiento del vídeo grabado.
¿Podría señalarnos algún caso de éxito de instalación realizada con soluciones de Sony?
De entre todas las instalaciones en las que podemos encontrar un gran número de cámaras de Sony, la Sagrada Familia de Barcelona es especialmente significativa. Por otro lado, también han apostado por nuestros productos de videovigilancia clientes tan exigentes como Vodafone para su nueva sede en Madrid o Cartier para sus establecimientos.
¿Cómo definiría Ud. la situación que atraviesa el mercado de la Seguridad en España?
El mercado de la Seguridad en España está en un momento de cambio muy interesante que ofrece muchas oportunidades. Esto ha producido un claro aumento de la oferta, tanto en el número de productos como en el número de empresas que ofrecen soluciones de seguridad. Por supuesto, la competencia siempre es buena para el cliente final, pero muchas veces va orientada más a la reducción del coste que supone un servicio que a la mejora del servicio en sí mismo. Y entrar en una pura guerra de reducción del precio no es bueno para mantener la calidad de los servicios y soluciones ofertadas por las empresas de seguridad. No definiría exactamente como problemática esta situación, pero sí plantea el importante reto de poner en valor frente al cliente dichos servicios para asegurar su viabilidad y su rentabilidad.
¿Considera que se está trabajando bien desde la Administración el ámbito normativo? ¿Echa algo en falta?
Como fabricante a nivel mundial, no tenemos una posición concreta al respecto. Cada país tiene su idiosincrasia y su ámbito normativo y debemos adaptarnos a él. España no es una excepción. Nuestro ámbito de influencia está más orientado a la participación en la creación y consolidación de estándares tecnológicos como hicimos con ONVIF, por ejemplo.
De cara al futuro más inmediato, ¿en qué líneas estratégicas se van a centrar desde Sony? ¿Cómo cree que evolucionará el mercado?
La próxima apuesta tecnológica de Sony para el CCTV IP es la introducción de la nueva gama de cámaras en 4K. Por otro lado, el nuevo line up de monitores profesionales con Android integrado creemos que va a resultar muy interesante para poder visualizar las cámaras directamente en ellos. El mercado evolucionará hacia el vídeo IP, que cada vez es más accesible y más versátil, de forma que podamos conectarnos a un sistema de videovigilancia de alta resolución en cualquier momento y en cualquier lugar, recibiendo información sobre incidentes y alarmas de forma inmediata.