Entrevista a Enric Gross, director de Matrinox
Para empezar, ¿podría explicarnos un poco qué es Matrinox?
Matrinox se dedica a la matricería desde sus inicios, en 1986. Yo me incorporé pocos años después para hacerme cargo de ella y ahora somos 11 empleados. Nos dedicamos principalmente al sector de la automoción, trabajando para los estampadores, subcontratistas de los fabricantes de automóviles. También estamos preparados para trabajar con otros sectores, como el de los electrodomésticos, pero lo cierto es que nuestro punto fuerte es el de la automoción.
¿Aún hay mercado, pese a la caída de ventas en este mercado?
Sí. Aunque es cierto que la venta de coches ha bajado mucho, los estampadores trabajan también para fabricantes internacionales, no sólo españoles, con lo que mantienen un bueno ritmo de trabajo. Así que a nosotros no nos faltan los encargos.
Actualmente, ¿de qué parque de maquinaria disponen?
Tenemos tornos, centros de mecanizado, máquinas de electroerosión por hilo, de mecanizado de 5 ejes, una prensa hidráulica para probar nuestras matrices… Porque aunque siempre se prueban en casa del estampador, y vemos si hay que hacer pequeñas modificaciones, las primeras comprobaciones las hacemos en Matrinox.
De entre este parque de maquinaria, ¿cuántas son de DMG Mori Seiki?
Concretamente de DMG Mori Seiki tenemos un centro de mecanizado de 5 ejes, otro centro de mecanizado que puede ser también de cinco ejes, un torno semiautomático y una DMG 104.
¿Qué destacaría de estas máquinas? ¿Qué les hizo optar por ellas?
A la hora de elegir, una vez probadas vimos que eran las máquinas ideales para nosotros. Ya habíamos tenido otra maquinaria y la experiencia no fue tan buena como esperábamos. En cambio, las DMG Mori Seiki nos funcionan muy bien pero además tienen un servicio técnico muy bueno, lo que es muy importante para nosotros. En el caso de requerir una reparación, son muy rápidos, algo vital para una empresa como la nuestra, donde el tiempo de trabajo y la rapidez de entrega es un factor decisivo. Por ello seguimos confiando en ellas, como demuestra la reciente adquisición, hace unos cuatro meses, de un centro DMU 80 EVO, para trabajos de mecanizado.
El sector de la automoción es especialmente exigente en cuanto a estándares de calidad por parte de sus proveedores. ¿Cómo satisfacen estas demandas?
En Matrinox trabajamos sobre los planos entregados por los estampadores. Muchas veces piden cosas casi imposibles, pero intentamos aproximarnos lo máximo posible y solucionar las peticiones de los ingenieros que han realizado los planos. Las piezas ideadas por los diseñadores suponen a menudo importantes retos para los estampadores y, en consecuencia, para nosotros, que fabricamos las matrices con que realizarán estas piezas. Hoy en día exigen tolerancias ínfimas y esa es nuestra lucha diaria. Pero también es cierto que la innovación en maquinaria nos ha ayudado a solucionar determinadas dificultades, aunque no siempre es posible todo lo que piden y en ocasiones hacer una matriz es un auténtico dolor de cabeza.
¿Cuál es secreto de continuar con una empresa ‘familiar’ tras 30 años en el mercado?
En Matrinox trabajamos para empresas subcontratistas de Ford o Nissan, principalmente, desde hace años. La clave de contar con un elenco de clientes más o menos fijo está en la fidelización y eso se logra cumpliendo con los plazos de entrega, algo vital en un sector como el de la automoción que trabaja ‘just in time’, y en mantener una estrecha relación con el cliente. Por otra parte, la fórmula para seguir en pie es no gastar más de lo que se ingresa. No hay ningún secreto, sólo invertir en la empresa y en nueva tecnología. Quizá por ello hemos notado poco, o casi nada, la crisis, y seguimos trabajando. Hemos crecido de manera moderada y siempre en función de nuestras posibilidades, sin abusar del crédito.
¿Hasta qué punto ha sido importante la incorporación de nueva tecnología para Matrinox?
Hay que estar en la cresta de la ola si se quiere seguir en el mercado. Y lo cierto es que el avance en maquinaria, las nuevas tecnologías y las prestaciones aportadas por los fabricantes de máquinas, nos ayudan a solucionar los retos diarios a los que nos enfrentamos los matriceros. Es vital invertir en maquinaria y renovarla constantemente.
¿Cree que los fabricantes de máquinas innovan con suficiente rapidez a la demanda del mercado?
Sí, por supuesto. Constantemente, y esas mejoras se notan en el trabajo, reduciendo tiempos, costes, errores… Eso nos ha facilitado poder alcanzar los plazos que nos exigen y solucionar los problemas que se plantean. Contar con el apoyo de DMG Mori Seiki es un valor añadido a nuestro trabajo.