Festo Automation, S.A.U. - Motores y actuadores lineales (cilindros eléctricos)
Festo Pneumatic DFM
Actuadores guiados: compactos y resistente ofrecen una gran capacidad de trabajo, incluso en espacios reducidos
El actuador guiado DFM de Festo es seguro, flexible y resistente. Se trata de una guía precisa que cuenta con una gran absorción de fuerzas transversales, que lo convierten en un cilindro guiado ideal para cumplir su misión de sujetar, elevar o detener en cualquier proceso industrial. Con un diseño compacto, el actuador guiado DFM es más resistente y ofrece una capacidad de guía 100% mayor de carga útil. A ello hay que sumarle que sus dos variantes de guía, deslizante o de rodamiento de bolas, permiten que mueva masas mucho mayores que sus competidores con la máxima precisión.
Gran capacidad de trabajo, incluso en espacios reducidos: el cilindro guiado DFM cuenta con un diseño único, gracias a su combinación de actuador lineal y unidad de guía de alto rendimiento. Cuenta con dos tipos de guía distintos, lo que garantizan la compensación de grandes pares y fuerzas transversales.
Una herramienta resistente y flexible: Es una herramienta especialmente adecuada para el bloqueo y la fijación de componentes para su posterior mecanizado, pero también cuenta con una gran fuerza dinámica, lo que lo convierte en un elevador de masas de hasta más de 200 kg. Otra de sus utilidades es su función como cilindro de tope: el DFM detiene masas de hasta 150 kg de forma fiable y segura, gracias a su resistencia y robustez.
Gran capacidad de trabajo, incluso en espacios reducidos: el cilindro guiado DFM cuenta con un diseño único, gracias a su combinación de actuador lineal y unidad de guía de alto rendimiento. Cuenta con dos tipos de guía distintos, lo que garantizan la compensación de grandes pares y fuerzas transversales.
Una herramienta resistente y flexible: Es una herramienta especialmente adecuada para el bloqueo y la fijación de componentes para su posterior mecanizado, pero también cuenta con una gran fuerza dinámica, lo que lo convierte en un elevador de masas de hasta más de 200 kg. Otra de sus utilidades es su función como cilindro de tope: el DFM detiene masas de hasta 150 kg de forma fiable y segura, gracias a su resistencia y robustez.
