Norelem alcanza máxima velocidad con los engranajes cónicos y los reductores sinfín
La transmisión suave y constante de potencia y la fiabilidad son factores clave para una buena tecnología de accionamiento. Para ello, el especialista en componentes estandarizados Norelem ha lanzado su nueva gama de engranajes cónicos y reductores sinfín desarrollados para eliminar el mantenimiento y destinados a ingenieros de I+D y directores de producción.
Los engranajes cónicos son útiles cuando hay que cambiar la dirección de rotación de un árbol. Normalmente se montan en árboles separados a 90º pero se pueden diseñar para trabajar a otros ángulos. Los nuevos engranajes cónicos de Norelem son universales y están disponibles en siete tamaños diferentes con relación de transmisión de engranajes 1:1.
Los nuevos reductores sinfín son también muy versátiles para adaptarse a cualquier aplicación y están disponibles en un solo tamaño con una distancia de eje de 20 mm y 7 relaciones distintas. Un reductor sinfín, conocido también como rueda helicoidal, es un conjunto concreto de engranaje en el cual un tornillo helicoidal engrana con una rueda helicoidal/engranaje. La configuración permite al usuario determinar la velocidad de giro y facilita la transmisión de un par superior.
Las dos nuevas gamas tienen una carcasa de aluminio anodizado sellada para evitar la pérdida de lubricante y evitar la entrada de polvo. De esta forma los componentes están lubricados y no se deposita suciedad en los dientes que pueda afectar al giro de los engranajes y accionamientos. Los componentes tienen una vida útil de 1000 horas si funcionan a plena carga y velocidades de giro de 500 rpm y un ciclo de trabajo del 20 por ciento.
“Los engranajes cónicos y los reductores sinfín son componentes comunes en la industria de ingeniería y el objetivo principal es asegurar que estas piezas no se rompan o averíen”, dice Marcus Schneck, CEO de Norelem.
“En Norelem nos esforzamos continuamente en ofrecer valor y fiabilidad, motivo por el cual nuestras nuevas gamas tienen carcasas selladas. El resultado del uso de estas carcasas es una duración increíble que les permitirá resistir las pruebas de tiempo y de entornos agresivos en las que se utilizan”.
Los engranajes cónicos y los reductores sinfín de Norelem están templados y cementados respectivamente para alcanzar una resistencia superior. La dirección de giro del árbol de ambos productos es de libre elección para ofrecer una mayor flexibilidad y facilidad de uso, y se monta mediante un simple tornillo de fijación. Ambas gamas pueden funcionar en temperaturas de -20 °C a +60 °C.