Aimen, además de coordinar la iniciativa, está probando a escala demostración desarrollos propios de sensores ópticos para monitorizar y controlar la producción de ácidos orgánicos y bioplásticos
Aimen recibe el Premio de la Industria del Agua del Reino Unido por su proyecto Incover
Aimen ha sido distinguido en los Premios de la Industria del Agua del Reino Unido 2018 (Water Industry Awards 2018) en la categoría iniciativa de recuperación de lodos y recursos gracias al proyecto europeo Incover, que lidera el centro tecnológico. Estos premios, que organizan WET News y Water & Wastewater Treatment, se otorgaron en la ceremonia celebrada en Birmingham el pasado 21 de mayo, son unos de los galardones más prestigiosos de la industria del agua en Europa.
La iniciativa Incover tiene como objetivo desarrollar y validar tecnologías innovadoras y sostenibles para la recuperación de recursos de valor añadido (bioplásticos, biofertilizantes o ácidos orgánicos) a partir de aguas residuales urbanas e industriales, empleando metodologías inteligentes de control y operación.
En el marco de este proyecto se están llevando a cabo tres casos de estudio. El primero está ubicado en las instalaciones de la Universitat Politécnica de Catalunya en Viladecans y su objetivo es tratar agua residual de origen agrícola con cianobacterias en fotobiorreactores para obtener bioplásticos y, con el apoyo de otras tecnologías, también se consigue generar biometano, biofertilizantes y agua apta para el uso agrícola.
El segundo caso se valida en las instalaciones de Aqualia en Chiclana de la Frontera (Cádiz) y Almería y aplica bacterias y microalgas para tatar agua urbana en sistemas de lagunas abiertas, con los que se obtienen bioplásticos y se recuperan nutrientes como fósforo y nitrógeno, así como agua para regadío. El último caso de estudio se sitúa en The Helmholtz Centre for Environmental Research-UFZ (Leipzig-Alemania) y se encarga de tratar aguas procedentes de restauración con levaduras con el objetivo de conseguir ácido cítrico, un compuesto muy demandado en la industria química.
Aimen, además de coordinar la iniciativa, está probando a escala demostración desarrollos propios de sensores ópticos para monitorizar y controlar la producción de ácidos orgánicos y bioplásticos, con los que consigue reducir al 50% el coste total de operación y mantenimiento.
Área medioambiental
La unidad de I+D+i en Tecnologías Ambientales de Aimen, coordinada por Luz Herrero, centra sus innovaciones en el tratamiento de aguas residuales mediante tecnologías basadas en procesos naturales; el control de la calidad del agua a través de sensores ópticos y fotónicos; la valorización de residuos mediante la producción de biogás o de nuevos materiales, como los geopolímeros; o la ecoeficiencia y análisis de impacto ambiental de nuevos procesos y productos.
En palabras de Luz Herrero, ganar este prestigioso premio supone para Aimen “un reconocimiento internacional y visibiliza el esfuerzo que ha realizado el centro tecnológico en los últimos años para transferir sus resultados en investigación y llevarlos a su máximo nivel de excelencia y aplicación en el sector del medio ambiente para contribuir a la economía circular". Además, indica, “es muy alentador que sea el propio sector del agua el que reconozca la valía del proyecto Incover, ya que facilita la implantación futura de los resultados de esta iniciativa”.
Consorcio Incover
El proyecto Incover está desarrollado por un consorcio liderado por Aimen y en el que participan en total 18 organizaciones de siete países europeos: Aarhus University-AU (Dinamarca), Center for Recirkulering-Recirku (Dinamarca), ICLEI (Alemania), ISLE (Reino Unido), Office International de L'eau-OIEAU (Francia), Biotrend (Portugal), Renergie Système GmbH& Co. KG (Alemania), iBET (Portugal), Autarcon (Alemania), Danish Technological Institute-DTI (Dinamarca), Solar Spring (Alemania), Universidad de Valladolid (España), Aqualia (España), Universitat Politécnica de Catalunya (España), The Helmholtz Centre for Environmental Research-UFZ (Alemania), Future Intelligence (Grecia) y Simbiente (Portugal).
La iniciativa, que tiene una duración de tres años y finaliza en mayo de 2019, tiene un presupuesto de 7,2 millones de euros, y cuenta con la financiación de la Comisión Europea en el marco del proyecto Horizonte 2020.