Motorreductores de WEG para aumentar la fiabilidad y la eficiencia
Extraer aceite puro de las aceitunas es un proceso complejo, que requiere mucha energía y que conlleva operaciones como, por ejemplo, limpiar, mezclar la pasta y separar los sólidos de los líquidos. Pieralisi, la única empresa que fabrica maquinaria industrial para cada paso de este proceso, ha confiado en los motorreductores de WEG para reducir el tiempo de instalación y aumentar la eficiencia energética, la durabilidad y la productividad.
Fundada en 1988 en Monsano (Italia), Pieralisi produce al año unos 900 sistemas completos para todo el proceso de producción de aceite de oliva y es el mayor productor de este tipo de maquinaria, no solo en Italia y en España, sino en todo el mundo. En una de sus plantas principales de Zaragoza (España), la empresa ha buscado la asistencia de WEG para abordar algunos problemas asociados con la cadena de transmisión de la maquinaria.
Tras limpiar y triturar las aceitunas, éstas pasan por un proceso llamado amasado, donde se calientan y se convierten en una masa homogénea preparada para los procesos de separación y centrifugado. Las enormes máquinas diseñadas por Pieralisi que ejecutan esta etapa tan importante del proceso de producción (de 5 metros de largo, 1,7 metros de alto y una capacidad de depósito de 6000 litros) presentaron un conjunto único de retos.
Los componentes de transmisión que accionan la mezcladora constan de varios elementos, entre ellos, una cadena de transmisión externa. El sistema requería un largo proceso de instalación y también se enfrentaba a problemas de mantenimiento como cadenas rotas o desconectadas.
Para abordar dichos problemas, WEG recomendó el motor de engranaje cónico helicoidal K80 fabricado por su filial especialista en tecnología de transmisión WattDrive. Diseñado para ser instalado directamente en el eje del lateral de la máquina, el motor proporciona una interfaz de máquina de fácil instalación que permite a los ingenieros de Pieralisi reducir el tiempo de montaje.
El K80, un sistema contenido e integrado sin elementos móviles externos adicionales, también elimina el riesgo de ruptura o desconexión de los elementos, lo que reduce los costes de mantenimiento.
Menos piezas móviles también se traduce en una fricción reducida, lo que da como resultado menor consumo de energía y menor disipación de calor y, por lo tanto, mayor eficiencia energética (según los estándares IE3). Pieralisi estima que cada motor permite que el usuario alcance un ahorro en consumo eléctrico de hasta 2 kWh. Teniendo esto en consideración y según el modelo, las máquinas de amasado se accionarán gracias a dos o tres motorreductores K80 de WEG, por lo que tendrán un impacto significativo en la eficiencia energética de las plantas de producción de aceite de oliva.
“Los productores de aceite de oliva son cada vez más conscientes del coste total de propiedad de la maquinaria fundamental, como las máquinas de amasado, y exigen una tecnología energéticamente más eficiente y más fiable”, comentó Alejandro García, director técnico de la planta Pieralisi en Zaragoza. “WEG nos ha permitido proporcionar a nuestros clientes máquinas que son más eficientes en relación a la energía, más fiables y más resistentes, lo que nos ayuda a ser más competitivos en el mercado”.