OnRobot elige España como base de operaciones para SEMEA
El sector de la robótica aplicado a la industria está en pleno crecimiento. Los robots colaborativos, denominados cobots, son uno de los segmentos de mayor crecimiento de la automatización industrial, y se multiplicará por diez para el año 2025, hasta alcanzar el 34% de todas las ventas de la industria robótica. Una industria en plena eclosión mundial cuya demanda vendrá condicionada por su utilización para cada vez mayor variedad de aplicaciones y accesibilidad a industrias de mediano y pequeño tamaño.
En este contexto, OnRobot elige España como centro neurálgico de operaciones para SEMEA desde donde gestionará diferentes países del Sur de Europa (España, Francia, Italia, Turquía, Portugal, Grecia y Malta), Oriente Medio y África. De este modo España se convierte en el segundo país europeo en el que la compañía danesa, fundada en 2015, despliega operaciones dentro de su estrategia de expansión internacional.
OnRobot desarrolla los kits y tecnologías de agarre y detección más vanguardistas de la industria para los brazos robotizados que se utilizan actualmente en la automatización de numerosos procesos industriales, tales como fabricación de productos electrónicos, cadenas de suministro automotriz, empresas de fabricación de metales y packaging.
La compañía tiene como objetivo posicionarse como el líder global de aplicaciones colaborativas para la industria robótica y a medio plazo ser el “one-stop-shop” donde encontrar cualquier solución de hardware y software necesarias para la rápida y sencilla equipación y reprogramación de cualquier brazo robotizado para diferentes aplicaciones y tareas.
“La robótica colaborativa es un avance hacia la industria 4.0 y requerirá una mayor interconectividad entre los elementos, facilidad de uso, excelente relación coste-efectividad, así como seguridad para los trabajadores”, afirma Enrico Krog, fundador de OnRobot. “A medida que el robot se convierta en una “commodity” la industria robótica evolucionará hacia las aplicaciones colaborativas donde el valor residirá en la rapidez y facilidad de intercambiar y reprogramar los efectores finales de los brazos robóticos para poder realizar cualquier aplicación y tarea”.
Tecnología de la Nasa aplicada a la industria
OnRobot comercializa en la actualidad los kits de integración para el final de brazos robotizados más innovadores de la industria, entre ellos destaca la tecnología de Gecko, que permite sujetar y elevar cualquier tipo de superficie plana. Una tecnología que ha utilizado la Nasa en sus proyectos.
Sentido del tacto, tecnología y agarre inteligente como los movimientos humanos, los elementos robóticos de OnRobot aumentan los rendimientos de la cadena de producción hasta un 80% y mejoran los resultados finales.
La compañía OnRobot nace en 2015 en Odense (Dinamarca), clúster de la robótica. La compañía adquirió durante 2018 la empresa húngara OptoForce y la compañía estadounidense Perception Robotics, seguida de una posterior adquisición de la empresa danesa Purple Robotics. Tras las fusiones se decidió mantener el nombre de OnRobot, nombre original de la empresa fundada por Enrico Krog.
El potencial de mercado de la robótica es enorme. En palabras de Enrico Krog: “las pequeñas y medianas empresas no habían sido capaces hasta ahora de incorporar robots debido al coste elevado de su implantación, sin embargo, van encontrando en los cobots unos aliados que les permiten automatizar procesos y reducir costes para hacerlos más efectivos”.
“En cuanto a los sectores, los de automoción y electrónica son los que están adoptando un mayor número de cobots para aumentar la automatización en sus instalaciones de producción. El sector de la electrónica tiene quizás algunos de los ciclos más rápidos de diseño y variabilidad de los productos y, por lo tanto, requiere la mayor automatización proporcionada por el uso de robots colaborativos”, concluye el fundador.