Festo explicó las claves de la fábrica del futuro en el marco de las XXXV Jornadas de Automática
Hacia una nueva revolución industrial
Durante tres días, más de 200 expertos de todo el país hablaron de los últimos avances y proyectos sobre automatización y control. El campus de la UPV se convirtió en el punto de encuentro de investigadores, empresas y profesores que trabajan en este campo. Festo participó con una conferencia sobre la industria 4.0 y su muestra tecnológica Tecnoferia, una sala de exposiciones móvil que recogía las más recientes novedades en aplicaciones de automatización, implementadas ya por la compañía.
“Nuestro objetivo fue transmitir la aplicación práctica de la automatización en la industria, haciendo un análisis de la situación actual del sistema productivo industrial y una prospectiva del camino hacia el que nos dirigimos”, apunta Javier Otamendi, director comercial en España de la división de Sistemas de aprendizaje de Festo.
La automatización pasa actualmente por uno de sus momentos de cambio más importantes, y está generando una auténtica revolución en los procesos productivos. De la misma forma que ha ocurrido en el ámbito de la computación, al igual que se habla de smart city, se está empezando ya a hablar de smart factory. Pero, ¿cómo es esa fábrica inteligente? En primer lugar, la inteligencia estará descentralizada; del mismo modo que el cuerpo humano cuando respira no es consciente de ello, no nos damos cuenta hasta que no podemos hacerlo, los sistemas de las fábricas inteligentes funcionarán igual: el ordenador central sólo tendrá que trabajar cuando detecte algún problema. Asimismo, las fábricas contarán con sistemas modulares y de producción flexible, sensores inteligentes de altas prestaciones, etc.
Por encima de todo ello, un concepto clave: la inteligencia del producto. Antes era la máquina, pero en la fábrica 4.0 es el producto el que manda. Pasamos de la inteligencia en el entorno a la inteligencia en el desarrollo, “y todo aquel que quiera ser competitivo es esta la línea que deberá seguir”. En la fábrica del futuro es el producto el que transmite la información; cada uno es diferente y personalizado, por eso aumenta el grado de especialización y es a ese reto continuo de cambio al que las empresas deberán responder.
Asimismo, dentro de este ámbito destaca la importancia del cloud computing, pues en estas nuevas fábricas la inteligencia estará en la “nube”, no ya en los ordenadores o en los PLC. Pasaremos de un sistema piramidal a una red en la nube de sistemas de control y eso, al final, lo que generará es un aumento importantísimo de productividad.
“Las tecnologías de la información están modificando absolutamente todo. Esto ya lo habíamos visto en nuestra vida cotidiana, pero ese paso no se había dado en la industria y ahora ya está apareciendo. Hemos de conseguir que una fábrica europea sea más productiva y genere mayor valor añadido que cualquier fábrica china, y eso pasa ineludiblemente por la fábrica 4.0”, explicó Otamendi.
Así, durante tres días, todo aquel que se acercó hasta Tecnoferia en la Universitat Politècnica de València pudo ver de primera mano algunos de esos elementos que configurarán la nueva fábrica del futuro, desde cámaras de visión artificial, sistemas de manipulación con servomotores y controladoras que pueden trabajar de forma autónoma, sistemas de control distribuidos. “Todos estos son elementos que junto con las novedades y mejoras que vendrán en los próximos años van a permitir que vivamos una nueva revolución industrial”, añadió Otamendi