Rehabilitación energética y excelencia, motores de recuperación en el sector de la construcción
Bruno Gutiérrez Cuevas, presidente de la Plataforma de Edificación Passivhaus
03/07/2020El principal motivo es que este confinamiento ha demostrado que las viviendas en las que pasamos la mayor parte de nuestro tiempo no están bien construidas, no podemos disfrutar en ellas con una calidad de aire interior óptima y pierden gran cantidad de energía. De hecho, cuatro de cada cinco edificios en España son ineficientes, lo que significa que no cuentan con los niveles adecuados de aislamiento térmico, o que incluso carecen de él, tienen filtraciones de aire incontroladas que repercuten en el consumo energético y no emplean sistemas de generación eficientes.
Bruno Gutiérrez Cuevas, presidente de la Plataforma de Edificación Passivhaus.
Por esta razón, ahora más que nunca, es importante que se refuerce la nueva Estrategia de Rehabilitación Energética en el Sector de la Edificación en España (ERESEE 2020) que tiene como objetivo rehabilitar energéticamente entre 120.000 y 300.000 viviendas al año. Este debe ser el motor de la recuperación que, reactivando nuestra economía y creando empleo, va a mejorar la eficiencia y la adecuación a las necesidades de nuestras viviendas, edificios y ciudades, y esto redundará en nuestra calidad de vida y salud.
De hecho, con las mejoras en la envolvente térmica y la renovación de instalaciones térmicas de calefacción y aire acondicionado de este número de viviendas se podría incrementar el ahorro en gasto energético cada año entre 25 y 32 millones de euros y evitar emitir a la atmósfera casi 50 toneladas de CO2. Por ejemplo, al finalizar la década podríamos estar en un nivel de ahorro acumulado de 1.440 millones de euros y se dejarían de emitir 850 toneladas de CO2.
Para lograrlo, las autoridades deben reforzar su apoyo a la edificación de alta eficiencia energética en la construcción porque esto, no solo será clave para reactivar el sector de una forma sostenible, sino que tendrá un importante retorno en cuanto a reducción de emisiones, mejora de la calidad del aire, mayor confort, en definitiva, una mayor calidad de vida que beneficie a toda la sociedad. En este sentido, cabe destacar que hemos sido muy activos enviando nuestras propuestas a los miembros de la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social del Congreso de los Diputados, que se centran en fomentar la excelencia y la especialización en el sector de la construcción.
Es importante considerar que antes de la crisis el sector empleaba a más de 1,3 millones de trabajadores. Por ello, es el momento de apostar por la formación adecuada y especializada en los nuevos oficios y sistemas constructivos que demanda la construcción de edificios de consumo casi nulo y el estándar Passivhaus para fomentar la excelencia en el sector de la construcción, que contribuya a mantener el empleo en el sector.
Además, pedimos a las administraciones autonómicas y locales que ofrezcan ayudas a la construcción de estos edificios, con deducciones en el IBI, el ITP o el ICIO, y una flexibilización fiscal tanto a los promotores como usuarios finales que decidan hacer un esfuerzo por vivir en casas sostenibles y saludables, bajo criterios contrastados, como es la construcción pasiva.
La rehabilitación energética y la excelencia en el sector de la construcción deben ser, sin duda, los motores de recuperación en la era post-COVID porque, ante todo, responden a las necesidades de una sociedad que demanda calidad de vida y salud.