Entrevista a Adelina Uriarte, presidenta de la Plataforma de Edificación Passivhaus
Desde hace unos años oímos hablar asiduamente de conceptos como ahorro y eficiencia energética en la construcción y edificios de consumo casi nulo. Entre todas las posibilidades para crear edificios que generen un consumo energético prácticamente inexistente en la generación de condiciones de confort en su interior se encuentra el estándar Passivhaus. Hemos conversado con Adelina Uriarte, presidenta de la Plataforma de Edificación Passivhaus, quien nos ha explicado en qué consiste este tipo de construcción y la situación del mismo en España.
Los edificios residenciales de nueva construcción, a partir de 2020, deberán generar un consumo energético casi nulo. ¿Cómo responde el estándar Passivhaus a las exigencias de los ECCN?
Los Edificios de Consumo Casi Nulo son edificaciones que apenas necesitan energía para mantener las condiciones de confort en su interior. En este sentido, una de las vías de trabajo más eficaces viene marcada por el estándar Passivhaus, uno de los más completos y exigentes del mundo, que establece altos límites a la demanda energética de un edificio y puede suponer un ahorro en el consumo de energía de hasta un 90% con respecto a la de un edificio convencional.
El estándar Passivhaus no es el único modelo de trabajo hacia el consumo casi nulo, pero sus prestaciones y eficacia han sido medidas y contrastadas durante más de 25 años, y demuestran que sabemos y podemos construirlos.
¿Qué criterios debe cumplir una vivienda o edificio de uso terciario para ser considerado pasivo?
Para que un edificio sea considerado Passivhaus, debe cumplir los requisitos mínimos que marca el estándar, es decir, una demanda energética para calefacción y refrigeración menor o igual a 15 Kwh/m² por año (más una variante vinculada al clima local para la deshumidificación en el caso de refrigeración); una demanda de energía primaria menor o igual a 120 Kwh/m²por año; y una hermeticidad al paso de aire menor o igual a 0,6 renovaciones/hora a 50 pascales de presión.
Como estándar estos son los requisitos, pero para garantizar que el edificio los cumple es recomendable la certificación que se realiza por un auditor externo en representación del Insituto Passivhaus.
El estándar Passivhaus surgió en países centroeuropeos, adaptado a sus condiciones climáticas. En países del sur de Europa, ¿cómo se aplica el estándar, se siguen los mismos criterios que en el resto o se adapta a las condiciones particulares?
El modelo de construcción sobre estándar Passivhaus puede aplicarse a cualquier clima, buscando en cada caso el máximo aprovechamiento del sol y la orientación del edificio. A partir de ahí, basta aplicar exhaustivamente cinco principios básicos en la construcción del edificio o vivienda de forma coordinada y simultanea: utilizar un aislante térmico de gran espesor; eliminar los puentes térmicos; incluir ventanas de altas prestaciones (incluso triple acristalamiento, para los climas más severos); garantizar la hermeticidad al aire entre el interior y el exterior; y, con el fin de cumplir los requisitos de salubridad que exige la normativa, implementar una ventilación mecánica con recuperación de calor de alto rendimiento, lo que se logra con un intercambiador de muy alta eficiencia que puede recuperar hasta un 90% de la energía del aire que se extrae y que cede al aire que entra.
Pabellón 4 del antiguo Hospital Militar de Burgos. Actualmente es el Aulario del UBU (Universidad de Burgos). Es un ENERPHIT.
En los climas cálidos, para que el calor no entre en verano, es necesario tener muy presente un control del sobrecalentamiento interior de los edificios mediante el empleo de barreras de protección exterior y de sombreado que se incluyen en el diseño del proyecto. Entre los elementos más utilizados se encuentran los voladizos y las lamas orientables, tanto motorizadas como domotizadas. Estas barreras son clave para proteger las superficies de vidrio susceptibles de recibir radiación solar y muestran mayor eficacia que las técnicas de protección interior por sí solas que, si bien ayudan, no son la solución ideal.
¿Cuál es la situación del Passivhaus en España?
España está muy por detrás de otros países desarrollados en cuanto a utilización del estándar Passivhaus para certificar edificaciones de consumo casi nulo. Menos del uno por ciento de los nuevos edificios construidos en España cumple este estándar.
Sin embargo, a mí me gusta siempre ser positiva y confiar en nuestra capacidad de mejorar. Por eso, aunque hay que redoblar nuestros esfuerzos, también es cierto que el interés crece cada día más en todos los ámbitos y, aunque tímidamente, el estándar Passivhaus está teniéndose cada vez más en cuenta en el sector de la construcción. Superada ya la escala de vivienda unifamiliar, se están construyendo edificios colectivos y promociones públicas de vivienda protegida, así como edificios públicos y privados de usos diversos, bajo estándar Passivhaus. La actual cifra de edificaciones certificadas en España supera los 68.000 m2 cuadrados construidos, y se computan 225.000 m2 más gracias a los más de 70 proyectos en marcha en Andalucía, Aragón, Castilla León, Cantabria, Cataluña, Comunidad de Madrid, La Rioja, Navarra, País Vasco, Asturias, La Rioja, Comunidad Valenciana y Galicia.
Vivir en una casa Pasiva, ¿supone una gran inversión para el usuario? ¿Cuánto cuesta amortizar esa inversión?
Aunque el coste de construir una vivienda pasiva puede ser ligeramente superior (entre el 3% y el 8% en el peor de los casos, al de una ‘no pasiva’), el coste global de la vivienda, al que sumamos el coste energético durante su vida útil, es más económico ya que esta diferencia inicial se amortiza entre los primeros 5 y 10 años de uso, dependiendo del tamaño de la edificación, gracias al elevado ahorro en la factura energética.
Placa acreditativa de UNA vivienda Passivhaus de Can Tanca (Ibiza).
¿Qué labores ejerce la Plataforma de Edificación Passivhaus? ¿Cómo trabaja en la promoción y certificación de edificios Passivhaus?
La Plataforma de Edificación Passivhaus, que actualmente cuenta con más de 600 socios, es una asociación sin ánimo de lucro que engloba a profesionales, empresas y personas con inquietudes y conocimientos en el campo de la edificación energéticamente eficiente.
Nuestra labor es reivindicar una legislación más exigente y divulgar nuestras experiencias y conocimientos en el campo de la construcción eficiente tanto a administraciones públicas como a profesionales de la construcción y ciudadanos. Por ello, todas aquellas nuevas edificaciones bajo el estándar serán apoyadas durante todo el proceso por la Asociación y sus socios.
Como parte de la International Passive House Association y de EuroPHit, trabajamos en la difusión y formación de técnicos y profesionales del sector de la construcción a través de eventos formativos: jornadas, conferencias, cursos, visitas a edificios construidos, concursos y exposiciones en todo el territorio nacional.
Palacio de Congresos Europa, en Vitoria. Copyright: Lurgoien y Ayuntamiento de Vitoria.
El máximo objetivo por el que está trabajando la Plataforma de Edificación Passivhaus en España es hacer saber que es posible vivir con el máximo confort, consumiendo la mínima energía y ahorrándonos dinero en el proceso.
Cada vez existen más productos certificados Passivhaus. ¿Qué requisitos ha de cumplir un producto para contar con esta certificación y qué pasos debe dar una empresa para obtenerla?
Es cierto que en España existen cada vez más productos certificados Passivhaus. Para que una empresa logre certificar su producto, debe someterlo a los rigurosos ensayos y controles establecidos por el Passive House Institute; por ejemplo, las carpinterías deben ser ensayadas según la UNE-EN ISO 10077-2:2008 y no con otros ensayos más comunes para estos elementos. De esta forma, se garantiza que estamos ante un producto de máxima calidad y que satisface los requisitos necesarios para cumplir el estándar.
Y, obviamente, cuanto más se demanden o se exijan, mayores oportunidades encontraremos en el mercado.
En la Plataforma de Edificación Passivhaus contamos con fabricantes de materiales certificados para edificios Passivhaus, entre ellos: una veintena de fabricantes de ventanas; distribuidores de diversos productos para la hermeticidad o distintas marcas de equipos de ventilación de altísima eficiencia. Casi todos aparecen en la página web de PEP (http://plataforma-pep.org/), ya que estas empresas también nos ayudan en nuestra tarea divulgativa.
¿Qué grado de implicación tienen las administraciones públicas en la promoción de los edificios ECCN y, en particular, con el Passivhaus? ¿Cómo se trabaja para mejorar esa implicación?
Respecto a los edificios ECCN, la Unión Europea ya ha hecho sus deberes con la Directiva Comunitaria 2010/31 sobre eficiencia energética, que indica a los estados miembro que, desde el 31 de diciembre de 2018, todos los edificios públicos han de ser de consumo casi nulo y todos los edificios, sin excepción, lo han de ser a partir del 31 de diciembre de 2020.
Biblioteca pública de Villamediana de Iregua (La Rioja).
En España aún no se ha hecho la transposición de la Directiva, no se sabe muy bien si por un sincero interés por la eficiencia energética o por el factor de no tener que hacer frente a las posibles sanciones derivadas del incumplimiento de la Directiva Comunitaria. Sin embargo, el pasado mes de junio la administración empezó a reaccionar con una definición, hasta entonces incomprensiblemente inexistente, de Edificio de Consumo Casi Nulo (ECCN) como aquel que “satisfaga los requisitos mínimos que en cada momento se determinen en el Código Técnico de la Edificación”. El resultado ambiguo, inexacto y claramente insuficiente, en lugar de ayudar creemos que genera confusión, lo que supone una traba importante al avance hacia el cumplimiento de las exigencias europeas en materia de construcción sostenible.
En cuanto a Passivhaus, desde PEP estamos aunando esfuerzos para colaborar con las Administraciones Públicas y para ello hemos establecido una ronda de contactos con el fin de acercarles Passivhaus y concienciarles sobre la importancia de construir eficientemente bajo uno de los estándares más exigentes. En este sentido, cabe destacar que cerca de 60 entidades públicas, entre ellas los Ayuntamientos de Burgos, Vitoria, Montilla, Padul, Soria y Coronil, han rubricado su compromiso en este aspecto a través de su adhesión al Manifiesto por la Eficiencia Energética ‘Vivir mejor consumiendo menos energía’, promovido por PEP.
