Cómo proteger el foso del ascensor de las humedades por 90 euros
En la mayoría de las ocasiones, la parte visible de las viviendas e inmuebles –las fachadas, ventanas, tejado, etc– son las que se llevan todas nuestras atenciones y mantenimiento, ya que son las que están 'de cara al público'. Pero no hay que olvidar que en la mayoría de edificios también existen estructuras enterradas, que no se ven, pero están ahí y también requieren de cuidados para no deteriorarse.
Es el caso de los fosos de los ascensores o los sótanos, partes fundamentales de un inmueble y que suelen ser blanco perfecto para las humedades y filtraciones de agua al estar por debajo del nivel del suelo. Por ello, es importante impermeabilizarlas correctamente para que el edificio se mantenga en perfectas condiciones. Y en el caso de los fosos de los ascensores, es posible hacerlo por unos 90 euros para un foso con una superficie media de 18 metros cuadrados –el coste del material es de cinco euros el metro cuadrado– de manera sencilla y rápida, según Danosa, especialista en soluciones integrales para la construcción sostenible.
El sistema de impermeabilización Danocret Protect Flex permite proteger adecuadamente estas zonas subterráneas de las humedades, ya que resiste a ciclos de hielo y deshielo y evita humedades por condensación. Además, también protege de la aparición de eflorescencias –esas manchas blancas tan antiestéticas en los muros y paredes–. En concreto, se trata de una membrana elástica impermeabilizante con una excelente adherencia al soporte de fácil y rápida instalación, ya que se puede aplicar aunque el foso o los muros estén húmedos y solo tarda en secarse entre seis y ocho horas en invierno y cuatro en verano.
Pero sus prestaciones van más allá, pues también se pueden impermeabilizar con él los depósitos de agua, ya que su composición es compatible con el agua potable y puede entrar en contacto con ella sin contaminarla. Igualmente, se puede emplear para impermeabilizar terrazas, balcones, baños, cocinas y piscinas, por lo que se trata de un producto versátil y adaptable a las circunstancias climáticas y del soporte.
Tal y como señala el responsable técnico de impermeabilización de Danosa, Ignacio Hombrados, “es fundamental que este tipo de construcciones enterradas se protejan igual que las que están al descubierto, pues el ataque de las humedades puede afectar a la estructura del edificio, con las consecuencias negativas que ello conlleva a la larga”.