Elementos de protección solar, claves en el aislamiento
La energía se ha convertido en una de las grandes preocupaciones del siglo XXI. Son muchos los hogares que en la actualidad necesitan prescindir de refrigeración o calefacción en demasiadas ocasiones por no aumentar su factura de gas o luz. Pero hay otras maneras de equilibrar la temperatura de nuestros hogares, sin necesidad de recurrir a la energía. La clave está en un eficaz aislamiento. En este sentido la fachada o envolvente son claves para conseguir un mayor ahorro energético y por tanto, disminuir el gasto final.
Los elementos arquitectónicos que colocamos en los huecos de las paredes, como son ventanas, persianas, toldos, e incluso estores o cortinas, tienen gran importancia, pero sin embargo no le prestamos apenas atención, algo que en Persax nos sigue sorprendiendo mucho, debido al gran ahorro energético que generan.
Si se utilizan de forma correcta los elementos de protección solar y se cuenta con un buen aislamiento, se puede evitar hasta un 50% de fugas de calor o frío, ya que pueden escaparse a través de ventanas y acristalamientos, marcos y molduras de puertas y ventanas, lamas y cajones de persianas, etc. Evitar facturas de luz demasiado elevadas, así como un consumo mucho más eficiente y responsable de la energía es uno de los objetivos fundamentales de cualquier hogar.
Para conocer cuál es el estado del aislamiento de nuestro hogar, debemos comprobar si existen fugas en los huecos de las paredes alrededor de la persiana, o a través del cajón de ésta. Basta con realizar una simple comprobación realmente eficaz y sencilla al mismo tiempo. En primer lugar, quitamos el frontal del cajón de persiana, dejándolo totalmente al descubierto. A continuación, cogemos una simple vela encendida o un mechero con llama y lo movemos a lo largo del cajón. Si la llama de la vela se mueve, significa que el aire entra por algún rincón del cajón de la persiana y, por lo tanto, ya tenemos localizadas las fugas para poder actuar en consecuencia.
En muchas ocasiones, el usuario pasa por alto que las ventanas y el cajón de la persiana son, casi siempre, los puntos débiles de la calefacción o aire acondicionado, dada la gran cantidad de energía que se escapa a través de estos elementos y la gran cantidad de frío o calor que se puede llegar a filtrar.
Una de las posibles soluciones que podemos adoptar en casa, con materiales sencillos y accesibles a todo el mundo, es rellenar los huecos alrededor del cajón de la persiana en los que existan fugas, con materiales aislantes, como puede ser cartón o poliuretano o cualquier otro tipo de material similar. De esta manera, disminuiremos las fugas que provocan las filtraciones de aire desde el exterior, en el caso de que no tengamos previsto cambiar la equipación arquitectónica de nuestra casa, aunque sin duda lo mejor es incorporar elementos de protección solar que consigan este aislamiento, sin necesidad de parches.
Y es que optimizar la energía de nuestro hogar es imprescindible para conseguir el confort y la calidez que requieren nuestras casas. Como director adjunto de Persax y, como consumidor responsable, considero que para hacer un uso eficiente de la energía en nuestras estancias es fundamental conservar la temperatura ideal de nuestros hogares, aprovechando la luz natural y evitando perder energía.
Lo más recomendable en caso de tener fugas, es mejorar la calidad de los materiales que componen nuestras estancias y hogares, y en concreto, referente al aislamiento. En este sentido existen tres aspectos que hay que tener en cuenta: la lama, el cajón y el motor de las persianas. En cuanto al cajón de persiana, hay que prestar una especial atención, ya que no todos los que existen en el mercado son iguales. Para ello hay que conocer cuál es su coeficiente de transmitancia térmica (U), que es el flujo de calor (W) entre la superficie (m2) y la diferencia de temperatura (K). De este cálculo se obtiene un resultado, y cuanto menor valor resulte, mayor es su eficiencia. En una ventana de buena calidad, el coeficiente de transmitancia térmica es de 2W/m2K, por tanto el cajón tiene que tener, al menos, el mismo valor para que no se produzcan pérdidas de calor/frío en la vivienda.
El cajón Energy de Persax que posee valores de aislamiento térmico y acústico muy elevados (1,20 W/m2k), o el nuevo cajón de obra Túnel que hemos incorporado en Persax, que también tiene elevadísimos valores de aislamiento térmico (< 1 W/m2K), lo que los convierte en una de las mejores opciones que existe actualmente en el mercado, están diseñados para asegurar la certificación energética, aportando un mayor ahorro de energía en la vivienda y evitando que el aire frío o caliente, o cualquier otra inclemencia se adentre en el recinto. De hecho, en Persax estamos en constante investigación con nuevos materiales que supongan una mejora térmica, consiguiendo así un mayor ahorro energético.
Otro aspecto que contribuye eficazmente a mejorar el aislamiento de la ventana es la lama de persiana. Es poco conocido el dato de que con un simple gesto como abrir o cerrar una persiana se puede controlar la temperatura de la estancia en varios grados, así como la entrada de ruidos desde el exterior. En este sentido, lo más aconsejable son las lamas de aluminio perfilado rellenas de poliuretano, en especial los modelos de alta densidad, que se caracterizan por su alta resistencia debido a su mayor densidad de poliuretano, proporcionando a la ventana una excelente resistencia térmica y, por tanto, mayor eficiencia.
Una buena opción es el sistema Extreme, cuya resistencia es su gran valor, obteniendo la clase 4 de resistencia al viento, la máxima clasificación ya que soportan incluso la presión de vientos huracanados de más de 200 km/hora, lo que la hace perfecta además como respuesta ante cualquier robo, incluso para soportar los prolíferos y tan temidos alunizajes.
Si además unimos la domótica a los elementos de protección solar conseguimos que hogares o negocios se conviertan en recintos más inteligentes capaces de dar respuesta a las necesidades de protección solar y aislamiento. Por su parte, las soluciones de protección solar, como persianas, celosías, estores y toldos las que constituyen un elemento viable para el control de la luz en cualquier tipo de estancia, protegernos del sol y frío y, por tanto, reducir el consumo energético y minimizar el uso de climatizadores en el hogar. Pueden reducir la temperatura ambiente en unos 9º en verano, tal y como se extrae del estudio realizado por el Centro de Fomento de la Investigación Sostenible de la Universidad de Minessota.
Además, permiten una reducción de entre el 30% y el 50% del consumo eléctrico en la climatización de las estancias, datos a tener en cuenta si contamos con que los sistemas de climatización son el elemento de mayor consumo, hasta un 69% del total. Y si además los automatizamos conseguimos ir un paso más allá, y que persianas y toldos reaccionen de forma automática a las variaciones climáticas, sin necesidad de que nadie la accione, reduciendo la necesidad de sistemas de climatización artificial.